"Ya nunca volver¨¦ a mi casa"

La luz apenas entra en el piso de Charo Miguel, en el n¨²mero 12 de la calle de Jos¨¦ Antonio Armona, una de las casas afectadas por las obras del Circo Estable, porque las ventanas est¨¢n tapadas por los andamios instalados en el patio interior del edificio. El dormitorio de su hijo est¨¢ clausurado con 11 puntales y, desde entonces, ¨¦l duerme en una cama plegable en el sal¨®n.

En el pasillo de la vivienda, las grietas recorren las paredes del suelo al techo. En el cuarto de ba?o y la cocina, los azulejos han cedido por la fuerza con la que empujan los muros. La situaci¨®n es tal que la familia abandonar¨¢ ma?ana, viernes, el edificio.

La familia de Charo Miguel, de 60 a?os, aprovechaba ayer el d¨ªa festivo para llenar las cajas con sus enseres, pues ma?ana ser¨¢ realojada en un nuevo piso por el Ayuntamiento de Madrid. Es la ¨²ltima de las siete viviendas que han tenido que ser desalojadas, aunque el resto se march¨® hace mucho tiempo.

"Si a esta familia la realoja el Ayuntamiento es porque hemos presionado los vecinos", asegur¨® Lola Y¨¢?ez, que vive en el edificio de al lado. Son los ¨²ltimos en ser realojados del n¨²mero 12, de donde ya salieron los ocupantes de seis viviendas, cuando se notaron los primeros desperfectos.

"El nuevo piso no es el mismo barrio, no est¨¢ siquiera cerca. Pero bueno...", se lamentaba Charo, mientras trataba de hacerse a la idea de que se marcha del que fue su hogar los ¨²ltimos 40 a?os. "Yo s¨¦ que ya nunca volver¨¦ a mi casa", dec¨ªa entristecida.

Los tres a?os que lleva viviendo con su casa llena de grietas y andamios no le han dejado esperanzas. "Todo por una obra que no se debi¨® hacer", dice respecto al Circo Estable. Sin embargo, ella reconoce que la nueva casa, que tiene tres habitaciones, ser¨¢ mejor que soportar otro invierno sin poder cerrar las ventanas de dormitorios y cuarto de estar.

Pese a que el Ayuntamiento se hace cargo de la mudanza y el piso, el cambio de hogar tambi¨¦n le va a suponer nuevos gastos a la familia, pues gran parte de los muebles est¨¢n hechos a medida y no podr¨¢n usarlos. "Dime a m¨ª qu¨¦ gastos m¨¢s enormes tengo que hacer", se quejaba.

Charo deja su casa cuando est¨¢ a punto de cumplirse un a?o, el pr¨®ximo 4 de noviembre, desde que el alcalde, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, se comprometi¨® a "ejecutar al cien por cien" el informe elaborado por el Defensor del Pueblo, Enrique M¨²gica, en el que establec¨ªa una "relaci¨®n inequ¨ªvoca" entre los desperfectos y las obras del circo.

Sin embargo, los vecinos de los n¨²meros 4 a 12 de la calle de Jos¨¦ Antonio Armona se quejan de que en este tiempo los desperfectos de sus viviendas no han sido reparados, ni han recibido ayudas para pagar los puntales y andamios que sujetan los muros y que les cuestan unos 10.000 euros mensuales, que se suman a los cerca de 132.000 euros que les supuso poner pilares en cada edificio. Los vecinos afrontan por ello derramas de unos 300 euros y muchos de ellos son pensionistas. "Mi madre cobra 431 euros al mes", precis¨® Caridad Jarabo, que vive en el n¨²mero 8.

"Ahora el Ayuntamiento est¨¢ haciendo catas en las casas que faltaban. Pero es puro parip¨¦", afirm¨® Milagros Aparicio, vicepresidenta de la Asociaci¨®n de Afectados del Circo Estable, que asegur¨® que se sienten "defraudados, enga?ados y humillados".

"Nosotros estamos dispuestos a acometer las obras", replic¨® el coordinador general de Organizaci¨®n de la Concejal¨ªa de Urbanismo, Francisco Panadero. "Lo que queremos es actuar de forma inmediata y tenemos todo preparado para hacerlo".

Sin embargo, todav¨ªa no han podido entrar en las casas porque los vecinos no se lo han permitido. Tres de los cinco edificios afectados, los n¨²meros 4 al 8, no han dado el visto bueno al proyecto de reparaci¨®n que les ha presentado el Ayuntamiento.

Los otros dos inmuebles, los n¨²meros 10 y 12, ni siquiera tienen un plan, porque durante meses no dejaron entrar a los t¨¦cnicos municipales, mientras no les acompa?aran los arquitectos que ellos hab¨ªan contratado.

En el primer caso, la negativa tiene que ver con el coste del proyecto. "Contratamos a un arquitecto para que nos hiciera un estudio de lo que nos iban a costar las obras, que presupuest¨® en un mill¨®n de euros para arreglar toda la finca, con 35 viviendas", explic¨® Caridad Jarabo, que agreg¨® que el proyecto de Urbanismo eleva la cantidad a dos millones, s¨®lo en la planta baja.

"Como todav¨ªa no est¨¢ resuelto el expediente de responsabilidad patrimonial, no est¨¢ claro qui¨¦n pagar¨¢, si el Ayuntamiento o nosotros", agrega Gloria Sacrist¨¢n, del mismo edificio. "Dijimos que no acept¨¢bamos el proyecto municipal porque puede que al final nos toque pagar, y lo que nos proponen es m¨¢s caro".

Tambi¨¦n se quejan de que en ese proyecto los t¨¦cnicos municipales inflaron los costes, al obligarles a instalar puertas blindadas y ventanas con cristales Climalit donde antes no hab¨ªa, ba?eras hasta en los locales comerciales e incluso aire acondicionado.

En el segundo caso, el Ayuntamiento logr¨® autorizaci¨®n para entrar en las viviendas en septiembre. Los t¨¦cnicos municipales han hecho "calicatas" -perforaciones en el suelo para comprobar su estado- y elaboran un informe que servir¨¢ para presentarle a los vecinos de los n¨²meros 10 y 12 un plan similar al de los otros edificios, seg¨²n Panadero. El escollo sigue siendo el coste de las obras, pues mientras no se resuelva el expediente no est¨¢ claro qui¨¦n asumir¨¢ su pago.