Clesa, negocios sin leche

El grupo Clesa, filial de la italiana Parmalat, sigue en el sector de la leche y derivados l¨¢cteos. Pero el principal negocio lo acaba de firmar en el sector inmobiliario, con la venta al constructor burgal¨¦s M¨¦ndez Pozo de unos 37.000 metros cuadrados casi en el coraz¨®n de Madrid por 144 millones de euros. Con f¨¢bricas y terrenos ubicados tambi¨¦n en otras capitales en zonas c¨¦ntricas, el grupo tiene en el negocio inmobiliario uno de sus mejores activos.

El grupo tiene una plantilla de 1.400 personas y factura 230 millones, lo que supone una productividad de las m¨¢s bajas del sector

La venta de las instalaciones del grupo Clesa, hoy en el n¨²cleo urbano en una zona en el norte de Madrid calificada como de industria terciaria para instalaciones de servicios, era algo que ya se daba por hecho en medios del sector l¨¢cteo y que adem¨¢s constitu¨ªa uno de los principales activos de la empresa para las diferentes ofertas de compra. La empresa tiene tres a?os para dejar las instalaciones. Oficialmente, el grupo tiene intenci¨®n de levantar una nueva planta en el cintur¨®n de Madrid.

En las pr¨®ximas semanas se cumplen dos a?os desde el inicio del esc¨¢ndalo del grupo italiano Parmalat, actual propietario de la empresa espa?ola que supuso un fraude de unos 14.000 millones de euros. Pero, tanto en los peores momentos de la crisis como en la actualidad, los responsables de la firma italiana consideraron siempre la filial espa?ola como una sociedad estrat¨¦gica en el grupo y, en consecuencia, ajena a los procesos de liquidaci¨®n de sociedades para hacer caja y hacer frente a las deudas.

Durante estos dos a?os, oficialmente el grupo l¨¢cteo no ha estado nunca en venta, aunque han sido varias las entidades financieras que han hecho ofertas de venta a otras empresas en el mismos sector de la leche. A pesar de la crisis de la sociedad matriz, Clesa ha seguido funcionando en el sector de la leche con normalidad tras superar inicialmente los problemas de desconfianza de los proveedores, desde los ganaderos hasta las empresas de servicios. El grupo cuenta con una treintena de ense?as con plantas industriales en Madrid, Burgos, Le¨®n, Pontevedra, Zaragoza, Barcelona y Alicante en el sector de la leche y derivados, a las que se suma la explotaci¨®n ganadera en B¨¢scones del Agua cerca de Lerma en Burgos y la f¨¢brica de Legan¨¦s en Madrid, propiedad de la antigua Helados Royne. Algunas de estas plantas, hoy en el centro de ciudades, constituyen uno de los mayores activos del grupo.

Baja productividad

Desde 2003, la firma espa?ola ha sufrido un ligero retroceso en las ventas, pasando de 242 a 230 millones de euros, con resultados negativos no de explotaci¨®n sino por pagos fiscales. Como el resto del sector, Clesa ha sufrido los problemas derivados del encarecimiento de las materias primas en origen frente a los precios m¨¢s bajos en otros pa¨ªses de la UE y, sobre todo, el aumento de los productos de marca blanca o de la distribuci¨®n. Ello ha supuesto dejar la participaci¨®n del grupo en el conjunto del sector de la leche en el entorno del 2%.

Con una facturaci¨®n de 230 millones de euros y una plantilla media de 1.300 personas, el principal problema del grupo se hallar¨ªa en la productividad por empleado que se halla entre las m¨¢s bajas del sector. En el caso de la planta de Madrid instalada en los terrenos que se acaban de vender, la mayor dificultad estar¨ªa en la existencia de una plantilla de unas 500 personas con edades elevadas, lo que supone un coste a?adido para acometer cualquier proceso de reestructuraci¨®n.

Oficialmente, la venta de los terrenos donde se ubica la actual planta de Clesa en Madrid contempla el compromiso de sus responsables para levantar una nueva f¨¢brica en la misma comunidad aut¨®noma en alguna de las ciudades del cintur¨®n industrial, como Getafe, para continuar la fabricaci¨®n de los productos que actualmente se elaboran en la planta actual como yogures, leche est¨¦ril, batidos o postres. Sin embargo, con 144 millones en caja, un sector con dificultades en aumento frente a la gran distribuci¨®n y otras f¨¢bricas en Espa?a para atender el mercado, en medios del sector se duda sobre la posibilidad de que la multinacional italiana vaya a realizar grandes inversiones en una nueva planta.