A?o y medio de roces

La incontinencia del ministro de Defensa, Jos¨¦ Bono, su tendencia a exceder los l¨ªmites de su parcela de Gobierno y a entrar en campos ajenos, anunciando noticias que, en ocasiones, correspond¨ªan a otros departamentos, como Fomento, han sido motivo de roces, m¨¢s o menos confesados, del ex presidente de la Junta de Castilla-La Mancha con otros ministros y, especialmente, con el titular de Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos, ya que la proximidad de las carteras ha hecho que las interferencias sea m¨¢s frecuentes en su caso.

M¨¢s all¨¢ de detalles anecd¨®ticos, como que Bono dictara el pasado mes de julio una conferencia sobre La nueva pol¨ªtica exterior espa?ola, esa incomodidad por conductas invasoras tuvo su principal hito el a?o pasado, cuando Bono anunci¨® la venta de material de Defensa a Venezuela antes de que fuera aprobada por el Gobierno, e incluso filtr¨® a la prensa el viaje a Caracas del presidente Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, que hab¨ªa comenzado ya a preparar con la ayuda de un embajador amigo.

El protagonismo decisivo de Bono en la retirada de las tropas espa?olas de Irak, la v¨ªspera del primer viaje de Moratinos a Washington para empezar a negociar el asunto, fue un pr¨®logo esclarecedor de estas relaciones, que volvieron a complicarse el pasado mes de junio, por pol¨¦micas oficiosas sobre el papel de los respectivos departamentos en la cooperaci¨®n exterior.

El mutis por el foro del titular de Defensa en el asunto de las escalas de aviones de la CIA en aeropuertos espa?oles y la consiguiente decisi¨®n de que sea el ministro de Exteriores quien comparezca en las Cortes para explicar un problema que su departamento no considera de competencia propia, y sobre el que ha estado asegurando hasta el pasado viernes que no estuvo informado, no contribuye, evidentemente, a mejorar las relaciones entre un pol¨ªtico de raza, que utiliza su peso en el partido, y un t¨¦cnico de la diplomacia, que entr¨® en el PSOE tras la ca¨ªda del Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez.