Liga globalizada

La Liga arranca hoy en medio de una imparable globalizaci¨®n del f¨²tbol. La mayor¨ªa de los clubes han dedicado el verano a largas giras por los pa¨ªses de Extremo Oriente, en busca de recursos en los nuevos mercados. No hay sitio ni dinero para todos, pero la idea de un Eldorado asi¨¢tico tiene fascinados a los equipos europeos. Cada vez hay menos fronteras en un deporte que durante d¨¦cadas se movi¨® entre Europa y Suram¨¦rica. Ahora su ¨¢mbito es decididamente planetario. Una vez m¨¢s, el f¨²tbol es un s¨ªmbolo de su tiempo. Su capacidad de adaptaci¨®n al entorno social, econ¨®mico y tecnol¨®gico resulta asombrosa. Convertido en el gran fen¨®meno de ocio de nuestra ¨¦poca, el f¨²tbol es una gigantesca industria que aprovecha todos los recursos que le permiten los avances contempor¨¢neos.

No son pocos los que pronostican un f¨²tbol de dos velocidades. En el papel que les toca como m¨¢ximos representantes del negocio, los grandes clubes estar¨ªan abocados a crear una selecta Liga europea, donde dirimir¨ªan sus rivalidades en el campo de juego y en el mercado. A las competiciones nacionales les quedar¨ªa un papel menor, interpretado por aquellos que no pueden acercarse a los colosales presupuestos de los principales equipos europeos. Estos campeonatos locales ser¨ªan un vestigio de otra ¨¦poca, de otro f¨²tbol, de otro tipo de sociedad. Sin embargo, al f¨²tbol no s¨®lo le define el negocio. Desde sus inicios siempre ha mantenido un complejo equilibrio entre el valor de la tradici¨®n y el efecto de lo novedoso. En este sentido, resultar¨¢ muy dif¨ªcil desplazar a la Liga como la competici¨®n preferida de los aficionados.

Despu¨¦s de un periodo que ha visto cinco ganadores en diez a?os (Barcelona, Real Madrid, Valencia, Deportivo y Atl¨¦tico de Madrid), la Liga parece que vuelve a la vieja bipolaridad entre el Bar?a y el Madrid. La crisis econ¨®mica ayuda a esta idea. Los clubes han invertido 150 millones de euros en fichajes, con el Madrid como principal protagonista que ha contratado a los brasile?os Robinho y Baptista para atacar el t¨ªtulo que defiende un Bar?a que se beneficiar¨¢ de la recuperaci¨®n de varios lesionados y la irrupci¨®n del joven Messi, destinado a consagrarse como estrella. Ser¨¢ de nuevo un campeonato donde se apreciar¨¢n casi todos los estilos del f¨²tbol: la escuela holandesa del Bar?a, la apuesta brasile?a del Madrid, el interesante proyecto de corte argentino del Villarreal, la querencia inglesa del Athletic. Y tambi¨¦n ser¨¢ una Liga de incertidumbres. El Valencia y el Deportivo comienzan una dif¨ªcil transici¨®n, el Atl¨¦tico de Madrid pretende regresar con Bianchi a sus mejores tiempos y el Betis tratar¨¢ de oficiar de tapado. Como siempre, es tiempo de c¨¢balas. Comienza la Liga.