Un comit¨¦ parlamentario de EE UU arremete contra Google, Yahoo y Microsoft por la censura en China
Sentados ante el comit¨¦ de Relaciones Internacionales de la C¨¢mara de Representantes, los responsables de compa?¨ªas de Internet que negocian con China recibieron un varapalo verbal por su disposici¨®n a aceptar la censura a cambio de la posibilidad de ganar dinero en ese suculento mercado asi¨¢tico. Los directivos de Google, Yahoo, Microsoft y Cisco Systems (que vende al Gobierno de China los ordenadores empleados en el ejercicio del control censor sobre Internet) fueron acusados de connivencia y de avaricia. El Congreso tramita ya una ley para poner fin a unas pr¨¢cticas que considera "aberrantes".
Aunque las cuatro empresas s¨®lo enviaron al Capitolio a directivos de escala media, los congresistas actuaron contra ellos con una dureza un¨¢nime: "No s¨¦ c¨®mo los directivos de sus empresas pueden dormir por las noches", dijo el dem¨®crata Tom Lantos. Despu¨¦s, con la mirada dirigida hacia el representante de Google, Lantos dijo: "Sus actividades aberrantes en China son una verg¨¹enza".
Elliot Schrage, vicepresidente de comunicaci¨®n global de Google, trat¨® de explicar que la decisi¨®n de su compa?¨ªa era la "menos mala". Asegur¨® que en su empresa no se sienten orgullosos por lo que han hecho pero "en un mundo imperfecto tuvimos que tomar una opci¨®n imperfecta". Google ha aceptado censurar sus servicios en China con tal de hacer negocio en ese mercado. Entre muchas restricciones, la versi¨®n china de Google no ofrece enlaces a p¨¢ginas cr¨ªticas con el Gobierno o a contenidos sobre derechos humanos.
Los congresistas acusaron a estas compa?¨ªas de ser una "brigada de censores". Los directivos se esforzaban por reiterar el apoyo de sus compa?¨ªas a la libertad de expresi¨®n al tiempo que justificaban la necesidad de acatar las leyes locales como ¨²nica manera de tener presencia empresarial en esos mercados.
En el caso de Yahoo, los congresistas pidieron explicaciones a la compa?¨ªa por un hecho sobradamente conocido: Shi Tao, un disidente pol¨ªtico chino, fue encarcelado despu¨¦s de que esta compa?¨ªa estadounidense proporcionara al Gobierno de Pek¨ªn "sin orden judicial" el contenido de su buz¨®n de correo electr¨®nico.
Michael Callahan, uno de los vicepresidentes de la compa?¨ªa, lament¨® ese incidente, lo calific¨® como "preocupante" y revel¨® que su empresa "lo ha discutido" con el Gobierno de China: "Pero d¨¦jenme decirles", se defendi¨®, "que condenamos el castigo de cualquier actividad internacionalmente reconocida como libertad de expresi¨®n, sea en China o en cualquier otra parte del mundo".
Ni los directivos parec¨ªan excesivamente abrumados por el acoso de los congresistas ni ellos satisfechos con sus explicaciones. Sin embargo, las comparecencias sirvieron para impulsar una nueva ley que prohibir¨¢ el ejercicio de la censura por Internet a las empresas estadounidenses. La Global Online Freedom Act establece como premisa fundamental la prohibici¨®n de ofrecer servicios censurados en terceros pa¨ªses. Compa?¨ªas como Google, Yahoo! y Microsoft no podr¨¢n ubicar sus servidores dentro del territorio de pa¨ªses cuyos gobiernos mantengan restricciones sobre el acceso de Internet. Seg¨²n los congresistas, tres pa¨ªses se ajustan a ese concepto -China, Ir¨¢n y Vietnam- y otros 12 identificados como "restrictivos" (entre ellos Cuba y Arabia Saud¨ª) ser¨ªan sometidos a una evaluaci¨®n anual.
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