El nuevo Rabanne

"Black, sexy and rock". Con las palabras del dress code de la black party organizada por la casa Paco Rabanne en el Olympia, el m¨ªtico teatro parisiense, podr¨ªamos bosquejar el retrato del hombre alto y sonriente que nos espera delante de un vodka con t¨®nica en el bar de su hotel poco antes de unirse a la fiesta. Un afroamericano de 38 a?os, con melena de le¨®n, cara juvenil y sonrisa perfecta, que viste chaqueta negra y una camiseta del mismo color generosamente abierta sobre el torso. Patrick Robinson es desde enero el todopoderoso director art¨ªstico de Paco Rabanne. Y para el toque rock, basta con escucharle hablar de su proyecto para la casa de costura; perd¨®n, para la marca y sus productos. "Esta marca tiene una historia prestigiosa, pero tiene que ir adelante. No podemos estar obsesionados con lo que se ha hecho en el pasado. Hay que preguntarse: ?qu¨¦ es lo que llevan las mujeres hoy d¨ªa?, y ?qu¨¦ llevar¨¢n ma?ana?".

?No hay nada recuperable de ese pasado?

El metal y, en general, la idea de usar materiales no tradicionales forman parte de la marca. Tambi¨¦n la provocaci¨®n. Lo que hac¨ªa Paco Rabanne en los a?os sesenta ya era una reflexi¨®n sobre el futuro. Quer¨ªa hacer la mujer m¨¢s sexy. Quiero conservar este esp¨ªritu, pero aplicarlo a nuestro siglo. Hoy d¨ªa, el futuro ya no es irse al espacio.

?Qu¨¦ opina Paco Rabanne -que cre¨® la marca en 1966 y la vendi¨® al Grupo Puig en 1987- de este cambio? Robinson asegura que su relaci¨®n es excelente. "No es de los que dicen: hice esto as¨ª hace cuarenta a?os y hay que seguir haci¨¦ndolo de esta manera. Adem¨¢s, ahora hace otras cosas: escribe libros, busca una nueva forma de sabidur¨ªa?".

?C¨®mo es la 'nueva' mujer Paco Rabanne?

La de siempre: sexy y provocativa. Pero no para los sesenta, sino para hoy y ma?ana.

?Tiene v¨ªa libre para desarrollar su trabajo?

Totalmente. Puedo hacer lo que quiera con esta marca, llevarla donde quiera.

A pesar de su aspecto juvenil, Robinson, casado con una periodista de la revista Vogue y padre de un ni?o de dos a?os, no es un principiante en el mundo de la moda. La relaci¨®n de este neoyorquino con el vestir comienza en? la playa. "Los surfistas son muy interesantes en su manera de vestir, sobre todo en los colores. Sin duda es una manera poco corriente de experimentar la moda para un dise?ador, pero ha sido la m¨ªa".

?Desde joven quiso dedicarse a la moda?

Descubr¨ª a Calvin Klein cuando ten¨ªa 14 a?os. Admiraba su moda y todo lo que hab¨ªa conseguido construir alrededor de sus productos, su trabajo con los medios de comunicaci¨®n y la publicidad. Sab¨ªa entonces que quer¨ªa desarrollar mi parte creativa, y el mundo de la moda me atra¨ªa. Es un sector en el que todo va muy r¨¢pido y hay que adaptarse siempre. Eso me gusta.

?Su familia le ha apoyado?

Mi padre era m¨¦dico. Yo pensaba que querr¨ªa que fuera m¨¦dico tambi¨¦n, as¨ª que me matricul¨¦ en la escuela de arte y en la facultad de medicina. Cuando supo que me cog¨ªan en las dos, me dijo: "Deber¨ªas elegir arte".

?Nada del discurso habitual sobre el riesgo y el peligro del trabajo art¨ªstico?

No. ?Me qued¨¦ alucinado!, pero lo entend¨ª. Cuando mi padre decidi¨® hacerse m¨¦dico, el objetivo todav¨ªa era ayudar a la gente. Hoy d¨ªa, en Estados Unidos los seguros importan m¨¢s que la salud de la gente.

Poco despu¨¦s de graduarse en la Parson School se traslad¨® a Mil¨¢n para trabajar con Giorgio Armani. Se qued¨® cinco a?os, antes de volver a EE UU para Anne Klein. "Una marca estadounidense muy cl¨¢sica. Creo que nunca consegu¨ª conectar con su esp¨ªritu. Ahora que lo pienso, ?fue una experiencia realmente horrible!". Decidi¨® entonces crear su propia marca. "Era genial, pero ha quebrado. Nunca conseguimos ganar dinero. Y cuando no hay dinero, no puedes permitirte cometer errores". El ¨¦xito lo conoci¨® despu¨¦s, en Perry Ellis, otra marca estadounidense donde antes que ¨¦l trabajaron dise?adores como Tom Ford o Marc Jacobs. Consigui¨® darle una nueva juventud. Una capacidad de modernizar que motiv¨® al Grupo Puig para contratarle para Paco Rabanne.

?Qu¨¦ ha aprendido de las casas donde ha trabajado?

En Armani, a hacer ropa; en Anne Klein, a trabajar con los medios de comunicaci¨®n; con mi propia compa?¨ªa, c¨®mo se construye una firma. En Perry Ellis tuve que hacer todo eso a la vez.

?Desear¨ªa volver a tener su propia marca?

Despu¨¦s de Perry Ellis he tenido tres propuestas para hacerlo. Pero lo que realmente quer¨ªa -y ahora lo tengo- era ser director art¨ªstico de una compa?¨ªa. ?Es el mejor sitio! En lo ¨²nico que debo concentrarme es en hacer buenos productos y asegurar el marketing de esos productos. El resto no me interesa.