Nuevas miradas desempolvan la zarzuela

Al g¨¦nero de la zarzuela parece ser que le est¨¢n sacudiendo esa caspa que muchos piensan que le hab¨ªa ca¨ªdo en las ¨²ltimas d¨¦cadas. Creencia que seguramente se debe al hecho de que muchos de estos espect¨¢culos no siempre han contado con las condiciones necesarias para ponerse en pie con un m¨ªnimo de dignidad. Y es que una zarzuela, para atraer a unos consumidores con h¨¢bitos esc¨¦nicos, necesita un importante presupuesto y profesionales de primer orden.

Pero ambas cosas van llegando. De hecho, este verano varios son los teatros, con solventes programaciones, que acogen espect¨¢culos de zarzuela. El Teatro Espa?ol ha dejado en repertorio su producci¨®n del a?o pasado La eterna canci¨®n, de Soroz¨¢bal, con direcci¨®n esc¨¦nica del joven Ignacio Garc¨ªa, que empieza a ser reclamado por los mejores teatros, y direcci¨®n musical de Manuel Gas. Esta zarzuela, que se presenta en el Festival de Peralada ma?ana d¨ªa 7, con un reparto encabezado por Enrique Baquerizo y Mill¨¢n Salcedo (s¨ª, el de Martes y 13 que a fin de cuentas es buen actor y cantante), ha estado los ¨²ltimos dos veranos en el Teatro Espa?ol, cuyo director, Mario Gas, tiene previsto recuperar otros t¨ªtulos de Soroz¨¢bal.

Para atraer nuevos p¨²blicos a este g¨¦nero l¨ªrico se necesita de un importante presupuesto y profesionales de primer orden

Mario Gas: "Hay que dejar de ver la zarzuela como un g¨¦nero adscrito al franquismo, abordarla con mirada contempor¨¢nea"

El Centro Cultural de la Villa de Madrid, ofrece desde ayer y hasta el pr¨®ximo d¨ªa 14, un programa doble con dos conocidos t¨ªtulos de Federico Chueca: Agua, azucarillos y aguardiente y El bateo, ambos con direcci¨®n musical de Carlos Cuesta y esc¨¦nica de Francisco Matilla y un reparto en el que participan importantes voces como las de la soprano Lola Casariego y el bar¨ªtono Luis ?lvarez e incluso algunas populares como Trinidad Iglesias. Son producciones de ?pera C¨®mica de Madrid, una compa?¨ªa que va a cumplir 20 a?os peleando por dar a este g¨¦nero una nueva vida.

El Teatro de Madrid ofrece hasta el 21 de agosto una programaci¨®n del director esc¨¦nico Antonio Amengual (mano derecha de Tamayo durante varias d¨¦cadas) y el director musical Pascual Ortega. Esta compa?¨ªa ha elegido para este verano La linda tapada, del maestro Alonso; La canci¨®n del Olvido, de Serrano, y Gigantes y cabezudos, de Fern¨¢ndez Caballero, con cantantes como ?ngela Lorite, Margarita Marb¨¢n, Ricardo Mu?iz y Enrique Ruiz.

Tambi¨¦n el teatro Calder¨®n, en la misma ciudad, programa zarzuela. Las producidas por Proyecto Verdi. Hasta el d¨ªa 14 Las Leandras, de Alonso, y a partir del d¨ªa 17 una de las m¨¢s populares, Marina, de Arrieta.

En el ¨²ltimo medio siglo, junto a muchos desaguisados y mucho intento de sostener el g¨¦nero a base de amor y entusiasmo, pero con dudosa factura esc¨¦nica y musical, es cierto que han existido propuestas dignas, aunque turistizadas, como las de Jos¨¦ Tamayo y su emblem¨¢tica Antolog¨ªa de la zarzuela y, por supuesto, la encomiable y arriesgada programaci¨®n del teatro de la Zarzuela, que en cualquier caso es excesivamente parca.

Pero esos esfuerzos y algunos otros provenientes de la iniciativa privada no han sido suficientes para sacar a la zarzuela del letargo en el que ha ca¨ªdo en los ¨²ltimos 60 a?os. Adem¨¢s exist¨ªan y existen otros serios condicionantes. Luchar con el hecho de que los gustos cambian. Con la circunstancia de que ning¨²n compositor ni autor crean zarzuelas desde los a?os cuarenta del pasado siglo. Que es un g¨¦nero en el que no hay casi nadie especializado. Que los productores no afrontan un espect¨¢culo de tanto riesgo con el que, para no tener p¨¦rdidas, necesitar¨ªan llenar a diario unos teatros que, por otro lado, ya no programan este g¨¦nero.

"La zarzuela puede hacerse bas¨¢ndose en lecturas contempor¨¢neas, es absurdo pensar que es un g¨¦nero caduco, casposo e imposible de representar", comenta Matilla.

La realidad es que hay m¨¢s de 13.000 zarzuelas escritas de las que realmente se conocen tan s¨®lo 20 o 30. Muchas de ellas no est¨¢n ni siquiera grabadas y los conocedores del g¨¦nero no paran de repetir que las hay buen¨ªsimas.

Mario Gas est¨¢ plenamente decidido a abrir el coliseo a este g¨¦nero "sin entrar en colisi¨®n con otras unidades de producci¨®n". El director se?ala que "para avanzar hacia el futuro siempre hay que contar con el pasado, la memoria y la tradici¨®n; es necesario revisitar la zarzuela, hay que superar eso de verla como un g¨¦nero adscrito al franquismo, porque adem¨¢s se puede abordar con una mirada contempor¨¢nea, no hay m¨¢s que expurgar aquello que ha quedado obsoleto y quedarse con otras que son una maravilla", se?ala este hombre, hijo del cantante l¨ªrico Manuel Gas y de la primera bailarina del Liceo Ana Cabr¨¦ y sobrino de Mario Cabr¨¦.

Para Gas la zarzuela es un g¨¦nero que existe en todo el mundo: "En realidad es teatro musical, pero ¨¦ste no es de franquicias de ¨¦xito como el que hay ahora por aqu¨ª; para recuperar la zarzuela habr¨ªa que reforzar nuevas voces, compositores, libretistas..., y retomar ese hilo que emana de la zarzuela para especular con temas y m¨²sicas actuales".

Por su parte, como director del Teatro de Madrid, Jos¨¦ Manuel Garrido ha contado en m¨¢s ocasiones con zarzuela en su programaci¨®n. "Es un g¨¦nero muy aceptado y de ¨¦xito; el que haya tanta oferta no s¨¦ qu¨¦ va a suponer econ¨®micamente para los teatros, y tampoco s¨¦ hasta qu¨¦ punto se ha producido una contaminaci¨®n desde los musicales anglosajones hacia este g¨¦nero musical espa?ol, pero es importante si con ello recuperamos nuevos p¨²blicos", dice este hombre que afirma que la zarzuela tiene tantos valores que no habr¨ªa ni que defenderla, "adem¨¢s conecta con las esencias populares y tiene un p¨²blico muy plural".