El PSOE denuncia que toneladas de escombros de la M-30 se almacenan en solares urbanos
Vecinos de Usera y Carabanchel se quejan del ruido y el polvo que generan los vertidos
Las obras de reforma de la M-30 siguen causando problemas a los madrile?os. Algunos de los camiones que cada d¨ªa recogen las tierras y escombros de la M-30 abandonan su carga en varios solares de Madrid. En la calle de Antonio Leyva, en Carabanchel, los vecinos se quejan de los montones de tierra vertidos en una parcela, mientras el Ayuntamiento hace la vista gorda, seg¨²n el PSOE. Otra parcela en la calle de Antonio L¨®pez, en Usera, acumula monta?as de tierra y lodos a pocos metros de unas viviendas cuyos ocupantes protestan por la suciedad y el ruido de la escombrera.
Una gran cantidad de tierra y escombros salen cada d¨ªa de las obras de la M-30. Cientos de camiones transportan los residuos a un centro especial en Arganda del Rey. El Ayuntamiento, a trav¨¦s de la sociedad mixta Madrid Calle 30, contrat¨® con la federaci¨®n regional de organizaciones de transporte de Madrid (Fenadismer) que los camioneros trasladaran a Arganda del Rey los 10 millones de metros c¨²bicos de residuos que se calcula que generar¨¢n las obras de la M-30 a cambio de 20 millones de euros.
Pero algunos de estos camiones vac¨ªan su carga sin salir de la capital, creando unas escombreras intermedias. Entre la calle de Antonio L¨®pez y la de Eugenio Caxes, en el distrito de Usera, una monta?a de unas 1.000 toneladas de tierra y lodos crece en una parcela de tres hect¨¢reas, seg¨²n el concejal socialista Pedro Sant¨ªn. La tierra es negruzca y seca. Los peatones tienen que refugiarse del polvo que levantan los camiones al entrar o salir.
El solar es propiedad de Nozar, que, seg¨²n dos trabajadores de las obras, lo tiene cedido a las sociedades que trabajan en la M-30. "Son tierras de las obras del r¨ªo", asegura uno de los empleados. "Las traen en camiones peque?os, y cuando hay mucha cantidad se las llevan a Arganda en otros m¨¢s grandes", apunta el otro. Un portavoz de la Concejal¨ªa de Urbanismo admite que existe un acuerdo con Nozar para usar el solar para acopio de materiales y tierra del r¨ªo.
Los vecinos de Residencial Pryconsa, en la calle de Eugenio Caxes, a escasos metros del solar, recogieron firmas hace unas semanas para protestar contra el polvo y el ruido. "Est¨¢ todo sucio, se les mete el polvo por las casas", relata un vigilante de la urbanizaci¨®n. El portal est¨¢ lleno de tierra y los coches lucen una fina capa de arena.
El concejal socialista de Medio Ambiente, Pedro Sant¨ªn, denuncia la existencia de varias de estas escombreras por toda la capital. "Hay casi 2.000 toneladas de escombros repartidos por Madrid", asegura. "Incluso m¨¢s de 500 toneladas de tierra y lodos se han vertido de forma ilegal en un espacio natural protegido entre la M-40 y el monte de El Pardo". El edil socialista recuerda quela zona es "uno de los ecosistemas m¨¢s importantes de Fuencarral-El Pardo". Sant¨ªn acusa al Ayuntamiento de "hacer la vista gorda con estos vertidos que est¨¢n ensuciando y destrozando zonas verdes de la ciudad".
En la calle de Antonio Leyva, frente al parque de Comillas, en Carabanchel, han surgido en las ¨²ltimas semanas varios montones de tierra oscura y seca. Seg¨²n los vecinos, procede de las obras de la M-30. Felipe Casado, que vive justo enfrente del solar, cuenta c¨®mo varios camiones vertieron montones de tierra y lodos. "Un d¨ªa llegaron a las dos de la ma?ana y vertieron la carga. Se ha repetido durante varios d¨ªas", se queja. Seg¨²n Casado, los solares son propiedad del Ayuntamiento. "Lo peor es el estruendo que hacen cuando terminan. Los camiones dan un golpe tremendo para vaciar los restos de tierra del contenedor", relata.
Casado cuenta c¨®mo el presidente de su comunidad de vecinos llam¨® al Consistorio para protestar por los vertidos. "Le dijeron que no pod¨ªan hacer nada", cuenta. Los vecinos denuncian que estas escombreras se han convertido en un nido de ratas y suciedad.
Urbanismo explica que los escombros de la M-30 son depositados en un paraje denominado El Hoy¨®n, en Arganda del Rey, para rellenar el hueco dejado por una antigua cantera. Con la tierra y escombros se pretende rehabilitar la zona.
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