Centenares de presos de Al Qaeda y talibanes se amotinan en un penal afgano
El Ej¨¦rcito, apoyado por soldados de la OTAN, rodea el presidio para evitar una fuga
Presos talibanes y de Al Qaeda condenados por delitos de terrorismo se hicieron fuertes en la noche del s¨¢bado en un sector de la prisi¨®n de alta seguridad de Policharki, en Kabul, en la que se hacinan 2.000 personas. Las autoridades aseguran que se han producido bajas en el tiroteo con los guardias y que algunos detenidos gritaban: "?Al¨¢ es grande!". El Ej¨¦rcito afgano, apoyado por tropas de la OTAN, ha rodeado el recinto con cientos de hombres y carros de combate para evitar una fuga. Las autoridades sostienen que tratar¨¢n de resolver el mot¨ªn mediante la negociaci¨®n.
El mot¨ªn estall¨® cuando cientos de presos que se negaban a vestir los uniformes carcelarios (obligatorios desde el s¨¢bado) tomaron como rehenes a dos guardas. "Est¨¢n implicados unos 1.500 reos", asegur¨® un funcionario. "La situaci¨®n se descontrol¨® enseguida y comenz¨® un enfrentamiento entre los presos -muchos de ellos talibanes y de Al Qaeda- y la polic¨ªa, y en el que unas 30 personas resultaron heridas". Los detenidos, armados con cuchillos y palos arrancados de los muebles, se hicieron fuertes en el segundo bloque. En el exterior eran visibles columnas de humo despu¨¦s de que los amotinados quemaran colchones y mantas. Se o¨ªan proclamas -"larga vida a los prisioneros" y "Al¨¢ es grande"- mezcladas con disparos.
Cientos de soldados y polic¨ªas afganos, apoyados por carros de combate y blindados tomaron posiciones en el exterior del penal, construido por los sovi¨¦ticos en los setenta y que se convirti¨® en un centro de torturas. Tambi¨¦n eran visibles tropas de la OTAN y norteamericanas.
"Queremos acabar con este problema de forma pac¨ªfica. Lamentablemente, los prisioneros no est¨¢n unidos y tienen diferentes demandas. No hay un l¨ªder que pueda hablarnos", dijo el viceministro de Justicia, Mohammad Qasim Hashimzai, encargado de resolver la situaci¨®n. A pesar de ello, los presos aceptaron trasladar a 70 mujeres prisioneras que se hallaban en la zona bajo su control. Las autoridades explicaron que los presos hab¨ªan cavado un t¨²nel hasta las mujeres, pero no pudieron confirmar si ¨¦stas hab¨ªan sido violadas como sostienen algunos.
"Miembros de Al Qaeda de diferentes pa¨ªses y talibanes est¨¢n detr¨¢s del mot¨ªn", dijo el viceministro. "Parece que esta situaci¨®n se va a mantener durante la noche. Hemos adoptado las medidas adecuadas para evitar que se extienda". Hashimzai asegur¨® que en la prisi¨®n hay m¨¢s de 2.000 presos, de los que 350 son talibanes o de Al Qaeda.
El general Mahbub Amiri, jefe de la Fuerza de Reacci¨®n R¨¢pida en Kabul, dijo que la revuelta era una maniobra de distracci¨®n pues el objetivo era la fuga. La obligaci¨®n de vestir el uniforme de preso, que entr¨® en vigor el s¨¢bado, tiene como objetivo evitar una fuga como la del mes pasado cuando siete talibanes lograron salir del penal confundidos con los familiares.
Hashimzai abandon¨® la c¨¢rcel al atardecer, e inform¨® de que las autoridades carcelarias intentar¨¢n reanudar las negociaciones el lunes. Poco despu¨¦s se oyeron algunos disparos aislados desde el interior de la c¨¢rcel. Algunos presos aprovecharon para volver a gritar: "?Al¨¢ es grande!".
A finales de noviembre de 2001, cuando a¨²n no se hab¨ªan apagado los rescoldos de la guerra que expuls¨® a los talibanes del poder en Afganist¨¢n, un numeroso grupo de presos, muchos de ellos mercenarios extranjeros, se hicieron con el control de la fortaleza de Qila-i-Jangi, en las afueras de Mazar-i-Sharif. Lograron desarmar a los guardias y hacerse con el polvor¨ªn.
La respuesta estadounidense fue contundente: sus aviones bombardearon esa fortaleza del siglo XIX mientras que los milicianos uzbekos del se?or de la guerra Abdul Rashid Dostum atacaron por tierra apoyados por comandos norteamericanos. Decenas de prisioneros murieron en el fuerte, en el que se encontraban recluidos entre 300 y 600 combatientes de las brigadas internacionales de Osama Bin Laden.
![Soldados afganos se despliegan en los alrededores de la prisi¨®n de Policharki, en Kabul.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/3WMFQUYJCR5EBS5P32G6LWXBCA.jpg?auth=eca473fdc2f2a17356d3b7cbf607655c7d0db430953b61c2bc0ec2025c387aee&width=414)
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