Los inmigrantes alquilan menos del 9% de los pisos de los planes de promoci¨®n de vivienda
Inmobiliarias y asociaciones destacan que los extranjeros sostienen el mercado de alquiler
Profesionales y agencias del sector inmobiliario, asociaciones de consumidores y los grupos que trabajan con inmigrantes coinciden en que los extranjeros de origen no comunitario son quienes est¨¢n sosteniendo actualmente el mercado de alquiler de viviendas en Euskadi, que apenas supone el 5% de la demanda ciudadana de pisos frente al 11% del conjunto de Espa?a. Pese a ello, los inmigrantes no cuentan con planes espec¨ªficos para acceder a un alojamiento y suponen menos del 9% de los contratos gestionados por los programas p¨²blicos de fomento del arrendamiento.
Jos¨¦ Ram¨®n Gorostiz, presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Vizcaya, destaca que la demanda por inmigrantes de pisos en alquiler (cerca de un 60% del total) compensa el descenso del mercado nacional. Mientras, la Federaci¨®n de Consumidores de Euskadi ha constatado un aumento de las consultas de inmigrantes desde hace cuatro o cinco a?os y precisa que hoy suponen la mayor¨ªa de las consultas que la federaci¨®n recibe relacionadas con los alquileres.
El consejero de Vivienda, Javier Madrazo, considera que no es necesario adoptar medidas espec¨ªficas para facilitar el acceso de los inmigrantes al arrendamiento de pisos, porque ya existen planes generales: "Hay un programa que funciona bien, que es el de alquiler de viviendas vac¨ªas, con un precio social. Por esta v¨ªa muchas personas con pocos recursos pueden acceder a la vivienda, y tambi¨¦n personas inmigrantes", apunta. El consejero explica que el Gobierno no quiere hacer en este asunto ninguna excepci¨®n, sino tratar a los inmigrantes como al resto de los ciudadanos.
Sin embargo, los extranjeros resultan muy minoritarios en estos programas oficiales. Los datos del propio Departamento de Vivienda indican que el n¨²mero de inmigrantes no comunitarios acogidos al programa Bizigune -el plan que capta pisos desocupados y los pone en el mercado de alquiler a precios protegidos- asciende a s¨®lo 177 sobre un total de unos 2.000 expedientes tramitados, es decir menos del 9%. Respecto a los casi 700 contratos gestionados actualmente por la sociedad de alquileres p¨²blicos Alokabide, menos del 0,5% corresponde a extranjeros.
La ONG SOS Racismo destaca los problemas espec¨ªficos que encuentran los inmigrantes para arrendar un piso. "El acceso a la vivienda resulta un tema dif¨ªcil para todo el mundo ya que el mercado es reducid¨ªsimo, pero lo es a¨²n m¨¢s para los inmigrantes", indica Diego Jauregui, representante de la asociaci¨®n. Jauregui recuerda que se dan en ocasiones muestras de racismo evidentes cuando un extranjero intenta acceder a un piso de alquiler.Las asociaciones de inmigrantes recuerdan que con el problema de la vivienda empieza un c¨ªrculo vicioso, ya que su acceso a servicios sociales depende del empadronamiento -y, por tanto, de disponer de un hogar-, que, adem¨¢s, algunos propietarios niegan a sus arrendatarios.
Gorostiz reconoce que los propietarios de las viviendas dan en ocasiones "instrucciones" sobre el tipo de inquilinos que prefieren. En total, Jauregui estima que "el 80% de los inmigrantes sufre la dificultad de encontrar una casa". Tienen que pagar m¨¢s para lograr lo mismo, aceptar peores condiciones o compartir un piso.
Madrazo admite que "en el mercado libre, poco se puede hacer m¨¢s all¨¢ de campa?as de sensibilizaci¨®n". Para SOS-Racismo, lo m¨¢s urgente es "suprimir los discursos pol¨ªticos racistas y revisar las leyes de Extranjer¨ªa", y s¨®lo despu¨¦s se podr¨¢ potenciar la lucha contra las discriminaciones.
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