Los conservadores de Baviera cierran filas tras Angela Merkel
Stoiber, l¨ªder de la CSU, aparca sus discrepancias con la candidata
Prietas las filas en torno a la candidata democristiana a la canciller¨ªa, Angela Merkel, de 51 a?os, parece haber sido la consigna del congreso del partido hermano, la Uni¨®n Socialcristiana de Baviera (CSU), que concluy¨® ayer en N¨²remberg. El l¨ªder de la CSU, el primer ministro de Baviera, Edmund Stoiber, de 63 a?os, asegur¨® en su discurso a los delegados: "Entre Angela Merkel y yo no cabe ni una hoja de papel".
Hasta ese extremo quiso acentuar Stoiber su proximidad a Merkel, sobre la que siempre pesan m¨¢s que fundadas sospechas. A¨²n no se han olvidado las palabras despectivas de Stoiber sobre Merkel y su potencial socio en una coalici¨®n de gobierno de centro-derecha, el presidente de los liberales, Guido Westerwelle (FDP). Stoiber dijo hace alg¨²n tiempo que, comparados con el canciller socialdem¨®crata, Gerhard Schr?der, y su ministro de Exteriores, el verde Joschka Fischer, Merkel y Westerwelle eran unos marineros de agua dulce.
Ahora las cosas han cambiado. El grato perfume del poder que esparcen los sondeos demosc¨®picos ha convertido a Merkel, protestante y del este de Alemania, en el posible caballo ganador para derrotar a Schr?der. Por su condici¨®n de aliado indispensable en una coalici¨®n de centro-derecha CDU/CSU-FDP, Westerwelle (FDP), el soltero de Bonn, como le llamaba Stoiber de forma despectiva, en una velada alusi¨®n a su homosexualidad, ha dejado de ser blanco de mofa y escarnio.
Todo pareci¨® estudiado a la perfecci¨®n en el congreso de la CSU de dos d¨ªas en N¨²remberg. En la tarde del viernes, los 1.000 delegados dedicaron al discurso de una hora de la candidata Merkel nada menos que 13 minutos de aplausos. Parec¨ªan empe?ados los entusiastas b¨¢varos en batir como fuera la marca de 12 minutos de ovaciones que cosech¨® el canciller Schr?der en el congreso del SPD en Berl¨ªn hace unos d¨ªas.
Desconfianza
Aseguran los expertos y bi¨®grafos que uno de los rasgos m¨¢s acusados del car¨¢cter de Merkel es su desconfianza, atribuida a los 35 a?os que esta hija de un pastor protestante vivi¨® bajo la dictadura prusiano-estalinista de la difunta Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana. Menester tiene Merkel (CDU) en mantenerse atenta a los movimientos del l¨ªder del partido hermano, la CSU. Asegur¨® Stoiber que est¨¢ dispuesto a poner toda la carne en el asador para sacar adelante el triunfo de Merkel. Como para echarse a temblar. Stoiber no ha querido revelar el secreto sobre sus planes tras el 18 de septiembre, si se cumplen los pron¨®sticos demosc¨®picos y la coalici¨®n de centro-derecha desaloja del poder en Berl¨ªn al SPD y a Los Verdes. Se ha dejado abiertas todas las puertas Stoiber, que sostiene que el presidente de la CSU tiene derecho a cualquier puesto en el Gabinete. Esto plantear¨ªa a una Merkel en el poder los primeros problemas. S¨®lo las carteras de Hacienda o Asuntos Exteriores estar¨ªan a la altura de Stoiber. La de Hacienda parece adjudicada al catedr¨¢tico de Heidelberg Paul Kirchhof, en el que Merkel ha depositado sus esperanzas de renovaci¨®n de Alemania. La de Exteriores es patrimonio tradicional del socio de coalici¨®n, los liberales (FDP). La otra opci¨®n de Stoiber ser¨ªa quedarse en Baviera, donde gobierna con una c¨®moda mayor¨ªa de dos tercios en el Parlamento regional (Landtag). Desde M¨²nich, donde la CSU permanece en el poder desde hace 56 a?os, Stoiber podr¨ªa repetir el modelo de su padre pol¨ªtico, el difunto legendario l¨ªder Franz Josef Strauss, cuyas intervenciones provocaban grandes quebraderos de cabeza a sus correligionarios que gobernaban en Bonn.
El congreso de la CSU reeligi¨® a Stoiber con un 93% de votos para la presidencia del partido, un 4% menos que hace dos a?os.
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