"Creo que no me he quedado corto"

El nueve de abril ser¨¢ su ¨²ltimo d¨ªa al frente de la Sindicatura de Greuges y a¨²n desconoce si ese d¨ªa se ir¨¢ a su casa para volver al trabajo, como es su deseo, o s¨®lo para despedirse. Tras cinco a?os al frente de la instituci¨®n, Bernardo del Rosal quiere renovar su compromiso un lustro m¨¢s.

Pregunta. El plazo legal de su cargo como S¨ªndic de Greuges concluye en abril. ?Cree que ha llegado la hora de su despedida o est¨¢ disponible para una eventual renovaci¨®n?

Respuesta. Una renovaci¨®n no depende estrictamente de mi voluntad. Yo estoy disponible. Si me quieren renovar, magn¨ªfico, pero si las Cortes creen que debe ser otra persona la que siga al frente de la Instituci¨®n, pues tambi¨¦n magn¨ªfico. Mi compromiso era para cinco a?os; lo he cumplido y ahora estar¨ªa dispuesto a aceptar un segundo compromiso.

"Echo de menos un esfuerzo institucional del Consell y de las Cortes para dar trascendencia y relevancia a la Sindicatura"

"Mi compromiso era para cinco a?os; lo he cumplido y ahora estar¨ªa dispuesto a aceptar un segundo compromiso"

P. Si no hay acuerdo en las Cortes entre populares y socialistas, ?renovar¨ªa usted autom¨¢ticamente?

R. No. El Defensor del Pueblo y el S¨ªndic valenciano son los ¨²nicos casos en los que su titular cesa en el momento de cumplir el plazo. Haya o no acuerdo, el d¨ªa 9 de abril es mi ¨²ltimo d¨ªa en el S¨ªndic. El d¨ªa 10 me voy a casa y entra en funciones la adjunta primera, Emilia Caballero. Si hay acuerdo para la renovaci¨®n, hay que esperar a que concluya el mandato y ese d¨ªa se declara la vacante y comienza el proceso.

P. ?Se ha sentido c¨®modo trabajado con el actual gobierno de la Generalitat pese a haber sido nombrado por otro gobierno?

R. No he tenido dificultades especiales para desarrollar mi trabajo. Puedo decir que me he sentido c¨®modo. Mi funci¨®n, a trav¨¦s de las quejas que llegan, es poner en evidencia las disfunciones y las cosas que no van bien. En los momentos en los que me ha parecido que ten¨ªa que hacer una labor cr¨ªtica la he hecho y, en ese sentido, las relaciones con ¨¦ste y con el anterior gobierno fueron, en t¨¦rminos generales, similares.

P. ?Se ha sentido presionado alguna vez en el ejercicio de su trabajo?

R. Presiones directas nunca he tenido y las presiones ambientales son las que t¨² mismo te creas, porque eres consciente de que determinadas resoluciones pueden caer mal. La verdad es que no me he privado nunca de decir lo que yo pensaba, con claridad y, a la vez, con prudencia. En ocasiones es conveniente que no llegues tan lejos de lo que el asunto te pide, porque en ¨²ltima instancia no eres un gobierno bis o una instancia pol¨ªtica generadora de planes o programas pol¨ªticos. En t¨¦rminos generales he podido hacer todo lo que he querido hacer y nadie me ha coartado. En aquello en lo que me haya podido coartar, por prudencia, ha sido mi problema o mi responsabilidad.

P. ?Se ha coartado a menudo?

R. No muchas veces. En muchas quejas los ciudadanos transmiten un dibujo de la realidad m¨¢s negro de lo que a veces puedes plasmar en tus resoluciones. Yo no soy fiscal. Entiendo que en algunas ocasiones el ciudadano puede pensar que me he quedado corto. Yo creo que no me he quedado corto; he llegado hasta donde he cre¨ªdo que deb¨ªa llegar, hasta donde me han llevado las pruebas.

P. ?De qu¨¦ se quejan m¨¢s los valencianos?

R. Un poco de todo. No hay grand¨ªsimas diferencias en porcentajes. Las que m¨¢s nos llegan son urban¨ªsticas y ambientales, pero sin gran distancia sobre otras del ¨¢mbito sanitario o educativo. En las materias en las que los ciudadanos tienen relaciones con la administraci¨®n se producen m¨¢s quejas.

P. ?Se quejan m¨¢s que los andaluces, los c¨¢ntabros, los madrile?os...?

R. Los valencianos se quejan menos que los catalanes y los andaluces y m¨¢s que los castellano- manchegos, castellano-leoneses y gallegos, si se compara en t¨¦rminos proporcionales la poblaci¨®n con el n¨²mero de quejas. No obstante, tanto en Andaluc¨ªa como en Catalu?a la instituci¨®n tiene m¨¢s trayectoria y una presencia social m¨¢s consolidada.

P. ?Cree que el Consell no promociona adecuadamente la Sindicatura de Greuges?

R. Desde el S¨ªndic intentamos hacer un esfuerzo para dar a conocer la figura, pero echo de menos el esfuerzo institucional, tanto del Consell como de las Cortes. Creo que deber¨ªan ayudar a dar trascendencia y relevancia a la instituci¨®n.

P. ?Trata bien la Administraci¨®n al administrado?

R. La auton¨®mica, mejor que la local, porque su nivel de profesionalizaci¨®n es mayor y su nivel de personalizaci¨®n, menor. La Administraci¨®n local trata peor al administrado porque hay una personalizaci¨®n de los temas que, a veces, limita la profesionalizaci¨®n. Salvo en las grandes capitales, los temas municipales y personales se entremezclan. La gente se conoce y eso influye en la forma en la que se deciden las cosas. En la Administraci¨®n auton¨®mica, las resoluciones tienen un mayor nivel de profesionalizaci¨®n.

P. ?Qu¨¦ Administraci¨®n les pone a ustedes m¨¢s trabas?

R. En t¨¦rminos generales, la local, aunque las auton¨®micas suelen tener m¨¢s impacto en la opini¨®n p¨²blica.

P. Una de las personas que suena como S¨ªndic es el senador del PP Miguel Barcel¨®. Los socialistas creen que no es bueno que el cargo lo ocupe una persona con 82 a?os. ?Qu¨¦ opina usted?

R. Yo no puedo poner objeciones a nadie que las Cortes elijan. No voy a quitar m¨¦ritos a nadie ni por edad ni por nada.