Un fest¨ªn a golpe de rat¨®n
Unos 300 internautas se re¨²nen en la primera Lan Party de M¨¢laga
Dormir¨¦ la primera noche para aguantar jugando hasta el domingo". Merlin Berns ha llegado desde Marbella dispuesto a batir sus propias marcas jugando en red junto a su pandilla de amigos. "Pero hay quien se pasa. Ni come y acaba exhausto dormido sobre el teclado", a?ade a su lado Alejandro G¨®mez.
No es una prueba de supervivencia. La primera Lan Party se abri¨® ayer en M¨¢laga para 300 internautas que acudieron con sus ordenadores dispuestos a jugar en red y compartir archivos y programas. Sobre todo m¨²sica y pel¨ªculas, aunque el comentario siempre llega con la boca peque?a, debido a los espinosos derechos de autor. Los datos son "punteros para una propuesta modesta que arranca", dice un participante: 100 megas por segundo para navegar por Internet, 26 kil¨®metros de cableado convencional y de red, 12 megas de red interna... Esta magn¨ªfica conexi¨®n supone que una pel¨ªcula viaja de un ordenador a otro en cinco minutos. ?Un disco? En menos de un minuto.
Es la versi¨®n tecnificada de un festival de m¨²sica rock, tiendas de campa?a incluidas, para un fin de semana "a tope". El pulcro parqu¨¦ sustituye al barro, y los agentes de seguridad no protegen a estrellas deslenguadas, sino a las codiciadas torres de los ordenadores. La mayor¨ªa est¨¢n modeadas, una pr¨¢ctica consistente en transformar los ordenadores a?adi¨¦ndoles piezas, luces y sistemas de refrigeraci¨®n a la ¨²ltima. "Ves de todo, torres dentro de peluches, televisores antiguos, e incluso hechas con piezas de lego", apunta Sonia del Molino, una de las escasas chicas que participan junto a su clan Zona Hispana.
La mayor¨ªa viene a competir en los multitudinarios juegos en red y disfrutar mientras le ve por fin la cara al contrincante, despu¨¦s de jugar cada uno desde su propia casa. Entre ellos Javier Garc¨ªa, alias Chakal, ganador de distintos torneos y jugosos premios, malague?o de s¨®lo 17 a?os invitado por su incre¨ªble destreza al rat¨®n en el juego Quake 3. S¨®lo tiene una queja: "Deber¨ªa haber m¨¢s chicas", critica riendo.
Pero el encuentro tambi¨¦n tiene otros usos. "Aprendes mucho de los problemas que dan sin parar los nuevos programas", afirma G¨®mez, con el alias Margarito, y estudiante de Inform¨¢tica.
La fiesta cibern¨¦tica apela a los instintos de los j¨®venes -la media de edad ronda los 22 a?os- y tambi¨¦n exige ejercicio f¨ªsico para descargar la adrenalina acumulada. Hoy se celebra un torneo de lanzamiento de m¨®viles y ordenadores. "?Qui¨¦n no ha sentido alguna vez la tentaci¨®n de estampar su PC contra la pared?", interroga un portavoz de la organizaci¨®n.
Ayer acudi¨® el pol¨¦mico gur¨² de la red espa?ola, Jorge Cortell. Adorado por unos, denostado por otros, y enemigo p¨²blico de la SGAE por su defensa p¨²blica del intercambio de archivos, titul¨® su charla La entelequia de la propiedad intelectual. Adem¨¢s habr¨¢ otra conferencia sobre hackers, una exhibici¨®n de artes marciales, y conciertos de dj's como Ministry of Sound.
"Hay quien no pega ojo, pero cada uno se lo monta como quiere", aclara Jos¨¦ Antonio Platero, coordinador del festival. A¨²n a a?os luz del mayor encuentro nacional, la Campus Party de Valencia con m¨¢s de 4.500 internautas, y que curiosamente naci¨® en Mollina (M¨¢laga) hace ocho a?os, la "kedada" malague?a aspira a ser el referente andaluz de estas bacanales inform¨¢ticas.
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