"Me despert¨® un trueno prolongado muy fuerte"
A Rafael Hern¨¢ndez Mor¨ªn lo despert¨® "un trueno prolongado muy fuerte". Su mujer y sus dos hijos vieron c¨®mo, al instante, la planta de los dormitorios bajaba "como en un ascensor" hasta posarse literalmente sobre el segundo piso. Seg¨²n reconoci¨® ayer a este peri¨®dico desde el hotel donde se aloja provisionalmente, "el peso de los escombros empuj¨® las casas hacia delante y lateralmente". Fueron trasladados al hospital, donde les dieron el alta durante la misma ma?ana. Con "amargura por los muertos y heridos" y con algunas contusiones, a¨²n asustado y muy resignado por lo ocurrido, reconoce que "el muro parec¨ªa muy fuerte" y nunca percibi¨® grieta, fisura o humedades que delataran su mal estado en los ¨²ltimos 14 a?os.
Rafael Meli¨¢n escuch¨® "un ruido ensordecedor", sinti¨® "c¨®mo la casa se mov¨ªa" y se derrumbaba a sus espaldas, mientras ¨¦l y su familia corr¨ªan hacia la puerta "m¨¢s r¨¢pido que los escombros".
A Laureano Torres lo despert¨® una de sus hijas. "Me dijo: 'Corre pap¨¢". De esos pocos segundos s¨®lo recuerda que "parec¨ªa estar en mitad de un fuerte terremoto", aunque su ¨²nica preocupaci¨®n era salvar a su hijo de 10 a?os que qued¨® sepultado por un alud de piedras y ladrillo. "Saqu¨¦ todas las piedras que pude hasta que no pude con las rocas m¨¢s grandes; me concentr¨¦ en mantenerlo despierto y que me contestara a todo tipo de preguntas hasta que los bomberos lo sacaron de all¨ª". En el hospital s¨®lo diagnosticaron al ni?o un traumatismo tor¨¢cico leve.
Bajo las rocas
Otro inquilino relat¨® c¨®mo protegi¨® con su cuerpo a su esposa y, al levantar la cabeza, "vi que nos hab¨ªamos quedado sin fachada". Otros a¨²n se estremec¨ªan al recordar los gritos de quienes hab¨ªan quedado bajo las rocas. Un tercero lleg¨® a asomarse a la ventana y ver el polvo que levant¨® el derrumbe, "pero cre¨ª que era calima", la tradicional nube de polvo sahariano que llega a las islas con frecuencia.
A pocos metros de la tragedia, un vecino, cubierto con una bata, reconoc¨ªa que hab¨ªa escuchado un ruido "como el de un choque" y que se hab¨ªa dado la vuelta para seguir durmiendo, "hasta que tocaron en la puerta para evacuarnos a todos". Elena Gonz¨¢lez Rodr¨ªguez lloraba a la salida del hospital, con un collar¨ªn que le proteg¨ªa las cervicales. Hab¨ªa quedado atrapada, junto a su novio, varias horas: "No he tenido tiempo de pensar lo que ha ocurrido", dijo.
Entre los vecinos de la zona, Jos¨¦ Santana anunci¨® que exigir¨¢ al Ayuntamiento que se revisen todos los muros de contenci¨®n de este barrio, mientras Pascual Mota advert¨ªa de que el mal asfaltado de estas calles ha podido dejar al descubierto grietas por donde la abundante lluvia de este a?o se pudo filtrar y ejercer una presi¨®n inusual sobre la pared que cay¨®.
Algunos t¨¦cnicos en construcci¨®n de este tipo de estructuras consultados ayer reconocieron que un muro de estas dimensiones "bien construido en hormig¨®n, no hace crac y se derrumba en unos segundos; siempre avisa con grietas, fisuras y fugas de agua".
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