Tres hombres armados atracan un piso de Sevilla y amordazan a la empleada

Tres individuos armados con una escopeta y encapuchados, lograron ayer huir de un bloque de viviendas de Sevilla, el n¨²mero 6 de la calle G¨¦nova en el barrio de Triana, cerca de la Plaza de Cuba, despu¨¦s de amordazar y atar a la empleada de hogar y robar una caja fuerte con dinero y joyas.

Los atracadores se llevaron la caja fuerte del piso de Jos¨¦ Miguel Ma?as Fr¨ªas y golpearon y maniataron con cinta adhesiva a la empleada de hogar que fue rescatada casi a las dos horas por la agentes.

Durante ese tiempo, los Grupos de Operaciones Especiales (Goes) tomaron posiciones en el edificio, trataron de escuchar y ver lo que pasaba dentro y finalmente comprobando que era imposible abrir la puerta con una llave que les hab¨ªa facilitado el due?o, la forzaron. Cuando entraron, en el piso s¨®lo estaba la mujer. Despu¨¦s registraron minuciosamente el inmueble en cuesti¨®n y tambi¨¦n los aleda?os. Fue en vano. Los tres, que ten¨ªan acento andaluz seg¨²n la polic¨ªa, hab¨ªan escapado. La mujer tuvo que ser atendida en el hospital Virgen del Roc¨ªo ante el estado de nervios que presentaba.

"La polic¨ªa cre¨ªa que estaban dentro y no estaban. Estuvimos hora y media en la puerta hasta que la hemos roto y cuando entramos estaba Dolores maniatada. Los t¨ªos se habr¨ªan ido una o dos horas antes", manifest¨® Ma?as una vez que hubo pasado todo. La polic¨ªa piensa que abandonaron el edificio por el garaje que tiene salida a la calle Rosario Vega antes de que llegaran las dotaciones policiales.

Dolores, una se?ora de algo m¨¢s de 50 a?os, estaba en la cocina con las manos atadas en la espalda y la boca tapada cuando la rescataron los ejectivos de los Goes. Los armarios de la casa estaban revueltos y faltaba la caja fuerte que hab¨ªa en un armario. Al cierre de esta edici¨®n la polic¨ªa todav¨ªa no sab¨ªa si se hab¨ªan llevado alg¨²n arma porque su propietario practica el tiro ol¨ªmpico y las guardaba en el piso. En principio parece que el bot¨ªn del robo fueron joyas y algo de dinero.

El grupo de atracos estuvo tomando declaraciones, buscando huellas y haciendo una reconstrucci¨®n de los hechos hasta bien entrada la noche. Pero hasta hoy no podr¨¢ escuchar a la principal testigo, la empleada de hogar que contin¨²a en el hospital.

Un vecino cont¨® que los atracadores se colaron en el bloque porque el portero "dej¨® abierto el portal mientras tomaba algo en el bar de enfrente". La mujer les abri¨® minutos despu¨¦s la puerta del piso porque esperaba a una vecina de arriba que sol¨ªa visitarla. Precisamente fue esta persona la que avis¨® a la polic¨ªa, ya que cuando se dispon¨ªa a cumplimentar esa visita vio a los encapuchados accediendo a la vivienda.

La mujer avis¨® al 091 despu¨¦s de haber tratado de llamar desde su balc¨®n a un coche de polic¨ªa que circulaba por la misma calle G¨¦nova. Eran casi las 12.30 horas.

Hasta las tres de la tarde la polic¨ªa tuvo acordonada la calle G¨¦nova donde se dispusieron coches de bomberos y ambulancias, por si se requer¨ªa su intervenci¨®n. Decenas de curiosos se agolparon alrededor del dispositivo tratando de saber lo que pasaba y explicando qui¨¦nes pod¨ªan ser las v¨ªctimas de los atracadores. S¨®lo cuando la polic¨ªa tuvo la certeza absoluta de que los tres hab¨ªan escapado levantaron el dispositivo y dejaron acceder a sus casas a los propietarios. Los que se encontraban en el inmueble mientras estuvo tomado por la polic¨ªa se vieron obligados a permanecer encerrados en las viviendas para evitar cualquier incidente durante la intervenci¨®n policial.