El nuevo milagro latino de Hollywood

Qui¨¦n dijo que el dinero es lo ¨²nico que importa en Hollywood y que las buenas pel¨ªculas deben ir marcadas por el As de Oros? Nada est¨¢ escrito. Y si lo est¨¢, ese destino se puede cambiar. La prueba es el colombiano Rodrigo Garc¨ªa (1959) y su segundo trabajo como guionista y director: medio mill¨®n de d¨®lares, 10 grandes actrices, 17 d¨ªas de rodaje, aplausos de la cr¨ªtica y Leopardo de Oro en el Festival Internacional de Cine de Locarno. T¨ªtulo del milagro: Nine lives.

Rodrigo Garc¨ªa ha querido contar los latidos del tiempo detenido: la historia simult¨¢nea de nueve mujeres minutos antes de que sus vidas se crucen para dar origen a infinitos destinos m¨¢s. "Muestro peque?as crisis en unas mujeres que revelan un panorama de vida, detalles de un momento que descubren la totalidad del personaje", explica el director, un colombiano con acento mexicano y pausado ritmo californiano, resultado de su vida en Los ?ngeles desde 1991.

Nine lives, al igual que su primer largometraje, Cosas que dir¨ªa con solo mirarla, ha sido escrita y dirigida por ¨¦l mismo. Ambas comparten similitudes: vidas secretas; temas como la fidelidad, el amor, la compa?¨ªa, la muerte; el universo de las mujeres; y un elenco de actrices pocas veces reunido. Y si para su primera pel¨ªcula Garc¨ªa consigui¨® a Glenn Close, Holly Hunter, Amy Brenneman, Kathy Baker, Cameron D¨ªaz y Calista Flockhart, para la segunda las cuatro primeras se volvieron a apuntar y a ellas se sumaron Sissy Spacek, Robin Wright Penn, Elpidia Carrillo, Lisa Gay Hamilton, Amanda Seyfried y la ni?a estrella Dakota Fanning. Todas trabajaron por el sueldo m¨ªnimo sindical, unos 500 d¨®lares diarios. "La verdad es que hicieron un gran esfuerzo. Cada una estuvo un promedio de dos d¨ªas", recuerda el director. Aclara que la facilidad y dificultad del rodaje estuvo en que cada uno de los nueve relatos que protagonizan exig¨ªa rodarse en un solo plano secuencia de 12 minutos. Una propuesta "arriesgada que requiere ensayar y tener suerte a la hora de filmar". Y la tuvieron. Rodaron en apenas 17 d¨ªas de julio de 2004. Lo m¨¢s complicado fueron la falta de dinero, las localizaciones, el equipo t¨¦cnico y "ver que los actores trabajaron con su propio vestuario, eso es duro", reconoce.

?Pero cu¨¢l fue el truco para convencerlas? Para Rodrigo Garc¨ªa la respuesta tiene una historia que se remonta a la b¨²squeda de financiaci¨®n de su primer proyecto. "Cuando escrib¨ª Cosas que dir¨ªa..., hace cinco o seis a?os, envi¨¦ el gui¨®n a varias personas que podr¨ªan estar interesadas. Les parec¨ªa una buena historia pero un tanto arriesgada. Hasta que se lo envi¨¦ al director y productor John Avnet. Le gust¨® tanto que se lo hizo llegar a Glenn Close. As¨ª fue como ella se interes¨®, despu¨¦s lo vio Holly Hunter, y luego otra y otra. Unos a?os despu¨¦s, cuando termin¨¦ de escribir Nine lives empec¨¦ por el principio, enviar el gui¨®n a posibles productores, pero la historia se repiti¨®: 'Me gusta, muy buen gui¨®n, interesante pero, pero...'. As¨ª es que opt¨¦ por pasarlo a algunas de las actrices con las que hab¨ªa trabajado. ?Y les gust¨®! Adem¨¢s, a un actor le interesa saber qui¨¦nes son los otros actores involucrados para unirse o no. Unas porque quer¨ªan trabajar con Glenn, otras con Holly, hasta que ya las ten¨ªa a todas. Tener a buenas actrices desde el principio es una ventaja", reconoce Garc¨ªa.

Dos pel¨ªculas, dos historias de mujeres. ?Por qu¨¦ el mundo femenino? No hay discurso. "Me gustan las actrices, pero cuando escribo no pienso en pel¨ªculas sobre mujeres o el mundo femenino. Lo que me interesan son los temas, es lo que prima, y los personajes son mujeres". En Nine lives "son momentos m¨¢s abiertos que en mi primera pel¨ªcula, y el tema que los une es el de las relaciones dif¨ªciles entre personas que no pueden vivir juntas ni separadas".

Tampoco puede Garc¨ªa disociar su relaci¨®n escritor-director. Aunque reconoce que tiene "proyectos para ambos oficios, al igual que ideas para desarrollar trabajos de otros guionistas, ideas parecidas a las m¨ªas y otras m¨¢s abiertas y comerciales". Eso le ha permitido dirigir cap¨ªtulos de algunas de las series de televisi¨®n m¨¢s famosas como Los Soprano y A dos metros bajo tierra. ?Mucha diferencia entre cine y televisi¨®n? "En televisi¨®n muchas cosas est¨¢n dadas, el tono, el tema, los actores; as¨ª es que el director tiene menos cosas que hacer, no creas un mundo. En ese sentido es m¨¢s f¨¢cil". Y entre escribir y dirigir lo tiene claro: escribir es m¨¢s dif¨ªcil, y no duda de que dirigir es m¨¢s estresante por limitaciones de tiempo y dinero, por sincronizar a tantas personas.

Herencia de un Nobel

Es un director que hace realidad una de las pasiones y sue?os de su padre, el Nobel colombiano Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez. "Mi padre toda la vida ha estado escribiendo literatura y cine, por tanto crec¨ª en un ambiente adecuado". ?Y en cuanto a consejos? Entonces su voz empieza seria: "A ¨¦l le gustan mis guiones", para a?adir un poco sonriente: "Es un fan". El padre lee los guiones de su hijo antes de que se conviertan en esa manera de contar y conmover con fotogramas, a la que tantas vueltas le ha dado el Nobel. No hay que descartar que un d¨ªa trabajen juntos. "Hemos hablado", confiesa Rodrigo Garc¨ªa, "hemos tenido un par de ideas pero sin llegar a concretar nada".

Por lo pronto guiones y direcci¨®n llevan un solo nombre. Garc¨ªa lleg¨® a Los ?ngeles en 1991 tras vivir en M¨¦xico, en la que hab¨ªa sido foto fija, trabajado como camar¨®grafo e incursionado en la direcci¨®n de fotograf¨ªa de series de televisi¨®n y cine, que continu¨® en Los ?ngeles. Pero fue s¨®lo cuando termin¨® el gui¨®n de Cosas que dir¨ªa con solo mirarla, a finales de los noventa, cuando descubri¨® que su vida estaba encarrilada hacia el cine y que el siguiente paso no era otro que cerrar su ciclo creativo: convertir sus textos en celuloide.

Surge as¨ª un guionista-director con m¨²ltiples influencias y de directores como Igmar Bergman, John Huston, de quien se declara admirador, y de otros m¨¢s recientes como Michael Haneke y Krzysztof Kieslowski, y entre cuyas pel¨ªculas favoritas est¨¢ El esp¨ªritu de la colmena, de V¨ªctor Erice.

Vittorio Storaro, presidente del jurado de la 58? edici¨®n del Festival Internacional de Cine de Locarno, defini¨® Nine lives como "una pel¨ªcula de gran virtuosismo t¨¦cnico y extraordinaria puesta en escena. (...) De enorme fuerza creativa y emocional". Al Leopardo de Oro a la mejor pel¨ªcula se sum¨® el entregado a sus nueve actrices por la interpretaci¨®n femenina. Y su circuito por los festivales no ha hecho m¨¢s que empezar. Nine lives y su director estar¨¢n en septiembre en el 53? Festival Internacional de Cine de San Sebasti¨¢n en la secci¨®n Perlas de Otros Festivales.

Rodrigo Garc¨ªa considera que el cine pasa por un buen momento a pesar de todo lo que se diga. Por eso afirma que ¨¦ste "no se puede juzgar por el producto salido de Norteam¨¦rica. En Hollywood hay mucho cine industrial, pocas pel¨ªculas interesantes pero con muchos cineastas que luchan por hacer buenos trabajos". Y lo dice alguien que deja constancia de la existencia de un mundo paralelo en Hollywood donde todo puede ocurrir. Incluso que 10 de sus estrellas trabajen por el sueldo m¨ªnimo, sean aplaudidas y todos sean premiados.