Los ministros de Infraestructuras iberoamericanos piden un trato fiscal diferenciado para las inversiones

El encuentro de ministros de Transportes e Infraestructuras iberoamericanos se cerr¨® ayer con la Declaraci¨®n M¨¢laga 2005, que incluye dos conclusiones principales: la propuesta de crear un foro permanente entre las Administraciones, y la petici¨®n a las instancias financieras de conceder un trato fiscal diferenciado a las inversiones en infraestructuras. El documento, que ser¨¢ remitido a los jefes de Estado y de Gobierno que se reunir¨¢n en octubre en Salamanca, fue consensuado tras dos d¨ªas de debates.

La anfitriona, la ministra de Fomento espa?ola, Magdalena ?lvarez, anunci¨® que a principios de 2007 se celebrar¨¢ en Uruguay una nueva reuni¨®n. Precisamente para tratar de dar cierta continuidad a las relaciones, se propone la creaci¨®n de un Centro de Intercambio y Cooperaci¨®n, a trav¨¦s de la Secretar¨ªa General Iberoamericana. Este centro servir¨ªa de "foro permanente y estable a las Administraciones para la reflexi¨®n compartida sobre las cuestiones relacionadas con la infraestructura y el transporte".

Durante los dos d¨ªas que ha durado el encuentro, que ha reunido en M¨¢laga a ministros y altos cargos de 17 pa¨ªses, uno de los temas estrella ha sido la financiaci¨®n de las infraestructuras y su dificultad, sobre todo al otro lado del Atl¨¢ntico. As¨ª, el documento acuerda "solicitar a las instancias financieras y a otras competentes la aplicaci¨®n de nuevas reglas de c¨¢lculo de d¨¦ficit fiscal que puedan excluir las inversiones en infraestructuras con efectos significativos sobre la productividad, la competitividad, el PIB (Producto Interior Bruto) y los ingresos fiscales".

En este sentido, ?lvarez opin¨® que cuando los recursos financieros "se dedican a una actividad que no es un gasto corriente, sino de inversi¨®n, no pueden ser computados como d¨¦ficit por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial y otras instituciones financieras". Como ejemplo, la ministra cit¨® una norma de la Uni¨®n Europea aprobada para 2007, que establece que no se computen determinadas inversiones en el d¨¦ficit hasta unos l¨ªmites establecidos. Otro antecedente ser¨ªa el caso de Brasil, por lo que se plantea que "se ampl¨ªe el criterio" al resto de pa¨ªses, ya que estas inversiones inciden en la productividad y competitividad de los Estados. Estas experiencias se tratar¨¢n de usar en las negociaciones de cada pa¨ªs con las instituciones financieras.

Adem¨¢s, las conclusiones acuerdan "impulsar una planificaci¨®n estrat¨¦gica flexible en materia de transporte e infraestructuras, con un enfoque intermodal, apoyada en el consenso social, en la equidad territorial y en la sostenibilidad ambiental". Tambi¨¦n se impulsar¨¢n y coordinar¨¢n los programas de formaci¨®n y capacitaci¨®n continuada, y se fomentar¨¢ la utilizaci¨®n de combustibles alternativos en el transporte para reducir la dependencia del sector respecto de los combustibles f¨®siles.