El primer adi¨®s a Gaza
Los colonos jud¨ªos comienzan a abandonar los asentamientos en direcci¨®n a poblados provisionales en Israel
Los primeros colonos han empezado a abandonar voluntariamente los asentamientos que ocupaban en la franja de Gaza para instalarse en algunos de los seis poblados de casas prefabricadas que el Gobierno de Ariel Sharon est¨¢ construyendo en el interior de Israel. Son los disidentes de un movimiento colono constituido por unas 8.000 personas, cada vez m¨¢s radicalizado y que en su gran mayor¨ªa se niega a dejar sus hogares y se prepara a enfrentarse a las fuerzas de la polic¨ªa cuando, el pr¨®ximo 15 de agosto, trate de desalojarlos por la fuerza, de acuerdo con lo previsto en el plan de retirada de Gaza.
"No he querido quedarme hasta el ¨²ltimo momento, a que los soldados de mi propio pa¨ªs me sacaran de mi casa; no quer¨ªa verlos llorar. Por eso estoy ya aqu¨ª", asegura Sara Duani, de 36 a?os, cocinera, madre de cuatro hijos y esposa de un camionero, mientras trata de descubrir los peque?os secretos de su nueva casa.
Es su primera ma?ana en el poblado de caravilas -una palabra reci¨¦n acu?ada estos d¨ªas en Israel a medio camino entre la caravana y la villa o chal¨¦- situado en el t¨¦rmino municipal de Askel¨®n, a poco menos de una treintena de kil¨®metros de los asentamientos de la franja de Gaza, en los que ha vivido durante los 12 ¨²ltimos a?os.
"Esta noche [pasada] hemos dormido aqu¨ª y a¨²n nos falta un poco de todo", afirma la mujer mientras observa por la ventana de la cocina un jard¨ªn min¨²sculo, orientado a la autopista y a la l¨ªnea de ferrocarril, en el que piensa ya replantar algunos de los ¨¢rboles de su antigua casa del asentamiento de Mitssanit, en el que viv¨ªa junto con otros mil colonos.
Sara Duani no ha llegado sola. Con ella han venido una veintena m¨¢s de colonos, los primeros de este nuevo poblado construido a toda velocidad por el Gobierno israel¨ª. Est¨¢ compuesto por 160 casas de entre 60 y 90 metros cuadrados. En unas dos semanas, las autoridades terminar¨¢n la construcci¨®n de 190 viviendas m¨¢s. Otros cinco poblados de caracter¨ªsticas similares se est¨¢n acabando de levantar en otros puntos de Israel para dar alojamiento a los colonos desalojados de la franja de Gaza.
"Nitzan dar¨¢ alojamiento provisional durante dos a?os a los colonos de Gaza, mientras buscan una casa definitiva", recalca el ministro de la Vivienda de Israel, Itzhak Herzog, de 45 a?os, abogado y miembro destacado del Partido Laborista, que hoy ha acudido al poblado para dar oficialmente por inaugurado el proyecto y recibir a los primeros colonos de Gaza.
El ministro asegura que la reinstalaci¨®n de los colonos constituye una operaci¨®n humanitaria de envergadura gigantesca a la que su Gabinete ha destinado m¨¢s de 500 millones de d¨®lares, la cuarta parte de un presupuesto de 2.000 millones de d¨®lares, que es el costo oficial y total del plan de retirada de la franja de Gaza, lo que incluye la destrucci¨®n de 21 asentamientos, en los que viven 8.000 colonos.
Aunque el reasentamiento de los colonos no ha hecho m¨¢s que empezar, comienzan a escucharse ya las primeras quejas de los residentes en los nuevos poblados, que creen que las casas son demasiado peque?as. Los ecologistas tambi¨¦n temen que el impacto de las nuevas viviendas perjudique el cercano parque natural de dunas. Los ultrarreligiosos, mientras, piden que sus viviendas est¨¦n separadas de las de los laicos.
Pero en el poblado de Nitzan se escucha ahora, por encima de todo, el eco de los millares de colonos que tratan de concentrarse en la zona. Por tercera vez en poco menos de dos semanas, prosiguen las manifestaciones por las carreteras de la regi¨®n en una maniobra desesperada destinada a hacer descarrilar el proceso de retirada de Gaza. Un gran despliegue de fuerzas policiales los mantiene a raya, al tiempo que paraliza a una multitud de seguidores y simpatizantes que tratan de tomar al asalto la zona de los asentamientos. Intentan convertirse en escudos humanos y reforzar las huestes del movimiento colono radical. Unos 13.000 soldados bloquean desde hace d¨ªas la zona. El mando policial ha impartido ¨®rdenes tajantes, incluida la de utilizar la fuerza, para cerrar el paso a su marcha.
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