Llamazares trat¨® de lograr el s¨ª de IU

En los ¨²ltimos d¨ªas, a medida que se acercaba la votaci¨®n de la ley de educaci¨®n, la tensi¨®n ha ido creciendo en Izquierda Unida. Su l¨ªder, Gaspar Llamazares, y con ¨¦l un sector de la direcci¨®n, apostaban por apoyar la ley -como hizo el otro socio preferente del Gobierno, ERC- sobre todo porque esta reforma ha contado con una contribuci¨®n importante del grupo de Izquierda Verde (IU-ICV).

En diversas conversaciones, seg¨²n varios dirigentes presentes, Llamazares ha explicado que esta ley es mucho mejor que la Ley Org¨¢nica de Ordenaci¨®n General del Sistema Educativo (LOGSE), que IU apoy¨® en 1990, y sobre todo que votar s¨ª era la garant¨ªa para poder seguir negociando, incluso en el Senado, e influir en el resultado final de la reforma.

Sin embargo, los cr¨ªticos de IU, agrupados en torno al PCE y liderados por Felipe Alcaraz, ped¨ªan el no. Algunos dirigentes que apoyan al l¨ªder consideraban que se hab¨ªan hecho demasiadas concesiones a la Iglesia, y propon¨ªan la abstenci¨®n. Esta presi¨®n llevo a Llamazares a tirar la toalla. IU tiene tres diputados, y uno de ellos, ?ngel P¨¦rez, ya hab¨ªa anunciado que estaba dispuesto a romper la disciplina y abstenerse, como ped¨ªa las federaci¨®n de Madrid, que ¨¦l controla.

Ante las dificultades y la divisi¨®n, Llamazares opt¨® por el pragmatismo y finalmente apost¨®, como la mayor¨ªa, por una abstenci¨®n que supon¨ªa evitar un conflicto interno. El principal negociador socialista, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, realiz¨® diversas gestiones hasta ¨²ltima hora del mi¨¦rcoles para evitar esa abstenci¨®n de su socio preferente, pero ya era tarde.

Llamazares tiene la mayor¨ªa en Izquierda Unida -recientemente demostr¨® que cuenta con el 54% de la organizaci¨®n- pero la oposici¨®n se muestra muy beligerante con asuntos claves para las bases de IU, como este o la Ley de Defensa, que Llamazares decidi¨® apoyar con gran enfado de la oposici¨®n.