Panach¨¦ audiovisual

La sala del BBVA en la bilba¨ªna plaza de San Nicol¨¢s presenta estos d¨ªas una exposici¨®n audiovisual organizada por la Facultad de Bellas Artes de la Universidad del Pa¨ªs Vasco (UPV). Son ejemplos variados de instalaciones multimedia, videocreaci¨®n, videoanimaci¨®n o videoficci¨®n elaborados por un grupo de alumnos de la propia facultad. Entre esta diversidad de autores se encuentran frutos art¨ªsticos muy variados. En su mayor¨ªa, son aportaciones generosas en ideas y loables en su resoluci¨®n t¨¦cnica. No obstante, en esta mezcla de ideas y expresiones se encuentran algunos destellos brillantes y otros menos. Es una sensaci¨®n inevitable cuando se comparan unos y otros autores, que incluso ocurre cuando se trata de los m¨¢s consagrados. No sirve decir que cada uno tiene su estilo y s¨®lo por ello debe ser aplaudido. Cuando se trata de obras interactivas, tal como presenta ¨¦stas el comisario, Josu Rekalde, donde la participaci¨®n de espectador es requisito imprescindible (?cu¨¢ndo no!), es precisamente ¨¦ste quien punt¨²a de m¨¢s a menos el inter¨¦s de cada obra.

Esta interesante exposici¨®n de pensamiento y formas expresivas emergentes busca el contrapunto en la obra gr¨¢fica de Carlos Saura. Sus fotograf¨ªas en blanco y negro y algunas acuarelas del story-board de su pel¨ªcula Goya en Burdeos, se presentan como una interacci¨®n entre estudiantes y el fot¨®grafo, pintor y sobre todo cineasta. No obstante, la realidad es muy terca y en este caso cada cual campa descaradamente por su lado. La interacci¨®n entre unos y otros no se palpa. Quiz¨¢ incluso alguien encuentre tambi¨¦n, entre las fotograf¨ªas de Mis Musas realizadas por Zuhar Iruretagoiena, con evidentes poses goyescas, connotaciones con la pel¨ªcula del autor multidisciplinar, aunque ser¨ªa algo pat¨¦tico, de coger con pinzas.

Las acuarelas y, sobre todo, la vibrante energ¨ªa que destilan sus fotograf¨ªas en blanco y negro no se prestan a c¨®modas interacciones y mucho menos con la obra pl¨¢stica que junto a ellas se presenta. Adem¨¢s, s¨®lo con la lectura de los interesantes textos de Jos¨¦ Juli¨¢n Bakedano o el de Patxi Urkijo que acompa?an el cat¨¢logo de la muestra nos acercamos a esa conclusi¨®n.

Si nos detenemos en las fotos, la interacci¨®n resulta m¨¢s compleja. Son 12 fotos impresionantes de la serie Espa?a a?os 50. La fiesta de la vaquilla, ni?os pidiendo limosna, la feria de ganado con un fondo de carteles de cine, el precioso retrato de una segadora castellana o las monjas viajeras sobre un carro tirado por una mula, circulando por una carretera en la que destaca un significativo moj¨®n marcado por el n¨²mero 36 son algunas de las fotos que vuelan libres, con alas y alma propia, imposibles de alcanzar.