Emotiva y multitudinaria despedida en Barcelona a Joan Hern¨¢ndez Pijuan

El tanatorio de Les Corts, en Barcelona, se qued¨® ayer peque?o para acoger a la multitud de amigos y familiares que se acercaron para despedir al pintor Joan Hern¨¢ndez Pijuan, quien falleci¨® el mi¨¦rcoles en su casa barcelonesa, a los 74 a?os. Fue una ceremonia laica, breve y muy emotiva. Posteriormente, sus restos fueron incinerados y ma?ana se enterrar¨¢n en los terrenos de una mas¨ªa que la familia tiene en la localidad leridana de Folquer.

Rostros desolados. La desaparici¨®n del pintor Joan Hern¨¢ndez Pijuan, tras una larga enfermedad que le mantuvo ingresado durante los ¨²ltimos meses en el hospital Vall d'Hebron, ha originado una gran conmoci¨®n en el mundo cultural catal¨¢n. El cari?o que le profesaban sus colegas qued¨® claro ayer en la ceremonia de despedida al artista, que se desarroll¨® en el tanatorio de Les Corts.

Entre otros muchos -el oratorio del recinto estaba abarrotado de amigos y familiares-, acudieron la consejera del Gobierno catal¨¢n, Caterina Mieras; el alcalde accidental de Barcelona, Xavier Casas; la esposa del presidente de la Generalitat, Diana Garrigosa; el presidente del grupo municipal de Converg¨¨ncia i Uni¨®, Xavier Trias; el cantautor Paco Ib¨¢?ez; los pintores Perejaume y Modest Cuixart; el dise?ador Enric Satu¨¦; el fil¨®sofo Xavier Rubert de Vent¨®s, y el arquitecto Oriol Bohigas.

Josep Maria Bricall, ex rector de la Universidad de Barcelona (UB), fue uno de los oradores encargados de glosar la figura de Hern¨¢ndez Pijuan, quien ejerci¨® de decano de la Facultad de Bellas Artes. Bricall subray¨® su generosidad, ampliamente demostrada cuando el artista aceptaba realizar de forma gratuita algunos encargos, como participar en la reforma del Aula Magna de la sede central de la UB, sita en la plaza de la Universitat. Bricall destac¨® adem¨¢s el rigor profesional y la elegancia de Hern¨¢ndez Pijuan que tanto admiraban los que trataban con ¨¦l.

La viuda del finado, Elvira Maluquer, y sus hijos fueron consolados por el nutrido grupo de amigos que asisti¨® al acto. En la entrada se repart¨ªan unas tarjetas con un dibujo del propio Hern¨¢ndez Pijuan, que reproduc¨ªa el campanario de una iglesia y la siguiente inscripci¨®n: Tornant a un lloc conegut. Sentint el paisatge. Su amor por el campo, tan presente en su obra, fue uno de los motivos recurrentes en las intervenciones de los oradores. Su cu?ado Joaquim Maluquer desvel¨® una de las facetas menos conocidas del artista, la familiar. "Junto a su inseparable esposa, mi hermana Elvira, form¨® una familia s¨®lida como una roca", afirm¨® orgulloso Joaquim Maluquer.

Uno de los discursos m¨¢s emotivos corri¨® a cargo de Mar¨ªa Corral, gran defensora del envite creativo de Hern¨¢ndez Pijuan. Fue ella quien le seleccion¨® para exhibir su obra en la pasada Bienal de Venecia, reconocimiento que se a?ad¨ªa a la gran retrospectiva que le dedic¨® en 1993 en el Museo Nacional de Arte Reina Sof¨ªa. "Hace ahora 30 a?os que empez¨® nuestra relaci¨®n. Fue en 1975 cuando entr¨¦ por primera vez en su estudio", inici¨® su parlamento Corral, quien apenas pod¨ªa reprimir las l¨¢grimas. "Creo que su obra es una de las pocas que podr¨ªan soportar la confrontaci¨®n con la de los grandes abstractos estadounidenses". Entre las aficiones que les un¨ªan, cit¨® la poes¨ªa, la narrativa y el cine. Parafraseando al propio homenajeado, Mar¨ªa Corral dijo que un cuadro no es ef¨ªmero gracias a su calidad y verdad, y remach¨®: "Joan era todo verdad".

La ceremonia acab¨® con palabras entrecortadas de agradecimiento por parte de uno de los hijos de Hern¨¢ndez Pijuan. Su pesar reflejaba el sentir general.