Un novio atrapado en la terminal

"Teresa, amor, me dicen que el avi¨®n se retrasa. Se rompi¨® y lo est¨¢n revisando. Creo que llegar¨¦ tarde. No, no, te prometo que no estoy de fiesta. Estoy en Madrid, todav¨ªa, en el aeropuerto". Rafael Villalba, un alba?il peruano de 50 a?os, ten¨ªa que haber llegado a Lima a las siete de la tarde del s¨¢bado 17, para casarse una hora despu¨¦s. Era el d¨ªa de su boda. Hab¨ªa comprado el billete en agosto, cuando consigui¨® ahorrar los 950 euros que le cost¨®, pero la fecha del enlace se la pusieron despu¨¦s, en el ¨²nico hueco que quedaba en la parroquia en todo diciembre.

"La iglesia est¨¢ a seis cuadras del aeropuerto. Cre¨ª que en los pa¨ªses desarrollados los vuelos eran puntuales", explicaba ayer Rafael con los ojos llorosos despu¨¦s de telefonear a su futura esposa. Como iba con el tiempo justo, decidi¨® hacer el viaje con el traje de novio puesto. Y vestido de novio durmi¨® el s¨¢bado en Barajas con otros 150 de los 320 pasajeros del vuelo NM-561 de Air Madrid. Entre sus compa?eros de penuria, otros tres ciudadanos peruanos que tambi¨¦n viajan a Lima para casarse esta semana.

A las ocho de la tarde Rafael deambulaba por la terminal 1 del aeropuerto arrastrando una peque?a maleta de mano y una bolsa de papel donde guarda un p¨®ster religioso con una imagen de Jes¨²s, que le acompa?¨® tambi¨¦n cuando lleg¨® a trabajar a Espa?a hace nueve meses. A¨²n vest¨ªa su traje gris y camisa blanca, impecable con una corbata nueva, una insignia chapada en oro en la solapa y sus zapatos relucientes.

Mientras ¨¦l estaba pendiente del panel de vuelos, rezando para que saliera el suyo, a su parroquia de Lima iban llegando los invitados. En Barajas sus colegas de vuelo, preocupados al ver languidecer a Rafael, decidieron comprar bebidas y montar una improvisada despedida de soltero. A esa hora, en Lima, 100 invitados, la novia y el cura esperaban. A las dos de la madrugada se dieron por vencidos.Al igual que Rafael Villalba, 320 pasajeros del vuelo NM-561 a Lima se quedaron ayer en tierra por segundo d¨ªa consecutivo. Air Madrid les ofreci¨® habitaciones en el hotel Auditorium mientras reparaba la aver¨ªa en el avi¨®n, seg¨²n informa Efe. M¨¢s de 100 viajeros aceptaron, pero otros 150 se quedaron en el aeropuerto para "presionar". La compa?¨ªa asegur¨® que les indemnizar¨¢ con 600 euros. Finalmente, sobre la una de la madrugada de hoy los pasajeros fueron embarcados para despegar.

Horas antes, decenas de viajeros se amontonaban en el mostrador de la compa?¨ªa. "Cada d¨ªa de retraso lo pierdo de estar con mi familia. ?Qui¨¦n me lo devuelve? ?D¨®nde consigo otro billete ahora?", preguntaba un pasajero. Otra explic¨® que su hijo hab¨ªa viajado desde Piura (a 1.000 kil¨®metros de Lima) hasta la capital de Per¨² para recogerla. "Pasar¨¢ dos d¨ªas esperando en el aeropuerto", se lamentaba la mujer.

Rafael no era el ¨²nico novio que viajaba a Lima para casarse. Al menos hay otros tres pasajeros que celebrar¨¢n su boda esta semana, si el vuelo llega a tiempo. Marco Antonio, que se casar¨¢ el jueves, tuvo que rogar a una espa?ola presente ayer en Barajas que hablara por tel¨¦fono con su novia Jessica y le explicara que las razones del retraso eran ciertas.

Otro de los viajeros, que durmi¨® en el aeropuerto y particip¨® en las protestas, es el embajador de Per¨² en Berl¨ªn, Carlos Higueras. Hizo escala en Madrid y se top¨® con la aver¨ªa. "Es inadmisible que esto pase en la Uni¨®n Europea. Deben desaparecer estas compa?¨ªas que no cumplen los requisitos m¨ªnimos", dijo indignado. El embajador de Per¨² en Madrid se reunir¨¢ hoy con los directivos de Air Europa para pedir que esta situaci¨®n no se repita.

Rafael Villalba habl¨® varias veces ayer con su novia Teresa, de 45 a?os. "Me dice que cuando est¨¦ en Lima la llame. Hasta entonces no quiere saber nada de m¨ª", explicaba con una sonrisa nerviosa. ?l conf¨ªa en que el amor sea m¨¢s fuerte que los imponderables a¨¦reos.