Huracanes: el clima enloquece
A finales de noviembre, Canarias tambi¨¦n fue v¨ªctima de la furia de la naturaleza. Los huracanes -habitualmente terribles, pero lejanos- han sido este a?o un fen¨®meno tan poderoso que su radio de acci¨®n nos ha tocado de cerca. Un a?o mucho m¨¢s negro que las peores previsiones. En mayo, el Centro de Predicci¨®n del Clima estadounidense pronosticaba "entre 12 y 15 tormentas tropicales [con nombre]", de las que entre siete y nueve llegar¨ªan a ser huracanes. La que asol¨® Canarias hac¨ªa la tormenta n¨²mero 25. El a?o pasado ya se consider¨® nefasto, as¨ª que nadie esperaba un 2005 peor. ?Qu¨¦ est¨¢ pasando? La pregunta aburre a los meteor¨®logos: "A¨²n no lo sabemos". ?Se trata de un fen¨®meno natural o es un efecto m¨¢s del calentamiento global? En este punto empiezan los matices y el debate cient¨ªfico.
Ya en 2001, los expertos advirtieron de que en 1995 hab¨ªa empezado un nuevo ciclo de alta intensidad de tormentas tropicales que podr¨ªa durar hasta cuatro d¨¦cadas.
Las tormentas tropicales est¨¢n directamente relacionadas con la temperatura de la superficie del oc¨¦ano. En un oc¨¦ano m¨¢s caliente, el agua se evapora m¨¢s, de forma que se generan miles de torbellinos de vapor que suben girando hacia la atm¨®sfera. Son embriones de hurac¨¢n. En determinadas condiciones, esos torbellinos crecer¨¢n y eventualmente se sumar¨¢n a otros, convirti¨¦ndose en gigantescas estructuras de aire y agua con m¨¢s energ¨ªa que todo el arsenal at¨®mico mundial. El ingrediente de partida, que es un oc¨¦ano caliente, se obtiene de la propia naturaleza, sin recurrir a la acci¨®n humana. Pero los expertos saben que la emisi¨®n de gases de efecto invernadero, como el di¨®xido de carbono, tambi¨¦n ha contribuido a que se caliente el mar en las ¨²ltimas d¨¦cadas. Los oc¨¦anos tropicales son medio grado m¨¢s c¨¢lidos ahora que en 1970, y la mayor¨ªa atribuye ese aumento a la acci¨®n humana.
La novedad es que por primera vez empiezan a aparecer trabajos que s¨ª encuentran una relaci¨®n entre el calentamiento artificial, causado por el hombre, y los huracanes. Kerry Emanuel, del Instituto Tecnol¨®gico de Massachusetts (EE UU), ha analizado la frecuencia de huracanes y tormentas tropicales en el Atl¨¢ntico desde 1970 y su poder devastador. Y ha descubierto que los huracanes se han vuelto mucho m¨¢s destructivos. Peter Webster, del Instituto Tecnol¨®gico de Georgia, ha encontrado algo parecido. Revisando los datos de sat¨¦lite de los ¨²ltimos 35 a?os no advierte un aumento en la frecuencia de huracanes, pero s¨ª en su intensidad. Globalmente hay un 57% m¨¢s tormentas tropicales de nivel 4 y 5 ahora que hace tres d¨¦cadas. Pero no todos aceptan los resultados de Emanuel y Webster. Y nadie, ni siquiera ellos, afirma que Katrina es el resultado del calentamiento global, inducido por el hombre. Pero son dos trabajos que empiezan a ver una relaci¨®n entre la acci¨®n humana y los huracanes. ?Qu¨¦ pasar¨¢ en el futuro? La mayor¨ªa de los modelos de simulaci¨®n del clima prev¨¦ m¨¢s huracanes por el cambio clim¨¢tico, pero los investigadores tampoco est¨¢n seguros: los modelos a¨²n no son tan detallados como para reproducir el proceso de formaci¨®n de los huracanes con fiabilidad.
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