"Soy un vencedor, no un perdedor"

Dice el refranero que "cuando el r¨ªo suena agua lleva". En el Madrid, el r¨ªo baja turbio porque se habla m¨¢s de los fichajes que est¨¢n por venir que del partido de la Champions de hoy contra el Olympique de Ly¨®n. Porque se comenta la renovaci¨®n o no de Casillas y no la lesi¨®n de Ronaldo, que se perdera el encuentro porque jug¨® infiltrado contra el Bar?a y ha reca¨ªdo de su lesi¨®n en el tobillo izquierdo. El tema estrella, sin embargo, ata?e a Vanderlei Luxemburgo, el entrenador, que siempre gusta de recordar que ¨¦l es el que manda, el capit¨¢n del barco. M¨¢s a¨²n despu¨¦s de la derrota contra el Bar?a, que ha rodeado su cargo de pretendientes. "Soy un profesional preparado para el f¨²tbol", se defendi¨® ayer; "s¨¦ que el problema no pasa s¨®lo por m¨ª. No estoy aqu¨ª de vacaciones. Estoy aqu¨ª para ganar".

Luxemburgo lleg¨® al Madrid en diciembre de 2004 y asumi¨® el papel de salvador. Clasific¨® al equipo el segundo en la Liga, a cuatro puntos del campe¨®n, el Bar?a. No pudo hacer m¨¢s, seg¨²n confesi¨®n propia, porque no lo hab¨ªa dirigido durante los seis primeros meses de la competici¨®n. Ahora le toca defenderse. "?Qu¨¦ piensa de que el club pueda haber fichado a Fabio Capello para sustituirle?", se le pregunt¨® ayer. "Que lo mismo dijeron el curso pasado y aqu¨ª sigo yo", contest¨®. "Yo pienso en el presente y no en si me van a quitar o no. S¨¦ lo que hay que hacer. Por mi cabeza no pasa salir de aqu¨ª hasta que termine mi contrato", continu¨®. "Ganar es una idea fija en mi cabeza. Soy un vencedor, no un perdedor. Estoy aqu¨ª para hacer las cosas muy bien hechas. Las cr¨ªticas son normales y merecidas. Cambiar¨¢n", sentenci¨®.

"?No debi¨® hablar con los j¨®venes tras el partido?", se le dijo. "?Por qu¨¦?", replic¨®. "Los jugadores tienen que hacer autoan¨¢lisis, preguntarse por qu¨¦ perdimos", prosigui¨® en su caracter¨ªstica mezcla de espa?ol y portugu¨¦s, salpicada de preguntas al auditorio sobre sus dudas ling¨¹¨ªsticas: "No se equivoquen. Yo hago muy bien la parte psicol¨®gica".

No fue una ma?ana f¨¢cil para Luxemburgo. La empez¨® reunido con Emilio Butrague?o, vicepresidente del club, y Arrigo Sacchi, director de f¨²tbol. La continu¨® entrenando al equipo a puerta cerrada, preparando "novedades" para el partido contra el Ly¨®n y pensando si ser¨¢ Baptista o Soldado quien ocupe la plaza de Ronaldo. Quedaba el plato fuerte, el que le gusta, el de los periodistas. "El mejor mensaje es la tranquilidad", dijo cuando se le record¨® la derrota ante el Bar?a. "Se buscan muchas disculpas y s¨®lo hay una: el Bar?a jug¨® mejor. Los culpables somos nosotros", concedi¨® Luxemburgo, un hombre que no desaprovecha oportunidad alguna para mandar mensajes autoritarios a sus jugadores. Ya lo dice el refranero: "A r¨ªo revuelto, ganancia de pescadores".