Elecciones en la Universitat de Val¨¨ncia
La Universitat de Val¨¨ncia fue la primera de Espa?a en elegir rector por el nuevo sistema de la LOU (sufragio directo ponderado). El pr¨®ximo 1 de marzo repite cita en las urnas. La llegada de Francisco Tom¨¢s al rectorado sigui¨® en pocos meses al relevo de Zaplana por Camps al frente de la Generalitat. Estos ¨²ltimos tres a?os se han beneficiado de una relaci¨®n entre ambas instituciones m¨¢s natural y fluida, aunque no haya estado exenta de conflictos. El rector elegido es hombre de talante sencillo y accesible y le ha resultado m¨¢s cercano a la comunidad universitaria.
El candidato perdedor de las pasadas elecciones, Josep Llu¨ªs Barona, junto con algunos colaboradores, ha estado presente en el Claustro y en el Consejo de Gobierno de la Universitat, aportando una tensi¨®n cr¨ªtica constructiva y una exigencia imprescindibles en el gobierno universitario. El candidato ganador se present¨® con el lema de "Una universitat de qualitat per a tothom". Actualmente no abundan los medidores extrauniversitarios de calidad, pero s¨ª puede concluirse que se ha avanzado un poco. La investigaci¨®n ha seguido mejorando. Durante estos tres a?os la universidad ha renovado gran parte de su reglamentaci¨®n interna, a partir del obligatorio efecto domin¨® de la LOU. Los nuevos Estatutos (de septiembre de 2004) son aceptables, aunque a¨²n se ande en los tribunales por discrepancias entre la Generalitat y la universidad. Su aplicaci¨®n ha motivado la renovaci¨®n de muchos ¨®rganos. Ahora planea en el ambiente que la anunciada reforma PSOE de la LOU pueda alterar lo ya realizado, obligando a desandar parte de lo andado y a repetir procesos. El otro gran reto de estos a?os ha sido la paulatina puesta en marcha de la convergencia universitaria europea (Espacio europeo de educaci¨®n superior). Supone muchas reformas y no todas son indoloras. La renovaci¨®n pedag¨®gica prevista exige una gran implicaci¨®n del profesorado, que, sin embargo, mayoritariamente mira con frialdad el plan. La Conseller¨ªa y el Ministerio del ramo, en ¨¦ste como en otros asuntos, est¨¢n siendo lentos y causando notables perjuicios.
El rector form¨® un equipo rectoral muy amplio. Sus resultados han sido muy desiguales. Algunos vicerrectores se van casi v¨ªrgenes o desconocidos para los universitarios; las ¨¢reas tradicionales de m¨¢s peso (estudios y profesorado) han conocido movimiento y actividad, aunque no haya llovido a gusto de todos. El rector ha sido m¨¢s que nada un mediador y un componedor de las distintas inquietudes y grupos de intereses. No se ha visto aplicado un verdadero proyecto o programa de gobierno. S¨ªntom¨¢ticamente el anunciado plan estrat¨¦gico para los pr¨®ximos a?os (inicialmente una buena idea del programa Barona) no ha llegado a ver la luz.
Francisco Tom¨¢s se presenta como ¨²nico candidato a las pr¨®ximas elecciones. Esta soledad le ha permitido renovar con libertad su equipo, pero es un factor francamente negativo para la Universitat de Val¨¨ncia, que habla a las claras de los tiempos grises que vive la democracia universitaria. Los sin duda existentes aspirantes a rector, han preferido -como ya hiciera, en los ¨²ltimos tiempos, el propio Tom¨¢s- esperar c¨®modamente a que este rector agote un segundo mandato, que es el tope autorregulado por la universidad, para acudir a recoger el fruto con una competencia m¨¢s d¨¦bil. Aunque no se puede negar que Tom¨¢s ha ido copando todos los huecos que ha podido.
En este contexto, la participaci¨®n en las pr¨®ximas elecciones previsiblemente descender¨¢ bastante y dar¨¢ bazas a los enemigos de un sistema electoral que fue una de las mejores novedades de la LOU. La participaci¨®n universitaria -y con ella el ejercicio responsable de la propia autonom¨ªa- vive horas bajas. En las recientes elecciones al Claustro -un ¨®rgano que arrastra una larga decadencia- se han quedado puestos por cubrir a falta de candidatos. Hay facultades en las que la elecci¨®n a decano, en ausencia de una verdadera competencia democr¨¢tica, se ha convertido en un rito hereditario. Recuperar el pulso, motivar a los profesores, servir mejor a los estudiantes, ser m¨¢s eficientes: ¨¦stos son s¨®lo algunos de los pr¨®ximos retos para el futuro (y ya actual) rector.
Juan Carlos de Miguel es profesor de la Universitat de Val¨¨ncia.
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