Un pleno de Llaur¨ª acaba en medio de insultos y golpes

La mayor parte de los 1.300 habitantes de Llaur¨ª no ha digerido a¨²n el cambio de gobierno municipal registrado el pasado 18 de octubre, propiciado por una moci¨®n de censura contra la alcaldesa socialista Ana Gonz¨¢lez. El pleno de la censura fue tenso y plagado de incidentes, pero fue superado con creces por la sesi¨®n del pasado lunes. En ella abundaron los insultos y las amenazas hasta llegar incluso a alguna agresi¨®n entre los partidarios del anterior gobierno progresista, formado por el PSPV y el Bloc, y los simpatizantes del nuevo equipo que preside el ex edil de Uni¨®n Valenciana Juan Jos¨¦ Cucarella, con el apoyo del PP y del PSI-CV.

La trifulca que se mont¨® en el pleno del lunes desemboc¨® en que la mujer del concejal del PP fuera atendida en el hospital de Alzira a causa de un golpe en un ojo y en las denuncias del actual alcalde, Juan Jos¨¦ Cucarella, y del responsable de Urbanismo, Juan Agust¨ªn Sanmiguel, presentadas ayer en el Juzgado de Sueca contra varios vecinos por intento de linchamiento y por insultos y amenazas.

Los nervios de los 50 vecinos que asistieron el lunes por la noche a un pleno de tr¨¢mite

de apenas tres puntos, se desataron al suspender el alcalde la sesi¨®n en el ¨²ltimo punto del orden del d¨ªa, reservado a ruegos y preguntas. "Se enfadaron porque no quiso darles la palabra", explic¨® el portavoz del PSPV, Jos¨¦ Gonz¨¢lez, quien neg¨® que intentaran agredir al alcalde. "Yo mismo apart¨¦ a un chico que, eso s¨ª, le llam¨® sinverg¨¹enza".

Cucarella justific¨® la suspensi¨®n del pleno dado que "los constantes abucheos" no les dejaban hablar. Por su parte, Sanmiguel, tr¨¢nsfuga del PSPV que propici¨® la moci¨®n de censura, atribuy¨® a familiares de la ex alcaldesa y del portavoz socialista "la crispaci¨®n" con la que se desarrollan los plenos.

Mientras los simpatizantes socialistas tachan de "dictadores" a los actuales gobernantes, en algunas paredes de Llaur¨ª han aparecido pintadas contra el edil socialista Jos¨¦ Gonz¨¢lez, al que acusan de haberse beneficiado durante los dos a?os y medio que dur¨® el mandato del anterior gobierno. Es una muestra m¨¢s del ambiente enrarecido en que viven los habitantes del peque?o municipio de la Ribera Baixa.