Una ciudad para su familia

Pedro Infante quiso obtener dinero para ayudar a su familia desde que era un ni?o, debido a la apremiante situaci¨®n econ¨®mica que viv¨ªan. Por eso abandon¨® los estudios en cuarto grado de primaria y se dedic¨® a trabajar. Sus biograf¨ªas hablan de que cuando consigui¨® la fortuna edific¨® una peque?a ciudad en la carretera a Toluca, la Ciudad Infante, para acogerlos. A tal punto lleg¨® su generosidad que en los a?os cincuenta llegaba a firmar cerca de 50 cheques cada mes para cubrir los gastos personales y de sus familiares.

En la carrera cinematogr¨¢fica del ¨ªdolo de M¨¦xico destaca La vida no vale nada, con la que gan¨® en su pa¨ªs el Ariel al mejor actor, el 15 de junio de 1956. Gracias a su actuaci¨®n en la pel¨ªcula Tizoc obtuvo el Oso en el Festival de Berl¨ªn, un a?o despu¨¦s de su fallecimiento, en 1958. En ese filme trabaj¨® junto a Mar¨ªa F¨¦lix e interpret¨® a un ind¨ªgena enamorado de una criolla a quien confunde con la Virgen Mar¨ªa, una apoteosis a la idolatr¨ªa pat¨¦tica, que encontr¨® aceptaci¨®n entre su p¨²blico.

Nosotros los pobres, Ustedes los ricos, Perjura, Escuela de vagabundos, Un rinc¨®n cerca del cielo y Cuando lloran los valientes tambi¨¦n se encuentran en la filmograf¨ªa que lo convirti¨® en leyenda del cine mexicano.