"La reducci¨®n principal de costes empieza en el dise?o"

Yamaha vive uno de sus momentos m¨¢s dulces desde que desembarc¨® en Espa?a en 1981 para salvar a Sanglas. El fabricante de motocicletas, el primero de capital japon¨¦s que entr¨® en la Pen¨ªnsula, celebra este a?o sus bodas de plata con la capacidad de su f¨¢brica de Palau-solit¨¤ i Plegamans (Barcelona) al m¨¢ximo -98.900 unidades fabricadas en 2005-, una nueva scooter en marcha y futuros nuevos modelos en cartera. Su presidente, Jorge Lasheras (Barcelona, 1943), el culpable de que la multinacional nipona apostara por Catalu?a, atribuye parte del ¨¦xito actual de Yamaha al cambio de licencia para conducir motocicletas de 125cc.

Pregunta. ?Qu¨¦ pesa m¨¢s en la buena marcha de Yamaha Espa?a, los triunfos de Valentino Rossi o el cambio en la licencia?

"La buena marcha del sector est¨¢ atrayendo a competencia nueva de Taiwan, Corea, China... No les temo, pero son muy respetables"

Respuesta. Ambos, pero lo m¨¢s medible es el cambio en la licencia. El tema de Rossi es muy dif¨ªcil cuantificarlo, pero tenemos conciencia y seguridad de que en la imagen de la compa?¨ªa ha influido much¨ªsimo.

P. ?Y las licencias?

R. Las matriculaciones de 125cc en 2005 se han multiplicado por cinco en relaci¨®n al ejercicio anterior, hasta superar las 105.500 unidades. Y eso se debe ¨²nicamente al cambio en la licencia. Es probable que nos situemos como tercer mercado de Europa por n¨²mero de unidades vendidas, por detr¨¢s de Italia y Francia. El sector se ha recuperado de la situaci¨®n un tanto mala que hab¨ªa vivido cuatro a?os atr¨¢s, cuando todos sufr¨ªamos por el encarecimiento del seguro.

P. ?Este cambio ha salvado el sector en Espa?a?

R. Salvar es quiz¨¢s muy fuerte, pero le ha dado ¨¢nimos, claro que s¨ª. Pero tambi¨¦n est¨¢ atrayendo a m¨¢s competencia, porque cuando el mercado aumenta y hay m¨¢s posibilidades de venta, hay m¨¢s competencia.

P. ?De d¨®nde?

R. De los que ya estamos, que trabajamos cada vez m¨¢s r¨¢pido en la aportaci¨®n de nuevos modelos, pero tambi¨¦n por la presencia de marcas nuevas que vienen de Taiwan, Corea, China...

P. ?Les teme?

R. No, pero hay que estar muy atentos. Hay productos procedentes del sureste asi¨¢tico de buena calidad, que se venden muy bien en Espa?a, que cumplen las normas... son una competencia muy respetable. Es ley de vida, intentaremos hacerlo mejor.

P. ?Sin el cambio en la licencia se hubiera asignado la fabricaci¨®n de la nueva scooter 125cc a Espa?a?

R. Nosotros planificamos los modelos con tres a?os de antelaci¨®n desde Amsterdam, nuestra sede europea, con ingenieros japoneses, espa?oles, italianos, franceses... Pero en este caso las posibilidades de venta en el mercado espa?ol han pesado mucho.

P. ?De qu¨¦ depende que un modelo se asigne a una planta u otra?

R. Hoy no tanto de los costes como de la capacidad de desarrollo y de producci¨®n. Nosotros acabamos de llegar a la capacidad m¨¢xima de producci¨®n. No nos estamos planteando llevar a cabo una ampliaci¨®n, aunque puede ocurrir en el futuro. Si la f¨¢brica va bien, empiezas a tener todos los n¨²meros. Creo que en estos momentos Yamaha Motor Espa?a pasa por un momento interesante.

P. ?El mejor de su historia en Espa?a?

R. Dir¨ªa que s¨ª.

P. El plan estrat¨¦gico 2005-2007 se fija reducir los costes un 30%. ?C¨®mo piensa conseguirlo?

R. No recaer¨¢ ¨²nicamente sobre las espaldas de la f¨¢brica ni de los proveedores. Se basa en una combinaci¨®n de dos grandes factores. Empezando por el dise?o: dise?ando veh¨ªculos con menos componentes y trabajando codo con codo con los proveedores, que son los que m¨¢s saben. El dise?o es la etapa fundamental de la reducci¨®n de costes, si somos capaces de reducirlos ah¨ª, lo dem¨¢s resulta mucho m¨¢s f¨¢cil. En segundo lugar, los costes de distribuci¨®n, log¨ªstica, marketing... Nuestro grupo, por ejemplo, est¨¢ implementando la reducci¨®n dr¨¢stica de almacenes de producto acabado en Europa, al pasar de m¨¢s de veinte a s¨®lo cuatro: Hamburgo, Mil¨¢n, Lille y Rub¨ª$*$CF$* ~~~~~~~~~~~~~~