Una organizaci¨®n con problemas desde 2000

Javier Arenas no logra dar con la tecla adecuada en C¨®rdoba. Desde el a?o 2000, esta provincia se ha convertido en un quebradero de cabeza para el l¨ªder del PP. Su ¨²ltima decisi¨®n ha sido relevar a Mar¨ªa Jes¨²s Botella, cu?ada del ex presidente del Gobierno Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, de la presidencia del PP cordob¨¦s y dar la alternativa a Jos¨¦ Antonio Nieto, un pol¨ªtico de 36 a?os que se est¨¢ forjando en la pol¨ªtica municipal y que conoce bien las entra?as de su partido.

Para llegar a Nieto han ca¨ªdo en el camino dos presidentes en estos seis a?os. Primero fue Enrique Bellido, quien sali¨® de forma traum¨¢tica. Y segundo, ahora, Mar¨ªa Jes¨²s Botella, cuya salida ha sido mucho m¨¢s pac¨ªfica.

Bellido gan¨® en septiembre de 2000 el congreso del PP de C¨®rdoba contra pron¨®stico. La candidatura oficialista la encabezaba el diputado auton¨®mico Salvador Fuentes, pero Bellido se impuso gracias al voto de los compromisarios de los municipios rurales. Poco antes del congreso, Arenas medi¨® para que ambos renunciasen a sus candidaturas y situar ya a Mar¨ªa Jes¨²s Botella como presidenta, pero esta iniciativa fracas¨®.

Bellido pas¨® a ser una piedra en el zapato de Arenas, entonces secretario general del PP, y de la direcci¨®n regional que entonces lideraba Te¨®fila Mart¨ªnez. Los opositores a Bellido se nuclearon en torno al ex eurodiputado Juan Ojeda y al ex alcalde de C¨®rdoba Rafael Merino, bien relacionados con Arenas. La fractura interna se agigant¨® hasta tal punto que en mayo de 2002 la direcci¨®n regional disolvi¨® la ejecutiva de C¨®rdoba y nombr¨® una gestora.

Bellido fund¨® entonces el llamado Foro de los Catetos, en referencia al origen de los votos que le llevaron a la presidencia del PP de C¨®rdoba, y que fue el detonante definitivo de su expulsi¨®n.

Ya sin Bellido, Arenas situ¨® a Mar¨ªa Jes¨²s Botella en la presidencia del PP de C¨®rdoba (diciembre de 2002). Botella fue elegida con el 80% de los votos de los compromisarios, porcentaje exiguo para lo que se estila en los congresos del PP, en los que suele haber un solo candidato y bajar del 90% se interpreta como un voto de castigo.

Dos a?os despu¨¦s, en diciembre de 2004, Botella concurri¨® de nuevo como ¨²nica aspirante a la presidencia del PP cordob¨¦s y obtuvo un resultado peor, el 78% de los votos, muy por debajo del resto de presidentes provinciales.

La debilidad del PP en C¨®rdoba (tiene siete alcald¨ªas de municipios de la sierra) y la ausencia de un liderazgo claro han ido convenciendo a la direcci¨®n regional de la necesidad de hacer cambios de nuevo. Unos cambios que ahora se llevan por delante a Mar¨ªa Jes¨²s Botella.