R¨¦plica a Mauricio Rojas

Mauricio Rojas, miembro del Partido Liberal del Parlamento sueco, autor del libro Suecia despu¨¦s del modelo sueco, del cual Vargas Llosa extrajo la mayor¨ªa de datos sobre Suecia que present¨® en su art¨ªculo Hacerse el sueco, contesta a mi carta al director (donde se?alaba que muchas de las afirmaciones hechas en tal art¨ªculo no se correspond¨ªan con la realidad de aquel pa¨ªs) acus¨¢ndome de "hacer afirmaciones tan peregrinas (tales como indicar que la capacidad de elecci¨®n de los usuarios de los servicios p¨²blicos en Suecia, tales como educaci¨®n y sanidad, antecede las reformas del gobierno conservador liberal del periodo 1991-1994) que le lleva a pensar que el se?or Navarro est¨¢ confundiendo Suecia con otro pa¨ªs". Veamos qui¨¦n confunde qu¨¦.

Rojas asume err¨®neamente que la introducci¨®n del cheque escolar o voucher y su expansi¨®n a las escuelas privadas (que introdujo aquel Gobierno) es la ¨²nica manera de garantizar tal capacidad de elecci¨®n. La experiencia no solo de Suecia sino de EE UU, donde tal modelo est¨¢ m¨¢s extendido, muestra que tal sistema no es ni el ¨²nico ni el mejor para garantizar tal capacidad de elecci¨®n. La intensidad de las creencias liberales de Rojas y de Vargas no debieran llevarles a confundir privatizaci¨®n con libertad de elecci¨®n. La veracidad de lo que digo se refleja en que seg¨²n el ¨²ltimo informe de las autoridades educativas del Gobierno sueco casi el 90% de las familias suecas han escogido mantener a sus ni?os en el sistema p¨²blico que contin¨²a ofreciendo capacidad de elecci¨®n desde mucho antes de que el Gobierno conservador liberal introdujera sus reformas.

En sanidad, el porcentaje de usuarios que escoge el sistema p¨²blico (que tambi¨¦n ofrece capacidad de elecci¨®n) es incluso mayor. Cuando las autoridades sanitarias suecas me pidieron mi opini¨®n sobre la privatizaci¨®n de la sanidad en EE UU me limit¨¦ a enviarles un informe mostr¨¢ndoles que el grado de insatisfacci¨®n de la ciudadan¨ªa estadounidense con su sistema sanitario (de clara orientaci¨®n liberal) es el m¨¢s elevado de la OCDE.

Referente a las pensiones, Rojas reconoce que la situaci¨®n es como yo indicaba; las pensiones privadas en Suecia complementan las p¨²blicas. Pero err¨®neamente se?ala que esto es lo que Vargas dec¨ªa en su art¨ªculo. Vargas escrib¨ªa, sin embargo, que Suecia hab¨ªa hecho lo que Bush deseaba hacer en EE UU. Bush quiere sustituir, no complementar las pensiones p¨²blicas. Vargas y Rojas no deber¨ªan confundir lo uno con lo otro.