De la patria com¨²n a la vivienda digna

Unos, los m¨¢s, leyeron en voz alta el art¨ªculo 2, el que define a la "naci¨®n espa?ola" como "patria com¨²n e indivisible" de todos; otros fijaron su vista y su voz en el 14, que iguala a los espa?oles ante la ley y proh¨ªbe cualquier tipo de discriminaci¨®n. La "libertad de expresi¨®n", garantizada por el art¨ªculo 20, estuvo en boca de muchos (sobre todo en la de los periodistas), algo m¨¢s que el derecho a usar el castellano, "lengua oficial del Estado" (art¨ªculo 3), el derecho a la educaci¨®n y la "libertad de ense?anza" (27) e incluso, en la capital de la burbuja inmobiliaria, el derecho a "una vivienda digna" (47).

Pero todos, en realidad, leyeron lo mismo. Un total de 277 ciudadanos, repartidos casi al 50% entre personajes p¨²blicos y voces an¨®nimas, acudieron ayer a la Casa de la Villa convocados por el Ayuntamiento, que quiso festejar los 27 a?os de la Constituci¨®n con un acto singular: los madrile?os estaban llamados a presentarse en la casa de todos y leer "en alto" el art¨ªculo de la Carta Magna que m¨¢s les gustase. Gan¨® el 2 por goleada -uno de cada diez lectores eligi¨® ¨¦se entre los 169 art¨ªculos y 15 disposiciones de la Constituci¨®n-, aunque el canto a la igualdad entre personas de raza, sexo o religiones distintas -es decir, el art¨ªculo 14- no anduvo a la zaga.

El acto, organizado en el Patio de Cristales del Ayuntamiento, visti¨® un traje sencillo: el alcalde, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, dio la bienvenida, abri¨® el libro por la primera p¨¢gina y ley¨® el pre¨¢mbulo; despu¨¦s cedi¨® la palabra a los portavoces del PP, Manuel Cobo (promotor de la lectura colectiva, eligi¨® el art¨ªculo 14); del PSOE, Trinidad Jim¨¦nez (art¨ªculo 9.2, que aboga por la participaci¨®n de todos en la vida pol¨ªtica, econ¨®mica, cultural y social), e In¨¦s Saban¨¦s, de IU (el 16: el guardi¨¢n de la "libertad ideol¨®gica" y notario de que "ninguna confesi¨®n tendr¨¢ car¨¢cter estatal").

Durante tres horas y media, uno a uno fueron desfilando por el peque?o estrado el resto de los asistentes: famosos o ciudadanos de a pie, convertidos todos en voces an¨®nimas en el momento de ponerse ante el micr¨®fono, pues nadie fue presentado por su nombre. Y todos a¨²n embutidos en bufandas y gabardinas, reci¨¦n llegados de la fr¨ªa ma?ana madrile?a.

La presidenta regional, Esperanza Aguirre, y el ex presidente del Gobierno Leopoldo Calvo-Sotelo leyeron ambos el art¨ªculo 2. El cantante Miguel Bos¨¦ eligi¨® el 16; el d¨²o de humoristas Gomaespuma, el 10 y el 20; el director Santiago Segura -el ¨²nico VIP que se empe?¨® en guardar la cola con los ciudadanos sin apellido p¨²blico-, el 14, y Florentino P¨¦rez, presidente del Real Madrid y de la constructora ACS, se abraz¨® al 38, el que garantiza "la libertad de empresa en el marco de la econom¨ªa de mercado". La ministra de Educaci¨®n, Mar¨ªa Jes¨²s San Segundo, cerr¨® el acto con el art¨ªculo propio de su cargo, el 27.

Hubo pol¨ªticos, deportistas, presentadores y sindicalistas. Ciudadanos que repitieron -incluidas dos mujeres que recordaron que el art¨ªculo 102 regula la eventual "responsabilidad criminal" del presidente del Gobierno- y otros que pasaron veloces por el estrado. Todos se llevaron de regalo un ejemplar de la Constituci¨®n. Pero la emoci¨®n la puso el actor Tony Leblanc: avanz¨® a pasos cortos sus 83 a?os hasta la tarima, apoyado en el brazo del alcalde, dio con voz pausada los buenos d¨ªas y ley¨® el art¨ªculo 50, el que obliga a los poderes p¨²blicos a garantizar "la suficiencia econ¨®mica" de los ciudadanos "durante la tercera edad".

Ruiz-Gallard¨®n, que se ausent¨® durante media hora para asistir a los actos de la Comunidad, escuch¨® a casi todos, a ratos sentado, a ratos de pie, en un rinc¨®n de la sala. Al final, dio las gracias y los despidi¨®: "Hoy han sido ustedes m¨¢s ciudadanos, m¨¢s protagonistas".