Incre¨ªble, pero veros¨ªmil
Paz mundial
(Pasado). Demuestra, con una l¨®gica -nunca mejor dicho- aplastante, que es m¨¢s seguro para la paz mundial amenazar a los enemigos con armas sucias que con una guerra convencional.
(Presente). En consecuencia, deduce de forma no menos aplastante que, para garantizar la paz mundial, es preciso eliminar preventivamente a todos los enemigos que pudieran poseer armas sucias (que, en el lenguaje pol¨ªticamente correcto, se llaman ahora "de destrucci¨®n masiva", o sea indiscriminada, sin distinci¨®n entre lo militar y lo civil), resultando por completo irrelevante que las posean o no.
En consecuencia, para garantizar la paz es preciso eliminar a todos los enemigos que pudieran poseer armas sucias
Para reducir gastos en la clase turista se elimina la lectura de peri¨®dicos y la distribuci¨®n de men¨²s
(Futuro). As¨ª pues, concluye irrefutablemente que la distinci¨®n entre lo militar y lo civil, as¨ª como la diferencia entre armas sucias y limpias, es una obsolescencia, y decide que la mejor manera de desactivar toda posible amenaza contra la paz mundial consiste en hacer a esta ¨²ltima tan indiscernible de la guerra mundial que toda amenaza de guerra mundial resulte inveros¨ªmil.
Lo peque?o es terrible
(Pasado). Las "grandes organizaciones" (incluidos los Estados-naci¨®n y las empresas p¨²blicas) ridiculizan, con su poder imperioso y omn¨ªmodo, a unos peque?os grup¨²sculos (incluidas las naciones sin Estado o con un Estado peque?ito y las empresas sin domicilio fiscal) que s¨®lo pueden subsistir de las migajas que dejan aqu¨¦llas.
(Presente). Las "peque?as organizaciones", precisamente por lo modesto de su tama?o y por no tener gastos fijos ni costes sociales, empiezan a competir agresivamente con aquellas "grandes" que las ridiculizaban, ofreciendo -justamente- "precios de risa" que producen la crisis irreversible de los Estados-naci¨®n y las empresas p¨²blicas, obligadas a reducir hasta el rid¨ªculo sus gastos fijos y sus costes sociales (a partir de ese momento, el t¨¦rmino "barato" es sustituido por el eufemismo "competitivo").
(Futuro). Una vez demostrada la inviabilidad y la corrupci¨®n de las grandes organizaciones (incluidos los sistemas p¨²blicos de la Seguridad Social y los sindicatos) y la perversidad de los gastos fijos y los costes sociales, se procede a aplicar a escala mundial las medidas racionalizadoras arbitradas por las "grandes compa?¨ªas" a¨¦reas para reducir gastos en la clase turista: se elimina la lectura de peri¨®dicos (que ya se sabe lo que contribuyen a la crispaci¨®n) y la distribuci¨®n de men¨²s (que engordan de modo inconveniente a la poblaci¨®n); aprovechando la disminuci¨®n de la ansiedad y de la cintura propiciada por estas medidas, decrece -de nuevo hasta el rid¨ªculo- el espacio necesario para los habit¨¢culos personales y, finalmente, mengua tambi¨¦n la necesidad de las propias personas (a menudo de trato dif¨ªcil, como es sabido), sustituidas en los servicios p¨²blicos por m¨¢quinas de autofacturaci¨®n, y hasta de los billetes, que, para tranquilidad de los bosques, ahora son solamente electr¨®nicos y han prescindido de las pesad¨ªsimas garant¨ªas: un nuevo triunfo de los derechos del hombre y del pasajero.
Provocadores
(Pasado). A un sacerdote de Valencia se le ocurre la genial idea de que el maltrato a las mujeres es la justa reacci¨®n de los varones ante sus provocaciones, y el arzobispado le abre un expediente y los tribunales estudian acusarle de apolog¨ªa del terrorismo.
(Presente). Publica -en la creencia de que se trata de un simple acto ordinario de libertad de prensa en un Estado de derecho- una caricatura de Mahoma ocultando una bomba en el turbante; inmediatamente, le amenazan de muerte por bomba unos individuos con turbante que invocan el nombre de Mahoma. Entonces, algunos tienen la inspirada ocurrencia de que el caricaturista es un provocador... ?y de que ¨¦l es el culpable de asociar el nombre de Mahoma con el terrorismo! Y, en lugar de abrirles expediente o de acusarles de apolog¨ªa del terrorismo, todo el mundo considera que estos sacerdotes inspirados son los aut¨¦nticos amigos de la paz mundial (v¨¦ase m¨¢s arriba).
(Futuro). Cada uno de los actos ordinarios de funcionamiento del Estado social de derecho (la atenci¨®n sanitaria, la instrucci¨®n p¨²blica, los tribunales de justicia) se convierte en una provocaci¨®n, hasta el punto de que el propio "Estado de bienestar" es juzgado -de acuerdo en esto con el diagn¨®stico precoz de las empresas sin domicilio fiscal (v¨¦ase m¨¢s arriba), que ya desde antiguo lo consideraban poco competitivo (v¨¦ase m¨¢s arriba)- como una inmensa afrenta contra sus beneficiarios y como una "falta de respeto", palabra esta ¨²ltima que pierde por completo su acepci¨®n ilustrada para significar ya solamente aquello mismo que significaba en los labios de Don Vito Corleone en El Padrino. Y los caricaturistas se quedan sin empleo (porque ahora es el propio "Estado de bienestar" el que se ha convertido en una caricatura de s¨ª mismo).
Planeta limpio
(Pasado). Presentan estudios estad¨ªsticos que prueban m¨¢s all¨¢ de toda duda que la guerra (incluida la santa), la competitividad (v¨¦ase) y el respeto (v¨¦ase) son reaccionarios, mientras que el tabaco es progresista (como lo prueban algunos iconos irrebatibles, entre los cuales Sartre, Fidel Castro y los Beatles, y a¨²n m¨¢s el hecho de que el indiscutiblemente reaccionario Hitler pretenda relacionarlo con el c¨¢ncer de pulm¨®n). De paso, consiguen explicar la Historia entera en t¨¦rminos de lucha de clases y como un progreso arduo hacia una sociedad sin ellas.
(Presente). Presentan estudios estad¨ªsticos que prueban m¨¢s all¨¢ de toda duda que la guerra (incluida la santa), la competitividad (v¨¦ase) y hasta el respeto (v¨¦ase) son tambi¨¦n progresistas, mientras que el tabaco es reaccionario (como lo prueban algunos iconos irrebatibles, como las fotograf¨ªas digitalmente retocadas de Sartre y la correcci¨®n pol¨ªtica realizada en la portada de Abbey Road, y a¨²n m¨¢s el hecho de que en las pel¨ªculas s¨®lo fumen los m¨¢s depravados asesinos m¨²ltiples), adem¨¢s de constituir un arma sucia (v¨¦ase). De paso, consiguen explicar todos los conflictos del universo mundo en t¨¦rminos de "valores", "civilizaciones", "culturas" o "naciones", haciendo de estos conceptos la clave de la Historia y de la Historia misma un progreso largo y dif¨ªcil hacia una sociedad sin valores, civilizaciones, culturas ni naciones.
(Futuro). Presentan estudios estad¨ªsticos que prueban m¨¢s all¨¢ de toda duda que lo ¨²nico claramente reaccionario es fumar (y lo ¨²nico definitivamente progresista no hacerlo), incluyen a la nicotina en la lista de armas de destrucci¨®n masiva (porque el humo no discrimina) y consiguen explicar todos los conflictos del universo mundo en t¨¦rminos de "fumadores" y "no fumadores", haciendo de estas nociones el elucidario de la Historia, y de la Historia misma un camino lleno de parches hacia un planeta sin nicotina, enteramente progresista, sano y pac¨ªfico, en donde ser reaccionario estar¨¢ prohibido incluso en la privacidad vergonzante del pecador solitario.
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