Al gimnasio con Stella McCartney
Tras una d¨¦cada trabajando, la dise?adora de moda se lanza a lo masivo desde varios frentes. Y el plato fuerte de su diversificaci¨®n llega a Espa?a el d¨ªa 1 de septiembre: la l¨ªnea de ropa deportiva para mujeres que ha creado en colaboraci¨®n con Adidas. De ella habl¨®, tres meses despu¨¦s de su maternidad, en Londres.
Diez a?os en la industria de la moda. Apellido poderoso. Casada y, desde el pasado febrero, madre del peque?o Miller Willis. Stella McCartney llega, con 33 a?os, a un cruce de caminos y ha optado por diversificarse. Adem¨¢s de su propia marca, la dise?adora brit¨¢nica ha entrado en el deporte de competici¨®n femenina con una gama de prendas y accesorios bautizada como Adidas by Stella McCartney. Y para las j¨®venes con sueldos limitados y pocas ganas o tiempo de meter horas en el gimnasio, este oto?o saldr¨¢ a la venta su colecci¨®n para H&M.
"Desde que soy madre no me cuesta nada trabajar. Me resulta m¨¢s sencillo ir a la oficina que cuidar de mi beb¨¦ las 24 horas del d¨ªa. Tambi¨¦n me he dado cuenta de lo competente que es el equipo que me rodea. Eso s¨ª, he debido relajar un poco mi obsesi¨®n por controlarlo todo", confiesa. Con botas de falso cuero de tacones de aguja, camiseta en rosa palo y chaqueta tres cuartos, Stella McCartney asiste a la presentaci¨®n en Londres de su segunda colecci¨®n (aunque la primera en llegar a Espa?a) para Adidas.
En la pasarela, las modelos hacen yoga, practican escalada, corren por una cinta mec¨¢nica, levantan pesas, boxean y entrenan en una variedad de m¨¢quinas. "Como mujer siempre me he sentido frustrada ante la pobre oferta de prendas deportivas. Colores simplones, formas malas, tejidos horribles. Ropa sin ning¨²n detalle, anticuada, aburrida. Vamos al gimnasio para tener buen tipo, pero hasta ahora s¨®lo pod¨ªamos ponernos cosas que no favorecen nada. Me parece degradante y una falta de atenci¨®n hacia la mujer", critica poco despu¨¦s en una entrevista con un grupo de periodistas internacionales.
McCartney resalta la "validez y honestidad" de la nueva l¨ªnea Adidas para deporte femenino. "No tenemos competidores. Otras marcas colaboran con dise?adores para llevar la ropa deportiva a la calle. Nosotros introducimos la moda en el deporte, y el alto rendimiento es nuestra prioridad". "Las mujeres", contin¨²a, "no tienden a buscar prendas deportivas que les ayudar¨¢n a rendir m¨¢s. Se interesan menos que los hombres por los aspectos t¨¦cnicos del deporte. Ahora pueden confiar en encontrar estilo y tecnolog¨ªa en esta colecci¨®n".
Adidas contaba ya con una edici¨®n limitada de zapatillas deportivas dise?adas por McCartney. Pero el acuerdo en deporte competitivo, anunciado en octubre de 2004, aspira a ser de larga duraci¨®n. La gama de productos para este oto?o oscila entre los 30 y los 350 euros y se centra en las categor¨ªas de carrera, gimnasio y nataci¨®n. En total, 48 art¨ªculos de textil, 26 de calzado y 15 de accesorios. Pero la l¨ªnea ir¨¢ ampli¨¢ndose gradualmente, ajustando los materiales de alta tecnolog¨ªa, las formas y los estilos a cada modalidad deportiva. "Estoy en una curva de aprendizaje. Pero el proceso de dise?o es similar y las influencias marchan en ambas direcciones: de mi colecci¨®n particular a los dise?os para Adidas y viceversa. Todo lleva mi toque personal, mi gusto, paleta de colores, formas y cortes. Mi contribuci¨®n se nota particularmente en los detalles, a los que prest¨¦ mucha atenci¨®n", explica. La lencer¨ªa deportiva tambi¨¦n ondea en el horizonte, aunque en este caso, dice, "hay que aguardar a que avance la tecnolog¨ªa". "La ropa interior deportiva es tan poco atractiva que le he dado vueltas al tema. Personalmente creo que nunca me pondr¨¦ un sujetador sexy en el gimnasio, pero alg¨²n d¨ªa dise?ar¨¦ algo mol¨®n", advierte.
A Stella McCartney le acompa?a la buena fortuna. Los m¨¢s esc¨¦pticos relacionan su mete¨®rico despegue profesional con la cuna paternal en el hogar del ex beatle Paul. Aportan en prueba las p¨¦rdidas de 4,5 millones de libras (unos 6,5 millones de euros) registradas por la marca Stella McCartney en 2003 y unas ventas que ese mismo a?o se limitaron a 630.000 euros. El grupo Gucci, que controla el 50,1% del negocio de la dise?adora, le ha dado de plazo hasta 2007 para salir de los n¨²meros rojos. Pero lo cierto es que la moda pronto llam¨® la atenci¨®n de la pelirroja McCartney. Con 15 a?os hizo pr¨¢cticas con Christian Lacroix y trabaj¨® despu¨¦s con los sastres tradicionales de Saville Row, en Londres. En 1995 se gradu¨® en dise?o textil por la prestigiosa escuela londinense St. Martins. Kate Moss, Naomi Campbell y Yasmin Le Bon desfilaron con su colecci¨®n de licenciatura, que fue adquirida en bloque por Tokio, una boutique londinense. La piel natural, el cuero y otros materiales producidos con "animales muertos" est¨¢n desde entonces vetados en su trabajo creativo. "Tengo muchas razones para no utilizarlos. Para m¨ª es una cuesti¨®n ¨¦tica, medioambiental y, en el fondo, totalmente innecesaria. Por extra?as razones que no logro comprender, la gente relaciona buena calidad con animales muertos y excusan un abrigo de pieles en el calor que proporciona. Hay materiales de alta tecnolog¨ªa que abrigan, son ligeros y lucen mejor. ?sa es la funci¨®n del dise?ador: estar en la vanguardia tecnol¨®gica y seguir avanzando", razona con seriedad.
A finales de los a?os noventa corr¨ªan buenos tiempos para los dise?adores brit¨¢nicos y, siguiendo los pasos de John Galliano y Alexander McQueen, la joven graduada cruz¨® el canal de la Mancha en 1997 para instalarse en Chlo¨¦. Pero Gucci reclam¨® sus servicios en 2001 y apuesta desde entonces por la dise?adora y su marca Stella McCartney. "Diez a?os en la industria", exclama en Londres. "He sido tan afortunada. Ya es una suerte tener un empleo, y no digamos el ¨¦xito que parece acompa?arme. He tenido mucha suerte en la vida. Hasta ahora. Toquemos madera".
Adidas by Stella McCartney se vende en tiendas Adidas y centros El Corte Ingl¨¦s.
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