Karadzic y Mladic, los grandes pr¨®fugos internacionales

La conmoci¨®n por el arresto del general croata Ante Gotovina, uno de los presuntos criminales de guerra m¨¢s buscados por el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), ha alcanzado a los otros dos pr¨®fugos se?eros de la justicia internacional: el l¨ªder pol¨ªtico serbobosnio Radovan Karadzic y su jefe militar, Ratko Mladic. Acusados ambos de genocidio por la matanza de casi 8.000 varones musulmanes en Srebrenica, en 1995, y por el sitio de Sarajevo, que cost¨® tambi¨¦n miles de muertos, su captura estar¨ªa m¨¢s cerca que nunca.

Eso parece deducirse, al menos, de las declaraciones efectuadas por Dragomir Andan, jefe de la polic¨ªa serbobosnia, quien asegur¨® ayer que se hab¨ªan hecho "grandes progresos en la b¨²squeda de Karadzic y Mladic". "Queremos acabar con un problema que pesa sobre la Rep¨²blica Srpska [entidad serbia de Bosnia] y la propia Serbia", a?adi¨®.

El peso al que se refer¨ªa Andan es el mismo al que ha aludido siempre Carla del Ponte, fiscal jefe del TPIY. Esto es, la imposibilidad de estrechar los lazos serbios con la UE y la OTAN mientras los acusados sigan en paradero desconocido. Arropados por sus fieles, su radio de acci¨®n puede ser cada vez m¨¢s peque?o.

Seg¨²n el brit¨¢nico David Leakey, comandante saliente de la fuerza internacional de pacificaci¨®n de la UE en Bosnia (Eufor), los dos fugitivos "no se arriesgar¨¢n a salir de Bosnia-Herzegovina". El problema es que hayan cruzado a territorio serbio o a Montenegro. All¨ª estar¨ªan fuera del alcance de Eufor y detenerlos ser¨ªa un asunto m¨¢s pol¨ªtico que militar.

Una d¨¦cada separados

Muy cercanos en los peores momentos de la guerra en la antigua Yugoslavia, Karadzic y Mladic llevar¨ªan casi una d¨¦cada separados. El primero, psiquiatra de profesi¨®n antes de autoproclamarse jefe de Estado de la Rep¨²blica Serbia Independiente en Bosnia (Srpska), huy¨® a las monta?as tras la firma del acuerdo de Dayton. En 1996, un a?o despu¨¦s de que dicho pacto pusiera fin a la guerra de Bosnia, calific¨® al TPIY de "corte pol¨ªtica creada para acusar a los serbios". Adem¨¢s de genocidio por la matanza de Srebrenica, se le acusa del sitio de Sarajevo y de haber utilizado a 284 cascos azules como escudos humanos en 1995. En octubre de 2004, y siempre oculto, consigui¨® publicar su libro Cr¨®nicas milagrosas de la noche. Trata de un hombre encarcelado por error en los a?os ochenta en Yugoslavia.

La escapada de Ratko Mladic es menos metaf¨®rica. Fue el brazo ejecutor de la muerte de ni?os y hombres musulmanes, entre 12 y 77 a?os, en Srebrenica. Gracias a la protecci¨®n de Milosevic, residi¨® en Belgrado despu¨¦s de la matanza. Y luego se escondi¨®. Hasta la fecha.