Pern¨ªa, lanzador de "piedras"

Por muy espa?ol que se sienta, por muchas ganas que tenga de jugar con la selecci¨®n, por muchas posibilidades que tenga de amargar el Mundial a Capdevila, Del Horno o Antonio L¨®pez, Mariano Andr¨¦s Pern¨ªa (Buenos Aires, 1977) nunca renunciar¨¢ a su bebida favorita: el mate. "Lo llevamos a todas partes", r¨ªe el lateral izquierdo del Getafe. A la espera de que le llamen para jurar la Constituci¨®n, sus seis goles, cuatro de libre directo -el del domingo, ante el Espanyol, cubri¨® 35 metros a 140 kil¨®metros por hora-, atestiguan que Pern¨ªa es el carrilero m¨¢s en forma. Ni siquiera Roberto Carlos, descontando la Copa y la Champions, ha pasado de cinco dianas por curso desde su llegada a la Liga. "Que se solucionen los papeles cuanto antes. Si por m¨ª fuera, firmaba ya", ruega.

"Ojal¨¢", desea en un murmullo Olga Susana, su madre, desde su domicilio en Tandil, en la provincia de Buenos Aires. "Si le vi¨¦semos en el Mundial...", prosigue su padre, Vicente Alberto, El Tano, mito xeneize, leyenda de Boca Juniors, campe¨®n de dos Copas Libertadores y una Intercontinental. Don Vicente hace patria. "Se siente espa?ol. All¨¢ le naci¨® la hija. Sus ancestros eran de Almer¨ªa", asiente.

El mismo discurso practica ?ngel Torres. El presidente del club madrile?o, que el s¨¢bado negociar¨¢ la marcha del jugador al Valencia, "sabe del inter¨¦s" de Luis Aragon¨¦s.Porque, de un tiempo a esta parte, no es raro ver al seleccionador en el palco del Getafe. "?Si no tiene zurdos!", exclaman en el Colis¨¦um. El m¨¢s relevante es Del Horno, en el Chelsea -diez veces internacional: dos goles-, seguido de Antonio L¨®pez, en el Atl¨¦tico -siete: un gol- y de Capdevila -cinco-, en el Deportivo. Entre los tres suman cuatro goles esta campa?a.

Mientras tanto, Pern¨ªa prosigue su rutina y ensaya tiros libres "con barrera y m¨¢s cerca de la porter¨ªa que el gol a Iraizoz"; compartiendo bromas y piques con Redondo, Paredes y Paunovic. "Su pegada es innata, pero la fortaleci¨®", refiere don Vicente, que ya "hablaba" con ¨¦l, cuando despuntaba en Independiente, "de lo parecido que era a Roberto Carlos...": "?C¨®mo saca la pelota! ?C¨®mo la para! ?C¨®mo la pega!". Durante a?os, para entrenarse cuando era cadete, se levantaba a las 5.30. "Se ha sacrificado", concluye su progenitor.

"?Qu¨¦ va a decir mi pap¨¢?", responde el aludido. Tampoco se quedan cortos los piropos de sus compa?eros: "Honrado", "trabajador nato"... El t¨¦cnico, Bernd Schuster, es, como siempre, el m¨¢s contundente: "Aparte de las piedras que lanza, ya ha hecho m¨¦ritos para jugar con Espa?a".