Miller completa su fracaso
Segundo oro de Raich, que lidera el triplete austriaco en el eslalon
Bode Miller, el esquiador m¨¢s famoso de los ¨²ltimos tiempos, pasar¨¢ a la historia de los Juegos con la letra muy peque?a. Plata en el gigante y en la combinada hace cuatro a?os en Salt Lake City, su palmar¨¦s engord¨® despu¨¦s tanto como sus pol¨¦micas costumbres y declaraciones. Esta temporada, a diferencia de la anterior, lo extradeportivo hab¨ªa superado a sus resultados, pero siempre se esperaba su genialidad en Sestriere. Pero acab¨® mucho peor de lo que hab¨ªa empezado. Despu¨¦s de ser s¨®lo quinto en descenso, no terminar el supergigante y la combinada, y ser sexto en el gigante, ayer apenas dur¨® 20 segundos en el eslalon. La ¨²ltima prueba masculina vivi¨® un triplete austriaco con el segundo oro de Benjam¨ªn Raich, ya ganador del gigante, luego de vivirse una tragedia nacional italiana, pues con el dorsal 1 se sali¨® a los 36 segundos y 34 puertas Giorgio Rocca, qu¨ªntuple ganador esta temporada.
Raich, l¨ªder de la Copa del Mundo, aunque a a?os de luz de su carisma, hizo lo que Alberto Tomba en Calgary 88. Miller, en cambio, dur¨® a¨²n menos que Rocca. Primero cometi¨® un error al girar en la cuarta puerta y poco despu¨¦s pas¨® a caballo la 14. Se par¨® all¨ª mismo sin un gesto de enfado y se march¨® por un lado de la pista, sin llegar a la meta, desapareciendo para no dar explicaciones. Un caballero. El eslalon, modalidad en la que empez¨® brillando en su carrera, ya no era en la que mejor estaba tras mejorar en las pruebas m¨¢s r¨¢pidas. Ni siquiera estaba entre los 15 mejores y sali¨® el 17?. Pero eso fue lo de menos. Hace d¨ªas estaba fuera de los Juegos. Lleg¨® de juerga por las discotecas y acab¨® torci¨¦ndose un pie jugando al baloncesto. Curiosa preparaci¨®n para ganar medallas en esqu¨ª o en cualquier cosa.
"Creo que ha hablado m¨¢s de la cuenta a la prensa", coment¨® el director t¨¦cnico de Estados Unidos, James Hunt, que se consol¨® con los inesperados triunfos de Julia Mancuso en el gigante y de Ted Ligety en la combinada. Porque Dahron Rahlves, el californiano que amenazaba tambi¨¦n con arrasar antes de retirarse, tambi¨¦n vino a pasearse en caravana, como Miller, pero ¨¦l, m¨¢s serio, con su mujer y su perro huskie: Fue s¨®lo 10? en descenso, 9? en supergigante y abandon¨® en el gigante.
Los estadounidenses, disgustos incluidos, est¨¢n por la cabeza del medallero general y de los esc¨¢ndalos. Su propio comit¨¦ pidi¨® ayer la expulsi¨®n de la Villa Ol¨ªmpica y de los Juegos de Jeret Peterson, s¨¦ptimo en los saltos de esqu¨ª art¨ªstico, que se peg¨® la noche anterior, borracho, con un compatriota en la calle.
Ayer, en los 5.000 metros de patinaje de velocidad femeninos hubo doble historia. La alemana Claudia Pechstein no pudo unirse a leyendas como los atletas Carl Lewis o Al Oerter, el regatista Paul Elvtroem o el biatleta Alexander Tijonov, cu¨¢druples oros consecutivos en los Juegos. Se lo impidi¨® la canadiense Clara Hughes, una de las ya repetidas ciclistas-patinadoras, que fue bronce contrarreloj y en ruta en Atlanta 96.
Los Juegos terminan hoy con la final in¨¦dita de hockey hielo Suecia-Finlandia, y los 50 kil¨®metros de esqu¨ª de fondo, en los que saldr¨¢n ya todos los retenidos por elevada hemoglobina y s¨®lo se puede esperar una digna actuaci¨®n espa?ola del veterano c¨¢ntabro Juan Jes¨²s Guti¨¦rrez, Jotas, en su despedida ol¨ªmpica en su quinta presencia. Todo lo que sea meterse entre los 15 o 10 primeros ya ser¨ªa una haza?a. El punto final lo pondr¨¢ una ceremonia de clausura carnavalesca en la que s¨ª estar¨¢ Silvio Berlusconi, ausente en la apertura.
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