Colores y notas

La humedad, como en cualquier parte, acrecienta la sensaci¨®n de calor en el litoral valenciano. Pero hace un par de a?os la ola de calor que invadi¨® el continente europeo nos llev¨® a temperaturas mucho m¨¢s altas. Miles de ancianos fallecieron en los hospitales franceses y el aire se le hac¨ªa irrespirable a la jovencita que en el valle del Danubio mejoraba sus conocimientos de idiomas extranjeros. Fue por entonces, por los calurosos d¨ªas estivales del 2003, cuando Antoni Luque se deleitaba atento, una y otra vez, con la m¨²sica de Franz Schubert. M¨¢s concretamente con una serie de poemas del rom¨¢ntico Wilhelm M¨¹ller a los que el compositor le puso sus notas. Schubert, dice Luque, "sabe fundir las notas con las palabras del poeta de tal forma que transforma el anhelo l¨ªrico en grave expresi¨®n dram¨¢tica".

El valenciano Antoni Luque vive en Vila-real y es un hombre de cultura que ejerce de valenciano, sin que las colinas que protegen La Plana de los rigores del invierno le impidan una visi¨®n ancha y europea del mundo. Es un hombre reservado que intenta ense?ar filosof¨ªa a los j¨®venes, que lee y escribe cuando el tiempo lo permite, que toca el piano y pinta: m¨¢s semejante a los polifac¨¦ticos humanistas del Renacimiento que a los tontos especializados en que en muchas ocasiones nos convierten los tiempos modernos. En ocasiones, como cuando aprieta la calor, es m¨¢s que conveniente dirigir nuestra mirada, aunque sea de soslayo, a esos luques que habitan entre nosotros, que calladamente trabajan y que, con ser importantes, carecen de protagonismo en las primeras p¨¢ginas.

Durante casi un mes, y en el Centre de Cultura La Merc¨¦ de Burriana, estuvieron colgadas unas deliciosas pinturas expresionistas de Antoni Luque. Son cuadros peque?os casi como nuestras manos, pinturas realizadas con resinas acr¨ªlicas y tinta que reflejan la imaginaci¨®n y creatividad del autor, inspirado en el Winterreise ( Viatge d'Hivern), en la m¨²sica que Schubert fundi¨® con los poemas rom¨¢nticos de M¨¹ller. No de la m¨²sica, pero s¨ª de los poemas y los cuadros de la exposici¨®n de Burriana ha quedado constancia refrescante, estos d¨ªas de agobio y altas temperaturas, en un libro editado conjuntamente por el Ayuntamiento de la ciudad naranjera, por la Diputaci¨®n provincial y por la Bancaixa. La edici¨®n en un correcto valenciano normativo y acad¨¦mico viene presentada por Jos¨¦ Ram¨®n Calpe Saera, hombre relacionado con la m¨²sica, delegado de cultura del Magn¨ªfico Ayuntamiento de Burriana, y en m¨¢s de una ocasi¨®n diputado del PP en las Cortes Generales. Calpe Saera indica con acierto en el pr¨®logo del libro que Luque - que pas¨® del cromatismo de las escalas m¨²sicales de Schubert a los colores -, realiz¨® una tarea semejante a la de Mussorsky pero al rev¨¦s, pues el m¨²sico ruso transform¨® el cromatismo de los colores en m¨²sica en sus Cuadros para una exposici¨®n. Los cuadros de Luque lo son para una exposici¨®n y para una reflexi¨®n serena sobre la cultura valenciana, una cultura que Antoni quiere sin colinas fronterizas que limitan y ahogan. Valga como ejemplo el hecho de que, en el libro comentado, los poemas de M¨¹ller est¨¢n editados en el idioma original y acompa?ados de una cuidada traducci¨®n al valenciano; una traducci¨®n de Vita Vera Luque, la hija del m¨²sico y pintor, del lector empedernido y del fil¨®sofo, que calladamente trabaja y estudia y pinta, incluso cuando el mercurio revienta los term¨®metros, como ocurri¨® en agosto del 2003.