'Made in China' traslada a TVE el humor de 'Vaya semanita'

?scar Terol y su equipo se atrevieron a parodiar la compleja situaci¨®n de Euskadi y ense?aron a los vascos a re¨ªrse de s¨ª mismos en ETB-2 con Vaya semanita. Ahora extienden el campo de acci¨®n de su risoterapia al resto de Espa?a con Made in China, un programa pegado a la actualidad que estrena ma?ana TVE-1 a las 23.00. Boris Izaguirre, que debuta el 8 de noviembre en Cuatro, es el primer invitado.

"No pretendemos m¨¢s que entretener, divertir. ?se ya es un objetivo muy grande", dice Terol. ?C¨®mo? Pasando hasta la realidad m¨¢s cruda por el tamiz de todos los subg¨¦neros humor¨ªsticos. "En Made in China manda el humor sin calificar ni etiquetar. Desde el absurdo al costumbrista, al negro, al de parodia, a las imitaciones... o hasta los chistes, si son buenos", anuncia la cadena.

El esquema es sencillo. Terol presenta en el plat¨® ante el p¨²blico una sucesi¨®n de alrededor de veinte sketches y reportajes, entrevista cada semana a un invitado y le hace un "traje a medida" con im¨¢genes y declaraciones de archivo. El programa tendr¨¢ en sus inicios cuatro secciones fijas -'Los enigmas de la semana', 'Verg¨¹enza ajena', 'El doble de respuesta' y 'Mr. Beep'-, pero ir¨¢ enriqueci¨¦ndose con el tiempo seg¨²n lo que mande la audiencia. "Ocurri¨® en Vaya semanita y suceder¨¢ aqu¨ª tambi¨¦n", explica el director de guionistas, Diego San Jos¨¦. "Son los espectadores los que deciden si un personaje funciona o no y lo convierten en su caso en una mina de oro".

Made in China se produce ¨ªntegramente en San Sebasti¨¢n. All¨ª, entre las paredes de la antigua f¨¢brica de Tabacalera y futuro Centro Internacional de Arte Contempor¨¢neo, y ante un p¨²blico expectante, se grab¨® el viernes pasado su primera entrega. "Lau, hiru, bi, bat..." ["Cuatro, tres, dos, uno...", en euskera]. Terol pisa el plat¨® y se apresura a dejar claro qu¨¦ pretende. Pero le cortan. Tiene que repetir por un problema t¨¦cnico. A la segunda s¨ª, a la segunda presenta Made in China: "Somos casi cien personas que trabajan para que usted lo pase bien". Y luego, entre grabaci¨®n y grabaci¨®n, confirma que realmente no tienen otra pretensi¨®n. "Si a una persona la entretienes con contenidos, lo dem¨¢s [desde desdramatizar hasta hacer reflexionar] viene dado", apunta. "L¨®gicamente, lanzamos dardos y cr¨ªticas superando la divisi¨®n de izquierdas y derechas, sacamos punta a acontecimientos, pero lo primero que miramos es qu¨¦ nos hace gracia a nosotros. Se trata de lograr un consenso sobre eso. Suponemos que as¨ª tenemos garantizada la risa de mucha gente". Y ¨¦sta es la mejor forma de "enfrentarse a los problemas de la sociedad", afirma la actriz Pilar Gil.

Terol y su equipo se r¨ªen de todo, sacan punta a cualquier tema, a cualquier suceso, a cualquier problema social o pol¨¦mica pol¨ªtica. No se trata de destripar el programa de ma?ana, pero en ¨¦l se hablar¨¢ de la llegada de inmigrantes en pateras, de las aerol¨ªneas de bajo coste o de la relaci¨®n entre Fernando Alonso y el periodista de Tele 5 Antonio Lobato. Y se emitir¨¢ un reportaje de investigaci¨®n: '?Por qu¨¦ la Casa Real no ha dicho el sexo del futuro hijo de los pr¨ªncipes?'. El p¨²blico, muy expectante, no par¨® de re¨ªr durante las casi dos horas que dur¨® la grabaci¨®n. Boris Izaguirre, primer invitado de la temporada y siempre a favor del espect¨¢culo, tuvo mucho que ver en todo ello.

Vaya semanita ha perdido audiencia en su nueva etapa en ETB, y Terol y su equipo se han dejado en el camino sus caracterizaciones y miniseries m¨¢s aplaudidas. "No conozco a nadie que lo haya hecho y es dur¨ªsimo", dice el actor, director, guionista y presentador. "Hasta Buenafuente se llev¨® los personajes que le funcionaban al saltar de TV-3" a Antena 3. San Jos¨¦ lo ve positivo: "Es estimulante y bonito que los espectadores vivan el proceso de formaci¨®n de los personajes. Al final, ellos son los que deciden su recorrido" y moldean el programa.