Un invierno distinto en Do?ana

Do?ana est¨¢ a un mes de iniciar su temporada alta. "Las marismas son una zona de invernada privilegiada para las aves acu¨¢ticas que aqu¨ª encuentran alimento y descanso antes de seguir su ruta", explica el director de la Estaci¨®n Biol¨®gica de Do?ana (CSIC), Fernando Hiraldo. El hotel Do?ana empieza a acoger hu¨¦spedes a partir del 15 de noviembre y alcanza su m¨¢xima ocupaci¨®n en diciembre y enero, cuando puede albergar m¨¢s de un mill¨®n de gansos, patos, cig¨¹e?as, garzas, gaviotas, avefr¨ªas, esp¨¢tulas y flamencos, entre otras especies. Tras un a?o muy seco, se augura una temporada menos frecuentada de lo habitual. Pero, junto a la sequ¨ªa, la vinculaci¨®n que han establecido los organismos internacionales entre las aves migratorias y la expansi¨®n de la gripe aviar gana terreno entre las preocupaciones de los gestores de este espacio natural.

Expertos reunidos por la Comisi¨®n Europea concluyeron en septiembre que hab¨ªa que extremar la vigilancia sobre 15 especies de aves acu¨¢ticas y considerar "zona de riesgo" las concentraciones de aves migratorias. Hay pocas zonas de invernada tan concurridas en Europa como Do?ana, y los censos anuales registran entre 300.000 y 500.000 ejemplares de la lista roja de Bruselas (dos tipos de gansos, nueve de patos, dos de gaviotas, el avefr¨ªa y el combatiente). Los indicios parecen contundentes, pero la pista es endeble. Cient¨ªficos, gestores y ecologistas coinciden en que la probabilidad de que la gripe aviar, en su cepa m¨¢s agresiva, se desarrolle en Do?ana es muy baja.

"Las aves migratorias que invernan en Do?ana vienen de los pa¨ªses escandinavos, b¨¢lticos y centroeuropeos, muy lejos de donde se han registrado los brotes", aclara el director de la Estaci¨®n Biol¨®gica. La autopista migratoria que cruza este espacio -100.000 hect¨¢reas protegidas entre Huelva y C¨¢diz que constituyen un santuario para especies tan amenazadas como el lince y el ¨¢guila imperial- va de las zonas m¨¢s al norte de Europa occidental, como Laponia, a la costa oeste de ?frica. Pero es una regla que tiene sus excepciones: cada a?o, los ornit¨®logos se encuentran en las marismas del Guadalquivir unos pocos ejemplares anillados en zonas tan remotas como Siberia o Kazajist¨¢n, donde el virus H5N1, el m¨¢s peligroso de las variantes de la gripe aviar (ha causado la muerte de 60 personas y el sacrificio de 100 millones de aves dom¨¦sticas en Asia), s¨ª se ha manifestado.

Adem¨¢s, hay semanas en que las autopistas migratorias tienen tr¨¢fico en los dos sentidos. En el centro de Europa, la mayor¨ªa elige la ruta que va a ?frica v¨ªa Do?ana, pero tambi¨¦n las hay que van al delta del Danubio y el Mar Negro, zona de invernada tradicional de las aves que cr¨ªan en el sur de Siberia. En dos pa¨ªses de este ¨¢rea, Turqu¨ªa y Rumania, se han detectado aves de corral contagiadas.

"La migraci¨®n de aves salvajes transmite el H5N1", sentenci¨® el viernes a este peri¨®dico David Nabarro, coordinador mundial de la OMS contra la gripe aviar. Una conclusi¨®n que asociaciones conservacionistas internacionales como BirdLife rebaten. "Es s¨®lo una hip¨®tesis, en Asia la enfermedad pas¨® de aves de corral a aves silvestres y creemos m¨¢s probable que en su difusi¨®n sea m¨¢s importante el movimiento de aves de corral", explica Ana Bermejo, responsable de SEO, organizaci¨®n espa?ola integrada en BirdLife.

Lo que se les hace muy cuesta arriba a Hiraldo y Bermejo es que un ejemplar infectado pueda cubrir los miles de kil¨®metros que separan Do?ana de las zonas en que se ha detectado el virus. "La migraci¨®n exige muchas energ¨ªas, la mortalidad suele aumentar y los ejemplares m¨¢s d¨¦biles no llegan", explica la experta de SEO. "Hay especies que cubren etapas diarias de 600 kil¨®metros, son como maratonianos", agrega. Las pocas aves que se aventuran a hacer el rally a¨¦reo Siberia-Do?ana pueden tardar m¨¢s de un mes en completarlo, un tiempo que se antoja excesivo para un animal enfermo.