Ley de Dependencia
Es decepcionante que los titulares tanto de la noticia de la aprobaci¨®n del anteproyecto de Ley de Dependencia por el Consejo de Ministros del 23 de diciembre como de la entrevista al ministro de Trabajo sean "400.000 personas recibir¨¢n ayuda por atender a familiares dependientes", de manera que el sujeto de este nuevo derecho "universal" no son las personas que no se valen para levantarse, comer o ir al retrete, sino sus hijas o familiares (en el 84% mujeres), a quienes se quiere perpetuar, eso s¨ª, con una "ayuda", en la situaci¨®n actual que el Imserso cuantifica en una dedicaci¨®n de 10,6 horas diarias durante ocho a?os, incompatible con su derecho a la salud f¨ªsica y ps¨ªquica, el empleo, el ocio y la vida personal. De manera que las cuidadoras familiares seguir¨¢n siendo en el a?o 2015, en n¨²mero "entre 300.000 y 400.000, el primer recurso de atenci¨®n a la dependencia, seguidas por 275.000 plazas de residencia asistida y 104.000 plazas en centros de d¨ªa".
Y es preocupante que el ministro de Trabajo, de quien dependen tanto las pol¨ªticas de protecci¨®n social como las de empleo y de igualdad entre hombres y mujeres, diga que a esas cuidadoras familiares, que no recibir¨¢n un salario, sino una ayuda econ¨®mica, se las computar¨¢ como ocupadas. Porque, seg¨²n el art¨ªculo 35 de la Constituci¨®n, a lo que tenemos derecho, "sin que en ning¨²n caso pueda hacerse discriminaci¨®n por raz¨®n de sexo", es "al trabajo, a la libre elecci¨®n de profesi¨®n u oficio, a la promoci¨®n a trav¨¦s del trabajo y a una remuneraci¨®n suficiente para satisfacer nuestras necesidades".
Un total de 47 organizaciones de mujeres denunciamos hace un a?o la insostenibilidad de la situaci¨®n de m¨¢s de un mill¨®n de cuidadoras familiares, cuyas vidas no pueden ser el precio de la vida de otros, y la urgencia de que un sistema p¨²blico de Atenci¨®n a la Dependencia repartiera socialmente esta tarea, con la cobertura universal de la ayuda a domicilio, centros de d¨ªa o residencias asistidas, no con "ayudas" a las m¨¢s sacrificadas de las familias para que se sigan sacrificando.
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