?Qu¨¦ pasa en la Vall de Laguar?

Pasear por este valle, situado a 20 kil¨®metros de la costa, era un privilegio. El caminante pod¨ªa adentrarse en su silencio y ver a su paso toda clase de animales. Pod¨ªa calmar su sed en sus numerosas fuentes. Los bosquecillos de encinas, fresnos y pinos le cobijaban..., en fin todo lo que hace las delicias del senderista se concentraba en este valle diminuto. Pero las cosas han empezado a cambiar.

En la monta?a han brotado casas con piscinas y en torno a ellas, una maleza de pl¨¢sticos, sacos de cemento, botellas, cartones, latas..., que empiezan ya a formar parte del paisaje y que implican el aumento de riesgo de incendio. En Fleix hay numerosas casas vac¨ªas que est¨¢n pidiendo a gritos que alguien se encargue de ellas pues si no se vendr¨¢n abajo. Pero el Ayuntamiento ha decidido ampliar el casco urbano con una urbanizaci¨®n de nueva planta. La reparcelaci¨®n ha puesto en pie de guerra a muchos vecinos, ya que se les exige el pago millonario de los servicios de la urbanizaci¨®n. Ahora el caminante, despu¨¦s de llenar una bolsa con los desperdicios que ha encontrado en su excursi¨®n, entra en el pueblo y se encuentra con una pancarta: "Fuera especuladores, abusos urban¨ªsticos no". El caminante deja su bolsa a la puerta del Ayuntamiento y se va. Sabe que este valle tan hermoso acabar¨¢ siendo, si nadie lo impide, una fotograf¨ªa m¨¢s que ense?ar a sus nietos de un mundo lejano e irremisiblemente perdido.