Emplazados

Casi ocho a?os despu¨¦s del famoso Acuerdo de Viernes Santo, las instituciones de Irlanda del Norte est¨¢n gripadas y llevan sin funcionar desde 2002, cuando los protestantes se retiraron de ellas al considerar que el IRA no hab¨ªa dado pasos suficientemente claros en su desarme y renuncia a la violencia. Ayer, los primeros ministros del Reino Unido e Irlanda, Blair y Ahern, dieron un plazo definitivo para poner en marcha las instituciones norirlandesas y llegar a un Ejecutivo integrado capaz de tomar las riendas. Si para el 24 de noviembre no lo han conseguido, dar¨¢n carpetazo al complejo intento y estas provincias pasar¨¢n a ser regidas conjuntamente desde Londres y Dubl¨ªn. Con toda la raz¨®n, han considerado que est¨¢ en manos de los pol¨ªticos norirlandeses cerrar "un cap¨ªtulo o el libro".

Hoy por hoy, y pese a un acto de violencia sectaria o mafiosa tan lamentable como el asesinato de Denis Donaldson, topo en el IRA, el peligro de un regreso a los tiempos negros es m¨ªnimo. Aunque s¨®lo el pasado verano renunci¨® el IRA formalmente a la lucha armada, y el proceso de destrucci¨®n de sus arsenales no ha culminado del todo, estos pasos deber¨ªan ser suficientes para que los protestantes m¨¢s radicales y mayoritarios de Ian Paisley volvieran el 15 de mayo a la Asamblea de Stormont para negociar con los cat¨®licos y republicanos la creaci¨®n de un Ejecutivo que pueda afrontar los retos que tiene el Ulster. No s¨®lo la violencia, sino su integraci¨®n en un mercado integrado de la energ¨ªa, una tarifa ¨²nica para los m¨®viles o un mayor esfuerzo policial contra el crimen com¨²n.

Ayer, sin embargo, lejos de mostrarse constructivo, Paisley critic¨® la "injerencia" de Dubl¨ªn en los asuntos del Ulster, mientras el l¨ªder del Sinn Fein, Gerry Adams, se mostraba dispuesto a colaborar. Blair y Ahern han dado a los pol¨ªticos norirlandeses donde m¨¢s les duele: en su bolsillo. Si para el 24 de noviembre no hay acuerdo, les cortar¨¢n sueldos y dietas, sin perspectiva de recuperarlos, pues no habr¨¢ elecciones en 2007.

Los dos primeros ministros llevan 10 a?os trabajando codo a codo en este proceso de paz y saben por ello que su tiempo pol¨ªtico tiene tambi¨¦n fecha de caducidad, sobre todo en el caso de Blair, que se comprometi¨® a no volver a presentarse a la reelecci¨®n. El borr¨®n de Irak no se ir¨¢ f¨¢cilmente, pero si logra encarrilar definitivamente el Ulster en la senda de la paz y la modernidad, ¨¦sa ser¨¢ la contribuci¨®n de Blair que pasar¨¢ a la historia.