Vecinos de Zaragoza ponen sitio al ruido de la 'movida'

El Tribunal Superior de Justicia de Arag¨®n (TSJA) ha condenado al Ayuntamiento de Zaragoza a indemnizar con 24.000 euros a una vecina de Zaragoza porque considera que el consistorio no ha actuado ni tomado medidas para evitar las molestias de dos bares situados bajo su casa. En el a?o 2.001 falleci¨® Seraf¨ªn Tabernero, debido a un infarto. Su viuda, M. J. G., relacion¨® la muerte con las continuas molestias ocasionadas por un bar y una hamburgueser¨ªa. La sentencia reconoce las afecciones que sobre la salud puede tener el ruido ambiental. Aunque la demandante esgrimi¨® que la muerte de su marido se debi¨® al agotamiento provocado por las molestias que padecieron, el tribunal desestima la relaci¨®n causa-efecto de la muerte por infarto de su marido, pero s¨ª reconoce las afecciones en su salud que pudo provocar la tensi¨®n acumulada por las 26 denuncias que tuvo que formular. La sentencia es firme.

La demandante no quiere hablar ni que se publique su identidad, pero s¨ª lo hacen representantes de otros 55 vecinos de la zona que conf¨ªan en que el proceso que ellos han planteado ante los tribunales tenga el mismo desenlace, obligando a la Administraci¨®n a indemnizarles y, sobre todo, a terminar con su pesadilla.

Eulalio Cantarero tiene 74 a?os y lleva desde los 27 viviendo en la zona conocida como El Rollo o Moncasi, donde hasta 62 discobares se alinean pegados unos a otros en una porci¨®n del centro de Zaragoza que sus habitantes no dudan en calificar como "la m¨¢s peligrosa de Europa". En esa zona se re¨²nen cientos de j¨®venes los fines de semana e invaden las calles. Elulalio ha tenido que insonorizar su casa. "Bailo el chun, chun todos los fines de semana y s¨®lo logr¨¦ en todos estos a?os, que son muchos, que el bar cerrase tres meses", denuncia.

La zona m¨¢s peligrosa

Lo de que Moncasi es la zona de bares m¨¢s peligrosa de Europa lo dice Ignacio S¨¢enz de Cosculluela, presidente de la Asociaci¨®n de Vecinos La Huerva, que lleva batallando desde hace 15 a?os para que se cumpla la ley. Esta asociaci¨®n fue la plataforma para interponer la denuncia, hoy ganada, y la misma que ha interpuesto la demanda de los 55 vecinos. "En nueve a?os tuvimos siete asesinatos. Ahora sigue el descontrol, la suciedad, el ruido insoportable", dice S¨¢enz, que preside la Plataforma Estatal de Asociaciones Contra el Ruido y las Actividades Molestas (PEACRAM). Sostiene que esa zona "esta alentada por el ¨¢rea de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza. Por eso, en nuestra siguiente denuncia adjuntaremos nombres de funcionarios que prevarican". "Pensamos demandar a los alcaldes que lo han sido desde que se puso en marcha esta zona de bares a partir de finales de los a?os 70", a?ade

Los dos locales, Capit¨¢n Trueno y Hamburguesas, desencadenantes de la denuncia, no tendr¨¢n que pagar nada. "Ellos se aprovechan de la dejaci¨®n del Ayuntamiento". La demanda se interpuso en el a?o 2003. El abogado Jos¨¦ Luis Maz¨®n Costa trabaja desde hace a?os con vecinos que luchan contra el ruido utilizando argumentos como que los inquilinos sufren "da?o moral continuado" y est¨¢n privados del uso normal de su vivienda.

Lourdes Gil lo sabe. En su calle hay quien ha tenido que poner dobles puertas en portales y rellanos para evitar que la gente se cuele en casa "a beber, hacer el amor y dejar portal y escalera perdidos". La mayor pesadilla de Lourdes fue cuando sus dos hijos eran beb¨¦s. "Era verano, no pod¨ªamos abrir las ventanas, eran muy peque?os para poner un ventilador y se dorm¨ªan agotados de llorar en mis brazos o en los de su padre mientras les abanic¨¢bamos. En ese tiempo me cre¨ª capaz de cualquier barbaridad".

Lourdes describe una zona que conoce bien. "Hay gente mayor, muchas viudas con pensiones medias. Cuando iniciamos la batalla judicial se apuntaron muchos, pero luego el desembolsar dinero y el miedo les ech¨® para atr¨¢s. ?Denuncias? Yo he puesto m¨¢s de 20 al bar de debajo de casa", dice

Esa dejaci¨®n de funciones es lo que ha condenado el Tribunal Superior de Arag¨®n. Los dos establecimientos citados en la demanda abrieron en 1994. La sentencia recuerda las "innumerables" denuncias de los afectados y los expedientes que no tuvieron ning¨²n resultado. Aunque el TSJA reconoce que hubo una m¨ªnima actividad administrativa la considera "a todas luces insuficiente". El alcalde, Juan Alberto Belloch, no solo acata y comprende la sentencia, sino que la considera acorde a las nuevas l¨ªneas que marcan los tribunales.

Pero pocos vecinos muestran esperanza de que se act¨²e en consecuencia. "Estamos hartos de denunciar, todas las noches, todos los fines de semana", cuenta Andr¨¦s Pe?a. Lleva siete a?os viviendo sobre los dos establecimientos protagonistas de la sentencia. "Cuando yo llegu¨¦ hab¨ªa un cierto control, ahora nada. Llamo y llamo, y nada. Con el nuevo horario resulta que a este bar le han ampliado una hora el cierre para sacar a la gente y cargar c¨¢maras. Pero no es as¨ª, es para que entre m¨¢s gente. Env¨ªo correos al Ayuntamiento, a la Diputaci¨®n General de Arag¨®n y nada", lamenta.