Prioridad judicial
La Sala Segunda del Tribunal Supremo tendr¨¢ que dar preferencia absoluta a los recursos de casaci¨®n de los condenados en septiembre pasado por constituir una c¨¦lula de Al Qaeda en Espa?a, si quiere evitar la puesta en libertad anticipada de varios de ellos -por cumplimiento del tiempo m¨¢ximo de prisi¨®n preventiva- y no correr el riesgo, nunca descartable, de una posible fuga y su posterior reinserci¨®n en el entramado terrorista.
Ser¨ªa inaceptable, adem¨¢s de un esc¨¢ndalo may¨²sculo, que se repitiera el caso de Alekema Lamari, uno de los suicidas del 3 de abril de 2004 en Legan¨¦s. Lamari fue condenado por la Audiencia Nacional en junio de 2001 por terrorismo y excarcelado en 2002 tras cumplir el m¨¢ximo de cinco a?os de prisi¨®n preventiva, mientras el Supremo resolv¨ªa el recurso de casaci¨®n contra su condena, que fue confirmada. Lamari no s¨®lo dej¨® de cumplir varios a?os de condena, sino que pas¨® a engrosar el n¨²cleo terrorista que preparaba los atentados del 11-M, de los que fue uno de sus m¨¢ximos responsables.
El tiempo juega en contra del Supremo, pues la combinaci¨®n de los cuatro a?os pasados en prisi¨®n mientras se instru¨ªa el sumario y la pena media impuesta por la Audiencia Nacional -entre seis y nueve a?os- sit¨²a a una buena parte de los condenados al borde de cumplir el m¨¢ximo de prisi¨®n preventiva que les corresponde. De hecho, dos ya han sido puestos en libertad antes de que el Supremo se pronuncie y otros dos, uno de ellos due?o de la casa de Chinch¨®n utilizada para preparar la matanza del 11-M, lo ser¨¢n el mes pr¨®ximo. El Supremo ha reducido a una media de ocho meses el plazo para resolver los recursos de causas con presos preventivos, pero en este caso ese periodo resulta excesivo. El fanatismo ideol¨®gico y la entrega militante de los grupos terroristas islamistas exigen que la justicia impida situaciones que, una vez producidas, no tienen remedio. La tramitaci¨®n del recurso de casaci¨®n de los miembros de Al Qaeda en Espa?a debe tener urgencia absoluta en la agenda del Supremo.
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