Relax de urgencia
Los 'spas' urbanos crecen en Valencia y se consolidan como una oferta antiestr¨¦s cercana
Kenneth Galbraith, el economista moderno m¨¢s did¨¢ctico, lleg¨® a decir que "en la sociedad opulenta no se puede hacer distinci¨®n pr¨¢ctica entre lujos y necesidades". Hoy, el nuevo lujo -coches, adosados y marcas de ropa aparte- se basa en obtener sensaci¨®n de relax y bienestar, algo que siempre se ha relacionado con los ricos y que ahora el mercado acerca a una cada vez m¨¢s necesitada clase media. La opci¨®n urbana de moda son los spas -deriva del lat¨ªn salus per aqua-, centros en los que tratamientos f¨ªsicos relacionados con agua y masajes mejoran el estado -interno y externo- del cliente.
"Emulan los balnearios, pero los spas no son centros sanitarios ni utilizan agua minero-medicinal, ya que se valen de agua corriente", explica Xavier Mar¨ª, presidente de la asociaci¨®n de balnearios de Valencia y director del balneario de Chulilla. "Aunque su boom se basa en traer a la ciudad lo que est¨¢ lejos", opina, "su actividad no interfiere en la del balneario; ¨¦ste tiene la baza del entorno natural". Mar¨ª cree que la categor¨ªa de estos centros urbanos "necesita mayor definici¨®n, ya que cualquier local de est¨¦tica puede auto-nombrarse spa". "De hecho, est¨¢ pendiente de aprobarse en la Comunidad una ley que diferenciar¨¢ los balnearios de los centros de hidroterapia", indica.
"A todos beneficiar¨¢ cualquier regularizaci¨®n del sector", indica Alejandro Ribarrocha, consejero delegado de Calma, gran centro de terapia acu¨¢tica en el coraz¨®n de Valencia. Es uno de los 16 spas instalados en Valencia y alrededores recomendados en la web de la oficina Turismo Valencia-Convention Bureau. No es raro, ya que el turismo de salud y belleza, seg¨²n la consultora DBK, crece en Espa?a a un ritmo anual superior al 17%. Desde hace un par de a?os, y ahora m¨¢s que nunca, las opciones se suceden en Valencia. El precio medio es de 24 a 60 euros, aunque puede aumentar seg¨²n terapias.
Desde Calma, consideran "interesantes" las perspectivas del mercado. Lo mismo cree Juan Carlos Guerrero, de Body Factory-Manuel Candela, espacio que conjuga gimnasio y spa. La mezcla se llama wellness y est¨¢ pensada "para personas mayores y j¨®venes que quieren sentir que hacen algo f¨ªsico por su salud no s¨®lo en excursiones a balnearios, sino en un seguimiento diario". "A¨²n es el culto el cuerpo lo que m¨¢s empuja a utilizar un spa", explica Paula Navarro, propietaria de Navarro Spa Catal¨¢, cuidado y personalizado establecimiento, unido a la veterana Herborister¨ªa Navarro, que basa su opci¨®n en el desarrollo de la aromaterapia. "Abrimos hace cuatro a?os, los primeros, y siempre quisimos poner al alcance de una mayor¨ªa algo que hab¨ªa sido minoritario". "Intentamos que el bienestar del cliente -m¨¢s femenino que masculino, aunque ¨¦ste aumenta- sea global, que afecte a mente, energ¨ªa y cuerpo".
Algo as¨ª desean tambi¨¦n los responsables de Oblivium, primer centro de terapia de flotaci¨®n inaugurado este verano en Valencia. En un flotario o c¨¢mara de agua, el cliente, c¨®modamente y en soledad, sin est¨ªmulos externos, con luz tenue, flota durante una hora en una soluci¨®n sal¨ªnica cinco veces m¨¢s densa que el agua del mar. "Es una eficaz terapia de relajaci¨®n, pero tambi¨¦n para conocerse", considera Mar¨ªa ?ngeles Abell¨¢n, una de las co-propietarias del establecimiento. "Hemos vivido en Londres, y esto all¨ª es algo muy extendido", explica Lenny Lencina, co-propietario. "Valencia est¨¢ reinvent¨¢ndose y creemos que esta nueva terapia anti-estr¨¦s ser¨¢ bienvenida". ?Necesidad o lujo? En estos d¨ªas es lo mismo, seg¨²n Galbraith.
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