Lluvia y caos en Pek¨ªn
El Real Madrid gana en un campo encharcado, mientras en el palco reina la desorganizaci¨®n
Una lluvia torrencial empap¨® ayer a la plantilla de lujo del f¨²tbol mundial, que en los d¨ªas pasados se hab¨ªa quejado del calor sofocante de la capital china. Y marc¨® con el signo del caos el debut y despedida del Real Madrid en el Estadio de los Trabajadores de Pek¨ªn, un terreno modesto que qued¨® completamente anegado, inservible para el espect¨¢culo que se pretend¨ªa.
En las gradas, media entrada, aunque se dijo que la taquilla estaba agotada. Tal vez el problema fue tambi¨¦n ah¨ª la lluvia, pues s¨®lo las tribunas altas y cubiertas se ve¨ªan llenas. Un cartel¨®n que se despleg¨® sobre el palco de honor provoc¨® un revuelo de paraguas para evitar que la descarga de agua ba?ara al presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, y a su esposa, Sonsoles Espinosa, sentados en la primera fila junto al ministro chino de Exteriores, Li Zhaoxing, que miraba m¨¢s los folletos del Madrid que al campo.
PEK?N 2 - REAL MADRID 3
Pek¨ªn: Zhi (Gao, m. 88), H. Wei, Shuai, C. Wei; Dongliang, Jiang (Xianchui, m. 87), Pu, Alexa, T. Wei; Yonlong y Yelic (Dawei, m. 87).
Real Madrid: Casillas, Salgado (De la Red, m. 76), Helguera (Mej¨ªa, m. 46), Pav¨®n, Roberto Carlos; Gravesen, Pablo Garc¨ªa (Diogo, m. 55), Zidane (Figo, m. 55), Ra¨²l (Soldado, m. 67); Owen (Guti, m. 46) y Ronaldo (Juanfran, m. 67).
Goles: 1-0. M. 31: Jiang. 1-1. M. 36: Ra¨²l. 2-1. M. 74: Jelic. 2-2. M. 79: Guti. 2-3. M. 81: Figo, de penalti.
Arbitro: Lu Chun (China). Amonest¨® a Salgado y Gravesen.
Estadio de los trabajadores, 60.000 personas.
Hacia la derecha, segu¨ªan el canciller espa?ol, Miguel ?ngel Moratinos, la ministra de Fomento, Magdalena ?lvarez y el presidente madridista, Florentino P¨¦rez, que acaba de cerrar un contrato para el tratamiento de basuras en Pek¨ªn antes y despu¨¦s de la cita ol¨ªmpica, mientras espera que se resuelva el encallado fichaje de Robinho. Saludaba a todo el mundo como si jugara en casa, aunque es sabido que Zapatero tiene el coraz¨®n azulgrana y que Moratinos es atl¨¦tico, lo mismo que Miguel Sebasti¨¢n, el asesor econ¨®mico del presidente, y el secretario de Estado de Comercio, Pedro Mej¨ªas.
A la izquierda, el resto de la delegaci¨®n oficial china y, detr¨¢s, una nube de funcionarios, diplom¨¢ticos y periodistas tan densa que hasta el presidente de Telef¨®nica, C¨¦sar Alierta, tuvo problemas para sentarse. Y eso que, a juzgar por la publicidad desplegada en el palco, pagaba buena parte de la fiesta.
Los aficionados acogieron al Madrid con tanto o m¨¢s entusiasmo que a su equipo, un modesto en un pa¨ªs donde no hay f¨²tbol de competici¨®n y los amistosos como el de ayer son la norma. "Nuestro juego es el juego limpio", se le¨ªa en la pancarta que abri¨® el desfile de los humildes y las estrellas.
El partido fue como era de prever: si el bal¨®n no alzaba el vuelo, cada patada levantaba m¨¢s agua que otra cosa. Los chinos plantaron cara dignamente ante el aplastante dominio t¨¦cnico del Madrid, porque en semejante lodazal pod¨ªa m¨¢s que la ma?a. Helguera tuvo que retirarse, resentido de su dolencia de codo, y fue trasladado a un hospital para hacerle pruebas. Beckham, para disgusto de sus fans, con molestias, ni se visti¨®.
El empuje chino tuvo sus frutos a la media hora, pero Ra¨²l contest¨® poco despu¨¦s tras controlar un centro de Roberto Carlos, tocado por Zidane y que rebot¨® en un defensa. Aunque de nuevo se adelant¨® el Pek¨ªn tras el descanso, el peso espec¨ªfico del Madrid se impuso con goles de Guti, tras un rechace en el ¨¢rea, y de Figo, de penalti hecho a Juanfran.
Pero mucho antes de eso el caos se hab¨ªa apoderado tambi¨¦n del palco. Un contundente servicio de seguridad barri¨® del estadio a invitados de lujo, incluidos alg¨²n alto funcionario, directivos madridistas y la prensa. El amistoso concluy¨® all¨ª para una parte de la delegaci¨®n espa?ola. El Madrid viaja hoy a Tokio donde ayer se sintieron los efectos de un terremoto de grado 6 en la escala de Richter.
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