Regueiro deja de ser invisible

Acostumbrado a ejercer de entrenador, Amedeo Carboni, que en abril cumplir¨¢ 41 a?os, ha apadrinado a cualquier compa?ero que transite por su banda izquierda. Primero lo hizo con un jovenc¨ªsimo Vicente, a quien anim¨® a competir con Kily Gonz¨¢lez. Luego con Fabio Aurelio, a quien mejor¨® en las artes defensivas. Y ahora ha acogido a Mario Regueiro. En la pasada jornada, antes del partido frente a la Real Sociedad, el italiano dialog¨® con Regueiro como si fuera el t¨¦cnico. "Debes tirar m¨¢s a puerta, pru¨¦balo", le dijo. Dicho y hecho. El uruguayo marc¨® en Anoeta el primer doblete desde que en 2000 lleg¨® a la Liga espa?ola desde el Nacional de Montevideo, al Racing. Dos goles que voltearon el marcador (1-2, la primera remontada del Valencia en un a?o), y que confirmaron su ascendencia tras pasar inadvertido la primera parte del campeonato.

"Antes no pintaba nada, ahora me siento otra vez jugador. La vida me ha cambiado much¨ªsimo"

En las primeras 18 jornadas, Regueiro disput¨® 79 minutos. La mayor¨ªa de las veces ni siquiera era convocado. El t¨¦cnico, Quique Flores, aseguraba que no le ve¨ªa en forma despu¨¦s de un complicado traspaso del Racing, con el que acab¨® contrato en junio. El equipo c¨¢ntabro se neg¨® a enviar su pase porque reclamaba al Valencia 1,6 millones de euros de indemnizaci¨®n en concepto de un acuerdo entre varios clubes de Primera para recibir compensaciones por los jugadores que quedaran libres. El Valencia se neg¨® a pagar, el Racing denunci¨® el caso -hay un juicio pendiente- y Regueiro no fue inscrito en la Copa Intertoto. Hasta finales de septiembre no pudo jugar. Para entonces, Quique hab¨ªa armado un grupo sin ¨¦l.

Regueiro pas¨® a ser invisible. Ni siquiera cuando Vicente, due?o del interior izquierdo, fue baja por unas molestias, fue convocado. El uruguayo tuvo que ver desde la grada c¨®mo Mista ocupaba su posici¨®n. Tan apartado estaba que en el mercado de invierno acord¨® una cesi¨®n al Betis, que ya quiso ficharle en verano. Pero Quique, a ¨²ltima hora, la fren¨®. "No quer¨ªa que me marchase, me dijo que iba a tener minutos en la Copa y que cre¨ªa en m¨ª", explica el uruguayo, que renaci¨® en enero. Lleg¨® la Copa y Regueiro firm¨® un gran partido y marc¨® contra el Villarreal, se lesion¨® Vicente poco despu¨¦s y ha cubierto su ausencia, decisiva otras veces, con brillantez. "La vida me ha cambiado much¨ªsimo. El a?o ha arrancado bien y estoy marcando. Ten¨ªa que esperar mi momento y estar tranquilo. He aprendido que no debo bajar nunca la cabeza. Antes no pintaba nada y ahora me siento otra vez jugador. Vicente es el mejor en su puesto, pero no estaba dispuesto a bajar los brazos", afirma.

El uruguayo ha sido titular en las cinco ¨²ltimas jornadas, ha marcado tres goles en la Liga y otro en la Copa. Contra la Real se atrevi¨® incluso con un disparo sin ¨¢ngulo que sorprendi¨® a Riesgo, que esperaba el centro. "Vi que el portero sal¨ªa y trat¨¦ de batirle, chut¨¦ a porter¨ªa, pegu¨¦ fuerte y se fue cerrando", explic¨® luego. Corri¨® a celebrarlo, claro, con Carboni, su consejero.

A sus 27 a?os, Regueiro se ha asentado en Mestalla. Gasta bromas en el vestuario y busca motes a sus compa?eros, pese a que no comparte con ellos sus aficiones: le gusta la m¨²sica caribe?a y las pel¨ªculas de boxeo. "Es muy bueno en velocidad, tiene un gran disparo y regatea", afirma Javier Subirats, director deportivo del Valencia. "Es el m¨¢s r¨¢pido de la Liga. Y muy polivalente, puede jugar desde lateral hasta delantero", le define Manolo Preciado, entrenador del Racing, con quien coincidi¨® el curso pasado. En Santander marc¨® 21 goles en 114 partidos en cinco a?os, ocho la campa?a anterior, su mejor registro. Con la selecci¨®n uruguaya, con la que no ir¨¢ al Mundial al perder la repesca con Australia, ha jugado tambi¨¦n de media punta. Renacido en el Valencia, Regueiro apunta alto: "El Barcelona tiene m¨¢s presi¨®n, les hemos recortado demasiados puntos".