Los h¨¦roes de la revoluci¨®n de Ucrania entablan una lucha fratricida
Y¨²shenko y Timoshenko se acusan mutuamente de corrupci¨®n
Los protagonistas de la revoluci¨®n naranja de Ucrania afilan sus cuchillos, y no para combatir de nuevo a un r¨¦gimen corrupto, sino para una lucha fratricida. La pugna entre el presidente V¨ªktor Y¨²shenko y la ex primera ministra, Yulia Timoshenko, encoge los corazones de los ucranianos de buena fe, que en oto?o de 2004 salieron a la calle para reivindicar una pol¨ªtica al servicio del ciudadano y un corte radical con el r¨¦gimen de Leonid Kuchma. Los h¨¦roes del maid¨¢n (la plaza) de Kiev nunca fueron un equipo homog¨¦neo.
Sus diferencias acabaron por aflorar este mes con mutuas acusaciones de corrupci¨®n, que, por una parte, afectan al entorno de Y¨²shenko en las estructuras de la presidencia y, por la otra, a Timoshenko y al Gobierno. Con la administraci¨®n paralizada, Y¨²shenko opt¨® por cesar a sus colaboradores m¨¢s cercanos y al Gobierno.
Tras las acusaciones que desgarran al equipo de la revoluci¨®n naranja, la cuesti¨®n clave es en qu¨¦ medida se han distanciado los l¨ªderes de Ucrania de las pr¨¢cticas viciosas y del clima de inmoralidad en el que ellos mismos se curtieron. Los ciudadanos de a pie se preguntan hoy desorientados si los h¨¦roes del Maid¨¢n utilizan sus cargos en beneficio propio y de sus compadres, como lo hicieron sus predecesores. Todo indica que el anhelado cambio no se ha producido y que la pol¨ªtica es cenagosa tambi¨¦n despu¨¦s de la revoluci¨®n. "Siento verg¨¹enza y se me hace un nudo en la garganta cuando oigo las canciones de la revoluci¨®n. El color naranja me produce n¨¢useas", se?ala desde Kiev Vlad¨ªmir, un ucranio que se alegr¨® del triunfo de Y¨²shenko. Vlad¨ªmir ha tomado ahora partido por Timoshenko, por creer que "ella desea y es m¨¢s capaz de una ruptura que el actual presidente". A sus ojos, Y¨²shenko es v¨ªctima de allegados como Piotr Poroshenko, el ex jefe del Consejo de Seguridad. Este empresario millonario se ampara en para¨ªsos fiscales para hacer negocios, seg¨²n dijo ayer en Kiev el ex jefe del Servicio de Seguridad de Ucrania, Alexandr Tursh¨ªnov. La opini¨®n p¨²blica parece favorable a Timoshenko, que seg¨²n una encuesta de la soci¨®loga Olga Balokirova, tiene una popularidad del 50%, mientras la de Y¨²shenko es del 45%.
La clase pol¨ªtica toma posiciones con la vista puesta en los comicios parlamentarios de marzo, que son muy importantes, debido a la entrada en vigor en enero de una reforma constitucional que recorta los amplios poderes del presidente a favor del Parlamento y el primer ministro. Por primera vez, quien consiga la mayor¨ªa en las urnas podr¨¢ formar gobierno, cosa que hasta ahora no sucede ni en Ucrania ni en la mayor¨ªa de pa¨ªses pos sovi¨¦ticos, incluida Rusia.
La redistribuci¨®n de poder fue parte del paquete, gestionado por mediadores internacionales, para que el viejo r¨¦gimen y el Parlamento aceptaran el triunfo de Y¨²shenko en diciembre. Por entonces, Y¨²shenko, con su estilo pausado y su sentido de misi¨®n, y Timoshenko, con su inteligencia viva, su capacidad de riesgo y su oratoria incendiaria, eran un poderoso t¨¢ndem. Hoy, ambos pol¨ªticos tratan de arrebatarse la antorcha de la revoluci¨®n y, de no llegar a un compromiso, se enfrentar¨¢n entre s¨ª en las urnas con las fuerzas que les apoyen. Y¨²shenko ha acusado a Timoshenko de haber abusado de su cargo de primera ministra para presionar a los acreedores de una empresa energ¨¦tica que ella hab¨ªa dirigido con el fin de archivar las deudas contra¨ªdas durante su gesti¨®n. Tambi¨¦n la ha acusado de complicidad con intereses empresariales. Timoshenko, por su parte, ha evitado atacar a Y¨²shenko en persona. Alega, en cambio, que el l¨ªder ha tomado partido por sus colaboradores corruptos y ha renunciado a las reformas y al mandato de la revoluci¨®n. Timoshenko se ha granjeado muchos enemigos con su programa de revisi¨®n de las privatizaciones, que afectaba al imperio sider¨²rgico de V¨ªctor Pinchuk, el yerno de Kuchma, quien goza de buenas relaciones con Poroshenko. Los resultados econ¨®micos acusan el mal clima. El pron¨®stico de crecimiento del PIB ha sido reducido del 8,2% al 6,5% y en agosto el crecimiento econ¨®mico fue negativo (-1,6%) en relaci¨®n con mismo mes de 2004. El cisma abre nuevas perspectivas de alianzas a los sectores que apoyaron a V¨ªktor Yanukovich, el candidato de Kuchma a la presidencia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.