Ajetreado viaje de estudios

Dedicar toda la juventud a un deporte profesional le priv¨® a Jos¨¦ Luis Galilea (San Sebasti¨¢n, 1972) de unos estudios universitarios, aunque acrecent¨® sus inquietudes intelectuales. Madrid, Barcelona, Bolonia, Atenas... son algunos de los destinos de la carrera profesional de este hombre, entregado ahora a la causa del Bruesa Gipuzkoa Basket Club, que lo ha contratado para los que ser¨¢n sus dos ¨²ltimos a?os en el baloncesto. Es el regreso a casa de un base que ha acumulado t¨ªtulos y reconocimientos en Espa?a y en el extranjero pero que, sobre todo, se jacta del bagaje humano que le ha proporcionado la emigraci¨®n deportiva. "El baloncesto dura unos a?os, pero lo que he visto y aprendido es para toda la vida", asegura.

"El baloncesto dura unos a?os pero lo que he visto y aprendido es para toda la vida"

Originario de una familia de baloncestistas -su t¨ªo Fernando jug¨® en el legendario Askatuak-, Galilea, conocido en las canchas como Galis en asociaci¨®n con el hist¨®rico base griego Nikos Gallis, march¨® con pocos a?os a Vitoria para formarse. De ah¨ª, con 16 a?os, el salto al equipo junior del Real Madrid y dos m¨¢s tarde el debut en la ACB con el Barcelona. En 1996 deja la Ciudad Condal, "invitado a salir" por el entrenador A¨ªto Garc¨ªa Reneses. A partir de entonces, el desplazamiento es continuo. Un a?o en Kinder Bolonia -el club con m¨¢s renombre de Italia-, dos en Le¨®n, vuelta al Madrid, otro a?o en Orense, uno m¨¢s en el Ionikos griego, dos temporadas en Murcia y regreso a San Sebasti¨¢n, previo paso el pasado a?o por Zaragoza. En su palmar¨¦s, dos Ligas y dos Copas con el Barcelona, otra Liga con el Madrid, una copa de Italia y dos subcampeonatos de Europa con el Barcelona.

Cambiar Espa?a por Italia no fue f¨¢cil. "Me cost¨® mucho tomar la decisi¨®n, porque en Barcelona estaba muy bien, pero lo hice porque cuando era chaval y opt¨¦ por el baloncesto, dejando de lado los estudios, ya sab¨ªa lo que implicaba. A veces no siempre hay que hacer lo que a uno le gustar¨ªa". Para Galilea, aquello despert¨® tambi¨¦n un ansia de conocer la vida en otros lugares. "Aprend¨ª a hablar italiano, conoc¨ª sus ciudades. Todas esas cosas hacen que la persona se adapte mejor a los sitios y se hace menos duro estar fuera de casa. Y se te trata mejor".

Apreciado por compa?eros y amigos, Jos¨¦ Luis Galilea evoca tambi¨¦n las diferencias entre Madrid y Barcelona. "En Madrid, la atenci¨®n de la gente est¨¢ diversificada entre el deporte y el espect¨¢culo, pero en Barcelona, quiz¨¢s por las connotaciones pol¨ªticas, todo es Bar?a", dice. En su estancia en Atenas aprendi¨® algo de griego. "Los compa?eros me dec¨ªan qu¨¦ utilidad iba a tener eso cuando me fuera del pa¨ªs, pero me gusta aprender otras lenguas. Viajar es lo m¨¢s bonito del deporte profesional. Es la oportunidad de conocer otra gente, otros lugares, y de aprender que no s¨®lo existe el punto de vista de uno mismo, sino que hay m¨¢s y que todos pueden ser v¨¢lidos", asevera. Una vocaci¨®n de cultivarse que se ampl¨ªa a otras esferas de la vida, ya que en Barcelona recibi¨® clases de piano y en los ¨²ltimos a?os ha estudiado cursos de dise?o publicitario, guitarra y ha obtenido el carn¨¦ de patr¨®n de embarcaciones deportivas. Ahora, retornado a San Sebasti¨¢n, Galilea se prepara para otro reto: aprender euskera. "Me gustar¨ªa conceder entrevistas antes de final de a?o en euskera", concluye.