EE UU se debate entre dos Libertades
Sorpresa: por una vez, las ense?as pisoteadas y envueltas en llamas no eran las de las barras y las estrellas. A los pocos d¨ªas de escalada en la crisis, la iconograf¨ªa se normaliz¨®; la bandera danesa se vio acompa?ada por la israel¨ª y la estadounidense, y la protesta ante embajadas europeas en Damasco y Beirut se repiti¨® en las bases americanas en Afganist¨¢n.
Adem¨¢s de esta inusual situaci¨®n, la crisis de las vi?etas tiene un perfil particular en Estados Unidos. El derecho a la libertad de expresi¨®n es sagrado, pero tambi¨¦n lo es la manifestaci¨®n de una creencia religiosa: ambos conceptos conviven en la enmienda constitucional m¨¢s citada del mundo, la primera: "El Congreso no legislar¨¢ respecto al establecimiento de una religi¨®n o a la prohibici¨®n del libre ejercicio de la misma, ni impondr¨¢ obst¨¢culos a la libertad de expresi¨®n o de la prensa...".
"Publicar cosas pol¨¦micas es lo que hacemos los peri¨®dicos; no es s¨®lo nuestra profesi¨®n, es nuestra obligaci¨®n", dijo la directora del 'Inquirer'
'The Washington Post' critic¨® a los medios europeos que publicaron los dibujos, pero celebr¨® como h¨¦roes a los jordanos que lo hicieron
La tensi¨®n entre libertad de prensa y respeto a las religiones ha determinado la posici¨®n del Gobierno y, sobre todo, la catarsis medi¨¢tica. Ante el rey de Jordania, George W. Bush rechaz¨® "la violencia como forma de expresar desacuerdo con lo que puede ser publicado en la prensa libre" y dijo que "con la libertad de prensa viene la responsabilidad de ser considerado hacia los otros". La secretaria de Estado, Condoleezza Rice, acus¨® a Siria e Ir¨¢n de "inflamar las pasiones" y sacar provecho de la crisis.
El debate est¨¢ en los medios: furiosamente a favor del Jyllands-Posten, claramente en contra o cautelosamente en medio: "Si se escucha con atenci¨®n, casi se puede o¨ªr a los periodistas discutiendo en todas las redacciones. Publicar o no publicar, ¨¦sa es la cuesti¨®n", escribe Fryda Ghitis en el MiamiHerald.com. La mayor¨ªa de los diarios -The New York Times, The Washington Post, Los Angeles Times- y televisiones -NBC, CBS y CNN- decidieron no reproducir las caricaturas. "Una opci¨®n que parece razonable para medios que no suelen atacar de manera gratuita los s¨ªmbolos religiosos, especialmente cuando es f¨¢cil describir las vi?etas con palabras", editorializ¨® The New York Times. The Washington Post critic¨® a los diarios europeos que reprodujeron las caricaturas, pero celebr¨® como h¨¦roes a los periodistas jordanos que publicaron los dibujos.
Informaciones pol¨¦micas
La ABC, la Fox, The New York Sun y The Philadelphia Inquirer s¨ª los mostraron. "Publicar cosas pol¨¦micas es lo que hacemos los peri¨®dicos; no es s¨®lo nuestra profesi¨®n, es nuestra obligaci¨®n", explic¨® la directora del Inquirer, Amanda Bennett, a los que se manifestaron ante el diario. Decenas de periodistas respaldaron la consigna "Todos somos daneses", como titul¨® su columna Jeff Jacoby en The Boston Globe. El diario on line de Boston The Phoenix dej¨® un hueco en blanco y explic¨® que no reproduc¨ªa all¨ª una vi?eta por tres razones: "Sobre todo, por miedo a las represalias de islamistas radicales; por respeto a millones de pac¨ªficos creyentes, y confiando en que esta moderaci¨®n practicada por los que creemos en la santidad de la libertad de expresi¨®n ayude a los creyentes a oponerse a las fuerzas de la oscuridad y del mal en el islamismo".
?Por qu¨¦ hay un doble rasero?, se preguntan los que recuerdan la controversia de 1989 por el Cristo del pis, una foto del artista Andr¨¦s Serrano que reproduc¨ªa un crucifijo flotando en orina y que desat¨® las protestas de grupos cristianos y de congresistas: la mayor¨ªa de los peri¨®dicos publicaron la foto. Quiz¨¢, apunta Anne Applebaum, que escribe en The Washington Post, "por la hipocres¨ªa de la izquierda cultural: 'Nos pone nerviosos ofender gratuitamente a los creyentes de pa¨ªses lejanos y subdesarrollados, pero nos da igual ofender gratuitamente a los creyentes de casa". Applebaum, que carga tambi¨¦n contra la "hipocres¨ªa de la blogosfera derechista" -"defendemos la libertad de expresi¨®n si supone el derecho a hacer caricaturas de Mahoma, pero no si se trata de que los medios investiguen al Gobierno"-, cree, con pesimismo, que algo sale de la crisis: "Esto deber¨ªa poner fin a una ingenua, encantadora y por desgracia equivocada teor¨ªa americana de relaciones internacionales seg¨²n la cual, 'cuanto m¨¢s aprendamos el uno del otro, menos pelearemos'. Poco a poco, el mundo isl¨¢mico est¨¢ aprendiendo que respetamos la religi¨®n de distinta manera que ellos. Lentamente estamos aprendiendo que ven de otra manera que nosotros la letra impresa y las im¨¢genes. De alguna forma tengo la impresi¨®n de que este nuevo conocimiento no va a ser el comienzo de la comprensi¨®n, sino la inspiraci¨®n de m¨¢s violencia".
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